Hurricane

Capítulo lll

Michael's Pdv

Otra de mis crisis nerviosas y esto se estaba convirtiendo en algo que no podía controlar, iba empeorando cada día más.

—Michael, sólo toma tus medicinas, por favor. —suplicó mi madre.

Me sentía culpable, porque cada vez que me sentía mal ella era la única que se preocupaba por mí, casi al borde el llanto pero aún así le gritaba hasta que mis cuerdas vocales reventaran.

—¡No! ¡Estoy bien! ¿¡Acaso no lo ves?! ¡Deja de tratarme como un maldito enfermo! —grité halándome el cabello.

Siempre me pasaba, mientras me encontraba tranquilo admitía que estaba enfermo (aunque no se lo dijera a nadie) pero durante las crisis me empeñaba en negar todo lo que fuera malo en mí; como si en esos instantes fuera yo otra persona.
Aunque comenzaba a creerlo.

—Hijo, no me hagas daño... —se tiró al suelo el sollozos al verme levantarle la mano y fue cuando reaccioné.

Narrador Omnisciente.

Aquella enfermedad era una maldición para los Clifford, desde pequeño Emett Clifford fue un problema para todos así que decidió huir y casarse con Julissa sin siquiera mencionarle de la bipolaridad que sufría y tres años más tarde de su boda llegó Michael muy amado por ambos y muy parecido a su padre en todos los sentidos.
Julissa no tenía idea de ésta hasta que empeoró llevando a Emett al suicidio, dejando a un pequeño hijo de apenas meses de edad. Su madre nunca le contó sobre su padre a Michael haciéndole creer que era madre soltera, pensando que sería mejor que tener la imagen de un padre psicópata acabando con su vida.

Michael es diagnosticado con el mismo trastorno a los seis años, los doctores decían que lo obtuvo de forma hereditaria.
Aunque no lo pareciera la peor etapa de Michael no fue esta, según su psiquiatra, había sido en la pubertad al rededor de los 12-15 años de edad porque era muy difícil controlar sus hormonas y su trastorno a la vez. Una vez pasada esta etapa él se estabilizó.
Él vivió engañado toda su infancia hasta que cuando tenía dieciséis años su madre por fin se lo contó y fue lo más difícil, la resignación; Porque sabía que siempre sería la persona que los demás miran mal en la calle, que sería aquel distinto a los demás y tendría que vivir con algo con lo que él no eligió, una enferdad irremediable.

—Perdoname mamá. —comenzó a llorar. —no sé que me pasa.

—Ya Mike, todo estará bien. Yo no te dejaré solo. —se acercó su madre para acunarlo en sus brazos.

Cuando conoció a Heather por primera vez fue algo extraño porque quiso odiarla al instante por su fría actitud pero no pudo. Tenía deseos de saber más de ella porque sentía que había un lazo en común entre ellos.

Pero, ¿Y qué si se entera de su bipolaridad? ¿De su historia?

¿Se alejaría de él?
 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.