MI MEJOR AMIGA

Mi mejor amiga es una chica llamada Ana María, tiene unos ojos verdes precisos, su cabello es crespo, es mas alta que yo, y su piel parece porcelana, yo le digo muñeca porque es lo que parece. Nuestra amistad fue extraña, no es de esas amistades que se ven y se sienten el uno para el otro, no. Ella y yo nos caímos muy mal desde el principio, éramos muy distantes, no nos hablábamos mucho y teníamos algunos problemas por cosas irrelevantes, sin embargo, uno de esos tantos problemas nos llevo a conocer la amistad más hermosa que pudiéramos imaginar, recuerdo que fue un día en el colegio en el que discutimos porque no se había impreso un trabajo, y la encargada de hacerlo era ella, otra compañera me decía que ella lo había hecho de irresponsable y yo le creí. Así que me fui directamente a hablar con ella, entonces me dijo las razones por las que no había llevado el trabajo, y la entendí, y también entendí que la había juzgado sin conocerla, que primero debía comprobar las cosas por mi misma y no dejar que los demás me llenaran la cabeza de rencores, y ahí comenzó nuestra historia, comenzamos a hablar, ella me contaba sus problemas y yo la aconsejaba, yo le contaba los míos y ella hacia exactamente lo mismo, entonces nos dimos cuenta que éramos muy parecidas, que en nuestras vidas había en común el desprecio de la gente, la falta de amor, los amigos falsos, el dolor. Eso fue lo que nos unió, nuestras historias y vivencias en común, no era una amistad como las demas, ella me llamaba y sin importar nada yo siempre estaba ahí, y viceversa porque siempre estamos la una para la otra. Es como mi hermana, la persona con la que puedo contar porque me entiende realmente, digo que lo hace realmente porque nuestras vidas son muy parecidas, sufrimos cosas en común. Muchas veces ella me dice que yo la he ayudado mucho, que yo siempre la escucho, que soy una gran amiga y que me admira, mi mensaje para ella es que su amistad me salvo la vida porque he tenido a quien recurrir cuando estoy mal, alguien que me entiende de verdad, le diría que es la persona mas hermosa que conocí en mi vida, y que la mejor inversión de mi vida fue no haber llevado un trabajo al colegio, porque ahí la conocí, conocí a la persona cuya vida es difícil pero sigue sonriendo, no a la persona que pintaban los demás, aprendí a ver las cosas por mi misma, y a no dejarme llevar por lo que decían. Cuando me vine a vivir a Zipaquirá ya no nos veíamos, sin embargo, ella hizo el esfuerzo por venir a visitarme, y yo fui a verla el día de sus 15 años, y aunque no nos veíamos seguido y mucho menos nos hablábamos todos los días, podían pasar 6 a 8 meses sin hablarnos, pero cuando lo hacíamos todo seguía igual, y ni siquiera el tiempo rompió tan bella amistad. Hoy llevamos 5 hermosos años de amistad, y vamos por muchos más, porque conmigo llevo sus consejos, su hermosa forma de ser, su risa, su malgenio, la llevo aquí, en mi corazón. Los amigos son un tesoro, por eso debemos cuidarlos, no cualquiera soporta tu malgenio, risas, estrés y aun así se queda contigo. Si lees esto te quiero decir que te admiro demasiado, que eres una berraca y que he aprendido muchas cosas de ti, que como personas hemos crecido juntas, y que después de cada tormenta estaré ahí para ayudarte a levantarte, tal cual como lo has hecho conmigo, que la vida te sonría hoy y siempre, porque personas como tu no se encuentran a la vuelta de la esquina.