capitulo 9 ~Él...~

La mañana se traba tranquila, no había ruido alguno que sacase a Adelaida de su estado de relajación escuchando las distintas orquestas armónicas que los antes pasados dejaron por herencia y una que otra sonata de Chopin, pero el mal de cantar antes que las aves la acompaña siendo sorprendida por un par de pies traviesos subiendo a toda prisa las escaleras que unían la casa de Carina con las de Adelaida, hasta que unas voces cantarinas la sacaron por completo de su estado de relajación. 
 
- ¡Tía, tía! 
- ¡Tía, tía! 

 
Repetían uno tras otro de los gemelos alarmando a la agotada Adela que tras una larga noche de trabajo y de insomnio decidió meditar con ayuda de su playlist preferida para estas ocasiones. De forma fugaz escondió cada uno de los informes que tenía en su mese en un cajón grande de la mesa que tiene estantes ocultos en la que trabaja, le dio vuelta a su tablero rotatorio en la pared mientras lo volvía a sujetar en unos ganchos que este tiene fijos a la pared, saco unos papeles trampa que tenía y a su vez espacio los lápices que tenía en su porta lápices, ya por ultimo escondió en su bolso negro que siempre anda con ella a sus espaldas el portátil que contenía lo primordial y dejo uno que esta malo por ser de los primero que salieron a inicios de la revolución tecnológica de la ciudad. 

- ¡Tía, tía! - se escuchó por última vez. 

- ¿quiénes serán los revoltosos que no dejan que su tía duerma como una vil res? - sentencia mientras abre su puerta fingiendo un bostezo de recién levantada  

- oh, vamos tía, sabes que es día de hacer un almuerzo sorpresa para mama y papa – reprende un serio Joshua. 

Adela los deja entrar a su habitación mientras se pone en la labor de organizar su cama y prepara su ropa para poder hacer su día a día. 

- Verdad, tía tengo una duda... no se si te moleste... - Adela dirige su mirada a un Caleb nervioso que mira de reojo a su hermano quien lo fulmina con la mirada como si leyera lo que planea preguntar.  

-no se preocupen, pregunten todo lo quieran, les doy una entrevista gratuita por hoy mis terroncitos de azúcar. 

Con una mirada aburrida responden al unísono – no nos digas asi, tía. 

Una escandalosa risa se apodero de Adela finalmente entrando a la ducha con lo necesario mientras que los gemelos curiosamente caminaban por el cuarto de su tía – bueno lo primero es... ¿cómo conociste a mama? 

Los recuerdos se apoderan de Adela de golpe – valla no esperaba algo asi, pensé que serían más originales. 

-solo responde, tía – declara el mayor y más serio de los dos  

-bueno, fue cuando estaba en la escuela estudiábamos juntas, pero era muy retraída pero un día una amistad nos presentó, poco a poco fuimos hablando y en menos de una semana éramos mejores amigas por tantas cosas en común que compartimos hasta que gane la feria de ciencias que patrocino una universidad. 

-eso explica porque tan pocas fotos juntas – responde el menor 

- tía, ¿cómo supiste que querías hacer con tu vida?  

-la verdad nuca supe que hacer con ella hasta que un día descubrí que mi pasatiempo de retratar en palabras ciertas cosas que no logro decir podrían ser una fuente de ingresos lo suficientemente estable como para vivir 

-que poco profesional tu respuesta tía  

Dice finalmente el mayor de los dos tras ver a su tía salir lista para ir y hacer de master chef modo humilde 

-ay, pero cuanta agresividad de tu parte Joshua 

Bajan con prisa; Adela ve por su radillo del ojo al mirar atrás una figura dirigirse hacia su cuarto y cerrar la puerta a su paso, los gemelos la jalan de las manos hasta llevarla a la cocina y se ponen manos a la obra. 

-niños... es hora de la lluvia de ideas. 

-crema de tomate con un pure de papa y pulpos de salchicha! 

-pastas con crema de tomate con queso y pechuga bañada en salsa cremosa con champiñones 

-bueno y si tomamos un poco de ambas? 

-crema de tomate y... 

-la pechuga con la salsa 

-asi me gusta y de pasabocas antes de llegar a la comida principal podemos darles los pulpos con su pure de papa y yo me encargo de la ensalada! 

Los gemelos se miran por un segundo como si hablasen telepáticamente y confirman el pedido tras unos minutos 

-bueno soldados, a trabajar – dice Adela por último alzando una cuchara en mano tomando el mando de la cocina.  

Caleb se encarga de preparar las salchichas, pelar las papas, y preparar los bowls de meter cada platillo con su presentación, Joshua toma unos minutos para organiza el comedor y cada uno de los puestos, pone las melodías que suelen poner gracias a su tía, en cuestión de minutos el pasabocas lo dejan listo e inician preparando las distintas salsas que necesitan para los platillos, Adela se encarga del de tomate mientras que deja que los gemelos se encarguen del de la pechuga tras ser más sencillo para ellos. 

Sin esperasen que fueran sorprendidos por una pareja de tortolos entrando a la casa entre risas y son pillados por los que actualmente toman el control de la cocina tras esta solo ser dividida por un mesón dejando todo a la vista 

-pero que bellos los tortolos, pero que milagro que sean tan acaramelados a estas fechas de la vida  

-vea Adelaida, no digas más – le refuta una avergonzada Carina que entraba abrazada de Benjamín tras finalizar su día largo en el trabajo. 

-mejor tomen asiento mientras se termina de hacer el almuerzo 

-una pregunta, ¿si es comestible lo que están haciendo? - le cuestiona un Benjamín un poco nervioso tras ver los pasabocas y echar un vistazo a la cocina al ver un par de cabecitas merodear de un lado a otro 

-por supuesto que sí, sabes que eres mi cuñado preferido, no te preocupes que si temes que te envenene ni cuesta te darías de cuando pase.... - responde con una vos burlesca mientras ve como se pone pálido su cuñado acompañado de su risa nerviosa – no te me apagues cuñado que eso nunca pasara