Capítulo 50: EL DOCUMENTO DE LA DISCORDIA

— Andree, lo siento. Debí ser honesto. — Xiaowu se lamentó.
Supongo sabía que me incomodaría verlo salir de noche.

Está bien. Estamos a mano Xiaowu.

— Está bien, pequeña luna ya se instaló en la habitación de invitados. — sonreí.
 

No debía molestarme, ella es una pobre niña, realmente es exactamente de mi edad, pero en un país con mucha competencia debe ser más difícil salir adelante.

Al día siguiente Xiaowu se fue a arreglar unos asuntos en la agencia.
 

Empecé a cocinar para la hora de almuerzo, pequeña luna se la pasó todo el día mirando televisión. No dije mucho porque no quería incomodarla.

Termine de cocinar quise hablar con ella pero me evitó de la peor forma posible.
 

Me quedé con la palabra en la boca sin embrago no dije nada ni me quejé por ello.
 

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Pequeña luna sabio las escaleras. Antes de entrar en la habitación de Andree vio que ella estaba lo suficiente ocupada como para que la atrapase con las manos en la masa. Entró rápidamente y busco en todos los cajones.
 

No encontró el documento por ningún lado. ¿Dónde podría estar?
 

Abrió el clóset de Andree y solo vio un montón de ropa que ella jamás tendrá. Se molestó por su propio pensamiento y siguió buscando. Dudó en buscar entre los bolsos de Andree pero en vez de dejarlas al aire rebusco en ellas.

Finalmente encontró el documento en uno de sus bolsos.
 

—¡Bingo!

Exclamó.
 

Tomo fotos del documento y salió de la habitación. En seguida mando las fotos a tía Lu. Pero le pidió encarecidamente dejarla salir de esa casa.

Tía Lu accedió debido a que ya tenía un plan en el que no necesitaba mucho de pequeña luna. Solo faltaba el pequeño empujoncito que alejaría a Xiaowu de Andree. Todo se estaba completando rápidamente.
 

— Señorita Andree gracias por el hospedaje. El dueño de mi departamento me informó que puedo cambiar de apartamento.  — pequeña luna hizo una reverencia.
 

No dejo hablar a Andree y se fue rápidamente.

Andree se quedó con todo el almuerzo, espero a Xiaowu para pedir que buscará a pequeña luna por si no estaba bien.

Cuando llegó Xiaowu, llamó rápidamente a pequeña luna. Esta solo dijo que estaba bien y que no nos preocupáramos.

Al día siguiente pedí una cámara instantánea, la entrega llegó en un par de días. Me encanta este servicio.

Excelente servicio, 5 estrellas.

 

Los siguientes días pequeña luna no busco a Xiaowu y las pocas veces que lo hizo no demoraba más de una hora. Me pareció extraño, algo estaba mal.
 

— Mira, es mi amigo. Tuvo un bebé hace 6 meses pero su esposa tiene estrés posparto.— me enseñó la foto del dulce bebé.

Era tan pequeño, parecía no dormir ni comer bien.

El estrés posparto es terrible, tanto el bebé como la mamá sufren.

— ¿Irás a visitarlo?— pregunté mientras miraba la foto del bebé junto a su padre.
— Sí, le prometí que iría a verlo uno de estos días. — respondió casi arrebatándome el teléfono.
— ¿Vamos hoy? — pregunté eufórica.
 

Xiaowu me vio tan ilusionada por ese bebé que aceptó. Rápidamente me cambié de ropa y aliste algunas que creí que necesitaría.

Salimos rápidamente y Xiaowu condujo hasta la casa de su amigo.

Era una casa relativamente grande, pero no tanto como la casa familiar Lu. Desde fuera se escuchaba el llanto del bebé.
 

Xiaowu y yo nos miramos y entendimos que debíamos entrar para ayudar en lo poco que podíamos. Tocamos la puerta y salió su amigo.
 

— Lin Chen.— dijo sonriente Xiaowu.
— Xiaowu. Estas aquí. ¿Ella es tu esposa?— preguntó alegremente.

Pero su alegría no se comparaba con las grandes ojeras que tenía.

— Un gusto soy Andree. — saludé.
— Andree, bonito nombre. — él abrió ampliamente la puerta y nos dejó pasar.
 

La casa estaba completamente desordenada. Una mujer estaba sentada en el sillón con las manos en la cabeza y el cabello desaliñado.
 

Se veía estresada, cansada, y sobre todo parecía que quería escapar. Me senté en frente de ella para conversar junto a su esposo y Xiaowu, ella levantó la mirada e intento sonreír.
 

—¿Está bien? — pregunté formalmente.

Ella sonrió inesperadamente.— Llámame Tiffany.

— Tiffany, ¿Está bien? — pregunté una vez más.
— El bebé llora mucho, no sé qué es lo que quiere. No sé qué le pasa. — dijo desesperada.

Mire a Xiaowu intentando decirle que los ayude de alguna forma.

— Nosotros podemos cuidar al bebé. — Xiaowu dijo alegremente.

Casi me atoró con mi propia saliva cuando propuso cuidar al bebé.

«LA AMISTAD ES UN RAYO DE SOL EN UN DIA GRIS.»