Historia de una vida vacia

Historia

Cuando era joven me sentia sola todo el tiempo a veces me sientia como una persona vieja en el cuerpo de una niña ¡pero eso ahora no importa! tengo familia, buenas amigas, bueno dos en realidad una de ellas ya esta casada, se ven tan lindos juntos son la pareja ideal a veces me siento celosa siento que ella ya no comparte conmigo como antes, es normal está enamorada, yo queria conocer a un muchacho que me hiciera sentir como en una de esas novelas románticas jejeje… un amor de esos inolvidable, ¡soñar no cuesta nada! lo difícil es ver que el tiempo pasa y ninguna de las cosas con las que soñabas se hacen realidad.

Pasaba el tiempo y cada vez la vida se hacia más rutinaria intentaba con todas mis fuerzas salir a flote para no caer en depresión iba a casa de mis amigas pero no podia estar ahí todo el tiempo, las visitas continuas molestan porque las personas sienten que les quita intimidad familiar así que debia buscar que hacer en otro lado. Entonces hacia cursos, ejercicio, iba al gimnasio, al parque etc. Por algún motivo no me gustaba estar en mi casa me sentia fuera de lugar como si no perteneciera ahí a veces me fuera gustado salir corriendo y dejar a todo y a todos atrás pero eso no se puede así que mi única opción era seguir lo mejor posible con mi vida.

¿No sé si creen en el destino o casualidad? pero siempre he tenido como alguna especie de instinto o se podría decir sexto sentido para algunas cosas, no es algo muy poderoso solo son como presentimientos de que algo va a pasar. Cada vez que estaba en el gimnasio veía un retrato de un grupo de jóvenes entre ellos había uno que estaba de espaldas, es extraño pero siempre que veía ese retrato mi atención se fijaba en ese joven, claro no le daba importancia pero en el fondo sabía que me gustaría conocerlo y conocer su rostro a veces preguntaba por él pero me decían que era un miembro que hace años que no asistía y que seguramente estaba fuera de la ciudad, así que decidí dejar el tema y olvidarme de esas ganas que tenia de saber quién era. Siempre escuche que cuando tú piensas continuamente en algo o deseas algo con mucha fuerza el universo conspira a tu favor para que se vuelva realidad; yo la verdad no creía mucho en eso porque solo para aclarar ¿qué tal si lo que deseas no es realmente lo que más te conviene? a lo mejor lo que te empeñas en conseguir inconscientemente no te hará ningún bien, bueno mis queridos amigos eso fue lo que me paso.

Un día en el gimnasio mi deseo se volvió realidad ¡conocí al joven del retrato! bueno no era tan joven era mucho mayor que yo; pero eso no me importo ahora pienso con claridad que me sentía tan sola que me aferre a la primera opción que se me presento solo para no ahogarme ¡que tonta niña!. El me pareció tan atractivo, inteligente, educado como dije era solo una niña y estaba casi desesperada por sentir que no estaba sola, que mi vida tenía sentido y pensé que con un novio lograría llenar ese vacío que crecía en mi interior pero lo más tonto del asunto es que había muchas opciones de mi edad pero no me sentía atraída por ninguno de ellos quizás lo mejor para mi fuera sido tener un novio escolar que me ayudara a divertirme y a ser niña, ¡pero no! eso no era suficiente para mí, yo quería algo intenso y pensé que este hombre podría ser como uno de esos príncipes encantados de las películas de Disney y que podríamos crear una vida juntos donde viviríamos felices para siempre.

-Hola me llamo Eduardo- se presentó dándome la mano

-Mi nombre es Valeria- le apreté la mano tratando de transmitir seguridad mirándolo a los ojos.

-¿Tienes mucho tiempo asistiendo?- me pregunto

-No la verdad no, tengo menos de un año- luego añadí -¿Tu eres el que aparece en este retrato?- pregunte sin pensar

-Si la tomaron en una exhibición para dar a conocer el gimnasio y el dueño decidió colocarla ahí,- se quedó mirándome algo nervioso me pareció

-Un hombre tan grande debe estar casado o tener novia al menos- pensé, a lo mejor ya tiene dos o tres hijos con alguna exmujer resentida que podría hacer mi vida cuadritos solo por tener algo con él, no eran realmente motivadoras ninguna de esas escenas así que decidí preguntarle: - y ¿tú tienes novia?

-No la verdad todavía no he encontrado a nadie

Bueno al parecer, ¡si yo era un alma vieja él era un niño que creció con mucha rapidez para su gusto! al momento me pareció que me había sacado la lotería era soltero sin hijos, años después me daría cuenta que esa condición en un hombre de casi treinta años no era normal.

Se acercó lentamente a mí y puso su mano en mi cara ese pequeño roce me hizo temblar de pies a cabeza y cerré mis ojos esperando que se decidiera a besarme. No fue un beso dulce más bien la fuerza de la pasión que se despertó en ambos fue como la de un volcán, nunca había sentido algo tan intenso el sabor de su boca el olor de su perfume me volvía loca, el hecho es que termine en sus brazos pegada contra la pared de los vestidores con ganas de llevar aquel asunto a otro nivel. Pero todo termino súbitamente cuando alguien entro y nos interrumpió nuestro primer beso, estaba agita y excitada nunca me habían besado de esa manera nunca había sentido mi sangre correr por mi cuerpo de esa manera ¡Quería más! quería volver a besarlo y por primera vez me sentía viva. Acordamos vernos nuevamente sentía la necesidad de conocerlo así que comenzamos una relación a escondidas por supuesto, a mi familia no les iba hacer ninguna gracia que fuera novia de un hombre catorce años mayor que yo.



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En el texto hay: tristeza y soledad, amor adolescente

Editado: 20.09.2018

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