Capitulo 1 : La Partida

Lyvia una chica de 20 años, introvertida y soñadora, que vive en la ciudad. Tras la muerte de su abuelo, Don Arturo, a quien apenas conocía, recibe la noticia de que debe viajar al pueblo donde él vivía, Villaserena, para encargarse de la casa y pertenencias que ha dejado. A Lyvia no le emociona la idea, pero siente una extraña curiosidad.

Lyvia piensa sobre la desconexión con su familia paterna. Su madre murió cuando era pequeña, y su padre ha evitado hablar del pasado. Siempre sintió que había algo más que no le contaban, especialmente sobre el lado de su abuelo paterno.

(Pensando, mientras observa el viejo retrato familiar): —Papá nunca habla de él. ¿Qué es lo que ocultan por tantos años?”

Toma sus cosas y sale de casa ya su padre la espera en el auto, el la mira y sonrie mientras ella camina y lo ve con dudas en sus ojos.

—Cariño, ¿que te pasa? te eh notado pensativa.

—Mmm nada papá, solo me a tomado por sorpresa la noticia del abuelo.

—Era de esperar hija, Arturo siempre a sido un enigma. (dice Hector con voz baja)

Luego de unos minutos el silecion invadio el auto, Hector se sumia en sus pensamientos.

El ambiente en el coche es tenso, con el padre manteniéndose en silencio la mayor parte del tiempo, mientras Lyvia se siente inquieta y curiosa sobre lo que está por venir.

Lyvia rompe el silencio, preguntando:

—Papá, ¿por qué nunca me hablaste del abuelo Arturo? ¿Siempre hemos tenido esta casa aquí en el pueblo?

—Es complicado. Tu abuelo y yo nos distanciamos. No es que no te quisiera contar, pero hay cosas que no son fáciles de explicar.

—Pero ahora que ha muerto, ¿por qué tenemos que ir allí? No sé nada de él, y tú tampoco has hablado mucho de su vida.

—Es verdad, no te eh hablado mucho de él. La vida en el pueblo es muy diferente a la ciudad. La razón por la que no mencioné mucho sobre él es que... bueno, a veces los recuerdos pueden ser dolorosos.

—¿Dolorosos? ¿Por qué? ¿Pasó algo malo?

—Es más complicado de lo que parece. Hay cosas sobre nuestra familia que son difíciles de comprender. Tu abuelo era... especial en muchos sentidos. Era un hombre que conocía cosas que la mayoría de la gente no entiende.

—¿Como qué? ¿Qué tipo de cosas?.

—(suspira) —No es fácil explicar, pero tu abuelo estaba involucrado en asuntos que se relacionaban con la familia y... con el tiempo. Algunas cosas deben permanecer en el pasado por una razón.

De pronto hubo un silecion sepurcral, Lyv no entendia nada de lo que su padre intentaba decirle, solo asintio y guardo sus comentarios ya era bastante doloroso para su padre.

Al llegar al pueblo, Lyvia nota lo silencioso y misterioso que es Villaserena. Con sus casas hambientadas de epoca y sus habitantes un tanto misteriosos que miraban a Lyv con curiosidad e incredulidad. El ambiente es opresivo.

Lyvia mira a su alrededor y siente escalosfrios.

—Lyv cariño, llegamos.

Voltea a su izquierda y la expresion de su rostro cambia totalmente, estaba sorprendida por la inmencidad de aquel lugar.

La casa de estilo victoriano, construida con gruesas paredes de piedra oscura que han resistido el paso del tiempo. El tejado tiene pendientes pronunciadas, con varias chimeneas sobresaliendo. Ventanas con marcos de madera oscura, algunas de ellas decoradas con vitrales de colores, se asoman como ojos al exterior. Las contraventanas, de metal forjado, están oxidadas y cubiertas de hiedra, lo que le da un aire de abandono.

Los jardines alrededor de la casa están cubiertos de maleza, aunque hay indicios de que alguna vez fueron cuidados con esmero. Viejas estatuas de piedra desgastadas, están dispersas por el terreno, muchas de ellas inclinadas o cubiertas de musgo. Un gran roble cerca de la entrada, sus ramas extendiéndose como si protegieran la casa, o quizás la vigilaran. Un sendero de adoquines irregulares lleva desde la verja oxidada hasta la puerta principal.

El aire alrededor de la casa es más frío de lo normal, incluso en días soleados. El viento que pasa entre las ramas y las grietas de la estructura emite un suave silbido que parece susurrar secretos. En días de niebla, la casa parece emerger como una silueta fantasmal, añadiendo a su aura de misterio.