La vigilancia del futuro.

— ¿Y tus padres están bien?— Preguntó Orlan mientras llegaban a su casa, dentro que aquella unidad que fue destrozada por el combate de Orlan y el grupo de tipos elementales.

Dejando de lado los listones policiacos en las zonas afectadas, ya estaban dejando entrar al resto de gente a la zona pues no había riesgos en las casas continuas aunque muchos de sus habitantes ya habían comenzado las mudanzas, al fin y al cabo podían cambiarse con mucha facilidad.

Facilidades de dinero, pensó Vania.

—Mis padres deben estar en Ciudad Mecánica ahora— Eliette se encogió de hombros con despreocupación— Yo trabajo mejor aquí, sola, haciendo mucho ruido sin que nadie me moleste… Resumen, vivo sola.

—E-entiendo…— Orlan asintió.

La casa era tal cual las demás salvo en el garaje, pues este era mucho más grande que los de las otras casas aunque también parecía haber sido remodelado aunque eso no quitaba que tuviera estilo.

— ¡Vamos, entren!— Eliette estaba muy emocionada de recibir visitas por primera vez.

Cuando entraron en el taller, notaron la cantidad de máquinas que había, algunas a medio terminar, otras terminadas y funcionando con luces de colores pero que ninguno de ellos, más que Eliette sabía para que servían.

—Estas granadas…— Lixue tomo una de las granadas que había en una base, colocadas en fila.

—De mis primeros diseños— Eliette se mostró orgullosa.

Lixue saco una de las suyas y las comparo.

—Ah, el diseño viejo ¿No? He trabajado para que sean removidas y sustituidas por las nuevas pero el que tengan un contrato con Armamentos D.A me impide desplazarlos, aunque el mío sea mejor— Eliette se acercó a ella y sujeto la suya— Estás no solo explotan con mayor fuerza, si no que puedes…— La chica pulso un botón y la granada se aplano— Plantarla, eso ahorra llevar minas extras ¿Entiendes? Además de que genera una cortina de humo por si sola antes de explotar lo que engaña a los objetivos.

—Bastante útil y fácil guardarla— Señalo Lixue.

—Quédatelas, el plano ya está a mi nombre— Eliette tomo las otras y se las tendió— Seguro les encuentras otros usos que yo no, de todas formas no las uso, en realidad.

Lixue asintió— Gracias.

— ¡Me encanta ser útil!— Dijo la chica caminando hasta otro de sus aparatos para entonces ensañárselo a Orlan— Estos los hice hace mucho tiempo pensando en ti ¡Guantes!

— ¿Guantes?— Orlan los tomo.

—Son guantes especiales, sirven para contener energía y liberarla en forma de energía cinética, ya sabes, en caso de que no quieras agotarte de más, un par de ataques o hasta uno y pum, ya tienes unos guantes para golpear con ondas eléctricas— Dijo la chica moviéndose un poco, como golpeando algo.

—No sé si resistan mis descargas…

— ¡Lo harán!— La chica se quedó pensando un poco— Espero, la verdad es que tienes razón, solo podría imaginar el poder que tienes ahora pero no te preocupes ¡Los mejorare y te los daré!

— ¿Y qué puedo usar yo?— Chandler se señaló con una gran sonrisa.

— ¿Quién eres?— Preguntó de regreso, inclinando un poco su rostro.

Chandler sintió una puñalada en su corazón.

— ¡Es broma, Chandler!— Dijo la chica, entonces le contemplo— ¿Tu poder es…?

—Transportarme…

—Nunca he trabajado con uno con tu poder— Eliette se quedó pensativa un momento— Siempre es difícil crear cosas para aquellos con poderes primordiales como los suyos porque o no resisten o no sirven.

—La verdad es que es muy interesante pero ¿No teníamos prisa?— Interrumpió Vania, sonriendo de lado.

— ¡Cierto! Vamos— Eliette les invito a seguir entrando, esta vez hasta su casa.

Y pese a lo que podría parecer de una chica rica, su casa estaba llena de piezas metálicas en el suelo, acomodadas como motones o bien, herramientas grandes acomodadas por ahí con varios muebles llenos de herramientas limpias y de más experimentos que tenían luces de colores. El sonido de motores o de generadores de energía era tan claro y ver un par de drones limpiando el suelo y el techo fue un poco irreal a decir verdad.

— ¡Increíble! Has trabajado muy duro…— Le felicito Orlan.

— ¡Gracias!— Eliette le sonrió con un leve sonrojo en el rostro— El pensar que podría ayudarte a ti o a otros héroes me ha motivado a crear todo esto ¡Es mi forma de ser una heroína!

—Serás una increíble heroína— Dijo Orlan, regresándole una amable sonrisa.

—B-bueno, hay que continuar ¿Cierto?— La chica aparto la vista de él y camino hasta un escritorio, entonces abrió una caja y mostro un dron pequeño. Su diseño era de un insecto de color gris— Este es mi dron de vigilancia.

—D.A ya tiene de estos— Vania sonrió de lado.

—Así es, ya los tiene pero estos son especiales… Podría decirse que los modifique un poco— Eliette se giró para teclear algo en su computadora, entonces el dron comenzó a moverse, seguido de otros tantos que salieron de la caja para flotar sobre la chica, entonces con un clic, mostro las imágenes que veían los drones— No solo están conectados a Oculust, también cuentan con vigilancia en lugares oscuros y lo que es más importante…