CAPÍTULO 1 (Parte 3)

Después de caminar por minutos, llego al pueblo. Afortunadamente no me pidieron documentos ni nada parecido para entrar, simplemente entré. No tiene muros, así que no creo que este pueblo sufra ataques de monstruos.

Oh. Veo a muchas personas con armaduras, armas y varias chicas lindas. Exageradamente lindas y eróticas. Wow. Realmente les gusta enseñar piel. Me sentiría nervioso ante tal vista, pero estoy tan sorprendido por estar en un mundo mágico, que no tengo tiempo para sentirme nervioso al respecto.

El pueblo es enorme, hay varios puestos de comida y de frutas. También hay puestos en donde venden joyería y armas... Un típico y cliché pueblo medieval.

Hasta huele mal. ¿Las personas se bañarán diario? Lo dudo. Sin ofender, pero este lugar parece bastante... salvaje.

—¿Hueles eso, Daniel? Clichés de una historia isekai... ¿Seré el protagonista o un personaje secundario importante? Tal vez yo sea un personaje de relleno... Con el tiempo descubriré mi rol.

Dios me envió, pero no seré egocéntrico. Siempre debo estar preparado para cualquier sorpresa, incluyendo ser un simple personaje de relleno.

El pueblo es realmente lindo e interesante. Las personas se ven amigables. Pensé que sería más salvaje o violento, pero es muy agradable.

—Genial. Se ve muy lindo el lugar.- Dije, mientras camino entre las personas.

Oh. Vaya, vaya.

Veo un letrero en la puerta de una casa, la escritura es muy rara, son como números, pero un poco más diferentes. Es difícil de explicar... Una de las letras parece un número 2, pero con dos círculos pequeños en el medio.

¿Deberé aprender su escritura e idioma? Bueno, Dios me dio una gran memoria, no creo que tenga problemas en aprender, al menos lo básico.

—Aunque no puedo leer, su escritura es muy diferente a la mía... ¿Entenderé su idioma...? Dios no me dijo nada al respecto.

Debo obtener respuestas.

Me concentro y escucho varias voces a mi alrededor.

—¿Sandro? ¿Él realmente hizo eso?- Dijo una chica.

—¡Es increíble!- Dijo una chica, emocionada.

Chicas hablando sobre un tal Sandro. Sí, entiendo el idioma.

Suspiro aliviado. No tendré problemas para comunicarme con los demás. Eso me ahorrará mucho tiempo y esfuerzo.

—Hablan el mismo idioma que yo... Supongo que debo encontrar a personas que sepan usar magia, para que me enseñen a usarla.

Espero que no me cobren, y si me cobran, deberé conseguir algún trabajo.

Mmm... ¿En dónde encontraré a las personas que necesito? Supongo que preguntar me ayudaría.

Veo a alguien con una armadura negra caminando y me acerco a él. Está usando una armadura, debe saber lo que quiero encontrar.

—Disculpe, ¿sabe en dónde se reúnen los que saben magia?

—¿Los que saben magia? Supongo que quieres ir al Gremio de aventureros. Es ese lugar con esa bandera azul.

Oh, un gremio de aventureros. Lo que necesito.

Extiende su dedo índice y señala el gremio. El gremio es un edificio de cuatro pisos... Se ve lindo, pues está pintado de negro. Es pequeño, pero supongo que no es el gremio principal de este país.

La voz del hombre es muy gruesa y se escucha algo rara. Al estar cerca de él, puedo sentir algo de calor. Un verdadero aventurero... ¡Genial! Si no estuviera ocupado, le pediría un autógrafo.

—Muchas gracias. Se lo agradezco mucho, señor.

Me dirijo al gremio... Está bien... Hablan el mismo idioma que yo... No tendré problemas de comunicación.

—Hablan el mismo idioma que yo, pero su escritura es diferente... ¿Por qué?

Tal vez Dios tenga que ver con esto. Tal vez me dio la habilidad de entender el idioma como si fuera el mío o algo por el estilo.

... Mmm... Hay algo que me está incomodando.

Puedo notar que muchas personas me observan raro mientras camino.

¿Ya se dieron cuenta de que no soy de este lugar? ¿Parezco un turista?

Estoy acostumbrado a que las mujeres se me queden viendo, pero esto es más extraño.

—¿Tendré algo raro?

Espero no molestar a los habitantes de este pueblo. Entre menos enemigos tenga, muchísimo mejor.

Bien, estoy parado frente al gremio. Bien, Daniel, no tengas miedo. Sé que estás en un lugar desconocido, pero no te preocupes, tienes a Dios de tu lado. No tengas miedo y entra.

Tomé aire y suspiré... Bien... Estoy listo.

Entro al gremio y observo a mi alrededor. Más que gremio, parece un bar.

Hay mesas, en donde los aventureros comen y beben juntos. Supongo que también es un restaurante.

Hay aventureros que parecen muy fuertes por sus enormes músculos... Oh... La mayoría de los aventureros voltean a verme y me observan con expresiones de odio.

¿Por qué me ven así? ¿Parezco alguien malo?

Sus miradas me ponen nervioso... ¿Por qué me odian? Apenas me conocen.

¿Serán xenófobos y me odian por ser diferente? No, no somos diferentes, somos humanos parecidos. Es imposible que sepan que no soy de este país. ¿Será por mi ropa? Lo dudo. Dios me dio la ropa, no creo que me la haya dado si eso me iba a traer problemas. Debe haber otra razón.

—V-vaya, vaya. C-creo que no les agrado.

Mejor investigo lo más rápido posible, no quiero tener problemas con alguien.

Veo a una chica sentada en un escritorio... Oh, que hermosa es. La chica tiene el cabello rojo y largo, y tiene ojos rojos. Usa un vestido rojo y tiene un listón en el cuello de color rojo. Demasiado rojo. Al lado de la chica hay otras 5 mujeres, sentadas en escritorios. Creo que son empleadas del gremio.

Este mundo es muy diferente al mío, y no solo me refiero con la existencia de la magia, también por el color del cabello.

Ahora que me doy cuenta, las personas en este mundo son muy diferentes a las de mi mundo.

Observo a mi alrededor y veo a personas con el cabello de diferentes colores. Hay aventureros con el cabello blanco, rojo, verde, etcétera.