Capítulo 15

Al escuchar lo dicho por su hermana, Martín piensa que como puede saber sobre Emilia. La mejor forma de que salga a la vista para poder tener las joyas es secuestrar a un pariente de ella. 

   Se van a la casa de los familiares de Jazmín. Cuando llegan Martín le pide a su hermana si lo puede acompañar a caminar. Una vez afuera buscan la casa en dónde se encuentra las personas perdidas. 

  Revisan los alrededores del lugar y ven algo raro. Lo investigan mejor descubriendo una puerta. Martín entra, hay una mujer con una cadena en su tobillo izquierdo muy embarazada. La toca y ve que es la hija de Trinidad. 

  No lo quiere dejar sola, pero necesita saber si hay alguien más con ella. Escucha ruidos, toca una pulsera que tiene volviéndose invisible para los demás sólo la familia lo puede ver.

  Al lugar entra un hombre despreciable que le dice que su hijo es muy bonito. A su jefe le gusta mucho. Si lo quiere volver otra vez a tener debe llamar a su madre y decirle que le hable a su tía. Quiere las joyas que tiene en un banco en Zúrich. O al chico no lo ve nunca más, si se demora mucho tiempo tampoco va a criar al bebé que lleva en su panza.