Hola, Sr Alfa

Capítulo 29 : ¿Es demasiado tarde para llamarlo amor?

Daniel siempre odio los cuentos de hadas, no por una razón muy profunda o tristeza simplemente los odiaba porque le parecían algo imaginativos y con muchas falta de realidad. Miraba al hermoso que se enamoraba de una sirvienta que una noche solamente le habían regalado el pase dorado de creerse una princesa y sentía que cada uno era tan hipócrita a su manera, ella por sentirse cuando no lo era y él por mentirle descaradamente con un cuento donde ella no tenía ni el menor protagonismo


 

Razones no le faltaban para tener aquellos pensamientos, no había tenido una vida fácil ni simple y por eso y muchas cosas más tal vez en algún momento de su infancia comenzó a sentirse resentido con el mundo de fantasía que los cuentos de hadas le querían vender


 

Sin embargo después de conocer a Jay una parte profunda de su interior comenzó a cambiar lentamente llevándolo como saltando de nube en nube al cielo de ilusiones en el que su mente vivía a diario


 

Jay fue el comienzo de algo y Daniel rezaba porque no fuera el final de aquello también. Cada noche la misma pregunta ¿Está mal amar a alguien de esa manera?


 

Los labios de JaeYeol se movieron intrépidos por los suaves labios de Daniel, el omega trató de quitar un poco de pensamiento intrusivos de su mente y Jay consiguió que el beso se alargará unos minutos más hasta que Daniel lo apartó con suavidad


 

— Detener — Daniel lo regañó — Esto está mal — Jay sonrió


 

— ¿Por qué? — preguntó en un hilo de conciencia aún — Toda mi vida he escuchado de la boca de los demás lo que está bien y está mal, y ya estoy cansado de que todos puedan mandar en mi vida menos yo — Jay tomó las manos de Daniel — Soy un egoísta, lo sé, y también soy un esposo basura y a veces quiero morir por todo lo que le estoy haciendo a alguien que no se lo merece y durante un tiempo he tratado de evitar cuando cada pensamiento relacionado contigo inunda mi mente, cuando mi cuerpo anhela a  tú alma, puedes creerme o no pero te aseguro que he intentado de todo para hacer que esto no funcione — pausó — Sin embargo mientras trato de alejarte de mí más te desea mi corazón — Daniel se sonrojó


 

— Jay — tomó aire con un poco de fatiga — Jay. No quiero estar para ninguno de los dos, nadie merece la vida que vamos a llevar si esta noche acepto tu confesión — Jay negó — ¿Qué pasará después de que diga que me gustas también? Seguiremos con el plan y tendrás a tu hijo y luego que ¿Seré la amante que solo ves una vez a la semana? — Daniel mordió sus uñas y tomó distancia de Jay. No quiere ese tipo de vida, nunca soño con eso, él solo quería tener algo normal. Una casita, una familia y alguien que lo amara


 

— Park Daniel — Jay llamó — No soy el mejor de las personas de este mundo y mi situación es la más complicada que pueda haber ahora mismo sobre la tierra. No te voy a obligar a nada y tampoco haré que digas ahora lo que sientes pero lo dejo cuando decidas contarme lo que sientes, ya di el paso más grande que he podido dar en mi vida y ahora no pienso detenerme— Daniel lo miró — Aunque mi familia esté en contra, he decidido comenzar a buscar lo que realmente quiero en vida — Jay exclamó


 

— ¿Qué es lo que realmente quieres en tu vida? — preguntó Daniel en un hilo de voz


 

— Libertad y una vida nueva — exclamó — Ya es hora de que todo este circo de la familia Hong abandone su función, me niego a continuar viviendo de esta manera — Jay apretó los puños. Habían sido tantos años, tantos abusos, tantos maltratos que la vida en algún momento le había parecido aburrida y sin sentido, como un muñeco siempre haciendo lo que los demás querían


 

Daniel lo miró. ¿Existe eso para alguien como Jay?. JaeYeol se acercó y lo tomó desprevenido entre sus brazos, besando suavemente su frente y haciendo que el omega se sonrojara


 

— ¿Esperarás por mí? — preguntó — Prometo que no tardaré mucho


 

— Jay — Daniel murmuró — Si esto no funciona y todo vuelve a estar como antes se que sufriré mucho aunque también se que si todo llega a funcionar y te alejó sin remedio alguno  me voy a arrepentir toda mi vida — Jay sonrió


 

— ¿Si? — preguntó


 

— Aún no – Daniel dijo — Pero tampoco es un no, además no pienso abandonarte ahora que estás dispuesto a cambiar tu vida — Daniel tomó su mano — Ni siquiera se que es esto que ambos estamos haciendo ahora pero es bonito y cálido — Jay asintió


 

— ¿Creo que se llama amor? — preguntó Jay


 

— ¿Es demasiado temprano para llamarlo amor? — Daniel se burló, Jay lo abrazó


 

— Nunca es demasiado temprano para enamorarse — Daniel tomó la mano de Jay en el aire y ambos permanecieron hasta tarde mirando el tranquilo lago


 

Cuando regresaron cada uno a su habitación, Daniel cayó dormido en cuanto vio la cama. Esa noche soñó que la historia de la niña calabaza y el príncipe sin corona que le contaba su madre de pequeño se había hecho realidad . Daniel nunca creyó en los cuentos de hadas pero Jay no era uno de los príncipes de sus cuentos, Jay era más realista

......




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.