Cuando Silvia estuvo mucho más calmada luego de bebe un vaso con agua y tomar descanso, Lana decidió comenzar a explicarle para que entendiera un poco cual había sido la historia de Andrew durante todo este tiempo que estuvo solo.
-Aquel día en el que Andrew llego estaba bastante lastimado, lo trajeron unas personas del pueblo más cercano, comentaron que estuvo en un hospital durante un tiempo recuperándose de graves heridas, eso era notorio debido a que cuando llego aquí tenía una gran venda cubriéndole gran parte de la cabeza y un yeso en su brazo, se veía bastante lastimado y lo peor de todo fue que en el momento de buscar realizar algún tipo de conversación con él, ni siquiera respondía las preguntas que se le hacían, asi que decidimos dejarlo descansar por unos días en la habitación. Como sabes Silvia en nuestro establecimiento tenemos muchos pacientes que al igual que el se encuentran perdidos, no recuerdan quienes son por diferentes razones, nuestro deber es cuidar de ellos hasta que mejoren-
-Pasados los días en los cuales Andrew no quería ni siquiera comer, nuestra ayudante Laila tomo la decisión de buscar acercarse a él para así sacar un poco de conversación plan que por suerte resulto exitoso, poco a poco comenzó a tomar confianza con ella e hicieron una bonita amistad es por eso que su expresión de confusión y miedo cambio cuando vio a esta chica entrar en la habitación, el confía totalmente en ella para absolutamente todo-
-¿Puedo hacerle una pregunta?- Interrumpió Silvia mientras le observaba seriamente – ¿Durante todo este tiempo Andrew no tuvo aunque sea algún tipo de mejoría en cuanto a sus recuerdos? ¿Absolutamente nada?-
-Bueno… Andrew se refiere mucho a una mujer llamada Cristina, siempre la nombra y dice que está en noruega-
-Cristina es su madre- Respondió inmediatamente
-Como experta Silvia yo creo que sería bueno que llamaras a su madre, quizás si ella viniera aquí al instituto él podría estar mucho más tranquilo, eso podría causarle ya sabes algún tipo de confianza, no creo que sea bueno el simple hecho de decirle “Oye ella es tu esposa y debes irte a casa con ella” cuando ni siquiera te recuerda-
Aquella última frase le dio una gran patada en el corazón. Todavía no podía entender cómo ni siquiera la reconociera en lo más mínimo.
Aquella tarde antes de abandonar aquel instituto Silvia observo atentamente por la ventana de la oficina de Lana la cual daba vista hacia el patio en donde normalmente compartían aquellas personas un momento de diversión, todos estaban divirtiéndose junto a Laila quien les estaba enseñando algunos pasos de baile incluyendo a Andrew quien le tomaba de la mano y bailaba junto a ella al ritmo de la música, Silvia dio un gran suspiro mientras con su mano acariciaba poco a poco el cristal de aquella ventana. Le costaba entender que aunque el estuviese físicamente allí aun no lo había recuperado y eso era lo más difícil de todo.
Salió del establecimiento Junto a Andrea mientras se colocaba al teléfono con Cristina la Madre de Andrew era su único familiar debido a que su padre le había abandonado cuando era pequeño y no tenía hermanos debió a esto ella se habia mudado a Noruega en donde conocio a un buen hombre llamado pablo con el cual estaba viviendo actualmente
Cristina estaba enterada sobre la busquedad de su hijo desde el primer dia en el que se entero de que realmente no habia muerto y estaba ansiosa por tener noticias sobre el.
-¿Silvia?- Dijo apenas atendio la llamada
Ella hiso todo los posibles por contener el llanto y dolor que quería sacar a los 4 vientos
-Cristina lo encontré, encontré a Andrew-
-Dios …- Se escucho al otro lado de la línea que la mujer comenzo a llorar - ¡Pablo encontraron a mi hijo!- Grito a su pareja – Por favor dime que se encuentra sano, que se encuentra bien-
-Físicamente esta bien querida, se ve bien – Dijo seria, necesitaba buscar la manera de que Cristina no recibiera aquella mala noticia de una manera tan fuerte, ella era una persona un poco mayor-
-¡Estoy tan feliz querida, por favo déjame hablar con mi niño dile que voy a ir a visitarlos, me estoy muriendo por verlo y abrazarlo, Dios mio ¡Gracias!-
-Cristina..
-Querida ¿Estas bien? Te escucho algo extraña, pensé que estarías saltando en un pie por la hermosa noticia de encontrar finalmente a mi hijo-
Silvia no pudo evitar más aquellos sentimientos e inmediatamente comenzó a llorar
-Silvia..- Dijo Andrea buscando la manera de consolarla mientras colocaba una mano en su hombro
-¿Qué sucede Silvia?-Pregunto Cristina con los nervios de punta
-Cristina no sé cómo decirte esto, Andrew perdió la memoria y no recuerda absolutamente nada… Cristina ni siquiera sabe quién soy, no me reconoció-
-¡No puede ser!- Nuevamente se escuchó llanto al otro lado de la línea – Mi pobre hijo….-
-Cristina es por eso que te llamo, Necesito que te calmes y me escuches. Tenemos una oportunidad para recuperar a nuestro Andrew, pero te necesito para esto-
-¿Dime que es lo que tengo que hacer? –
-Lo único que recuerda de su pasado es tu nombre y la palabra noruega Cristina-
Nuevamente se escuchó un fuerte llanto
-Sé que estas bastante lejos en este momento, probablemente tengas tus ocupaciones, pero necesito que viajes hasta aca para que me ayudes a recuperarlo, estoy segura que con tu amor de mi madre y a solo observarte el se sentirá mucho más confiado y podremos llevarlo a casa
-Pero no entiendo querida ¿Ni siquiera quiso ir contigo?-
-Me trato como a una total desconocida, hubieses visto su expresión de incomodidad, por favor Cristina ayúdame-
La mujer se quedó en silencio por un segundo en la línea y luego respondió –Silvia no te preocupes, hablare con Pablo mañana estaré por allá, te llamare cuando este en el aeropuerto-
-No sabes cuánto te lo agradezco-
Editado: 25.08.2021