Enfrentamiento

Llegó la hora de dormir, Ellie tuvo que quedarse en casa de Andrei por petición de Elysia, quien estaba dispuesta a unirlos. Sin embargo, la misión de unirlos estaba siendo un fracaso. Andrei y Ellie entraron a la habitación, él comenzó a tomar sus cosas, tales como una almohada y una cobija.

—¿No te quedarás aquí? —preguntó Ellie al verlo caminar hacia la puerta.

—No. Estamos separados y… la cama es individual.

Fue su fría respuesta antes de cerrar la puerta. La chica se sintió mal, pero recordó las palabras de Andrea, él estaba muy lastimado. Quiso justificar su actitud hacia ella con esto, de alguna manera sentía que lo merecía. Se quedó a solas en su habitación, no la había visto antes, sólo lo visitaba en el sótano. Cada cosa que había podía decirle algo. Era un cuarto con un escritorio, un clóset, una cama, un librero… todas las herramientas de estudio estaban ahí. Algo llamó su atención, tenía una guitarra eléctrica. Él había dicho que aprendió a tocar el bajo y la guitarra en los descansos cuando estudiaba en el Colegio Área Sur. Le gustaba la música al igual que a ella, era de las pocas cosas que tenían en común. Solo tocaba el instrumento por hobbie, no tenía intenciones de ser famoso. Se acostó en su cama después de observar todo, estaba cansada y quería dormir. Por otro lado, en el sótano…

—¡No puedo creerlo! Ha estado engañando al abuelo desde ahora… pensé que era reciente —comentó Andrea, al ver que su padre llegaba.

—¿Reciente?

—Es que yo sospechaba esto, pero nunca pensé que llevara años haciéndolo. Mira, yo voy a cumplir 15, desde antes de que naciera, esa mujer ha estado viéndose con otro en secreto.

—Ya veo. Fue muy rápido obtener información.

—Te dije que Hansey era predecible, ha andado de un lado a otro sin pensar en las consecuencias de sus actos. Ya fue a darle el control a mi abuela y Jacob lo ejecutó tal como esperábamos.

—Es extraño que no se diera cuenta…

—No importa que él se dé cuenta y le diga a mi abuela —habló Andrea, con confianza—, ya no puede hacer nada para evitar que la expongamos. Tenemos la información.

—Bien. Mañana seguiremos con el plan —la voz de Andrei era muy apagada, aunque fuera normal que hablara poco, se notaba cierta tristeza.

—¿Vas a quedarte aquí?

No hubo respuesta.

—Oye, mamá está arrepentida, se siente muy mal. ¿Ya no van a regresar?

—No es momento para pensar en eso.

—Sí, sí es el momento —corrigió la chica—. Mi hermano desapareció y no sé qué va a pasar de ahora en adelante. Al menos ustedes deben hacer las cosas bien. Deben seguir juntos, ¿Qué hay de mí? Yo ya existo y… no quiero un futuro con mis papás separados.

Andrei se acostó en un sillón que estaba en el sótano, no le dio ninguna respuesta, solo trató de quedarse dormido. También estaba cansado y solo quería dormir. Andrea se alejó de la computadora y subió las escaleras, salió del sótano para despejar su mente. No insistió en las preguntas porque conocía bien a su padre.

—¿Todo está bien? —preguntó Elysia, al verla en la sala.

—Más o menos —respondió ella, dando el mismo tono de voz apagado.

—Así que tú eres mi futura nieta. Eres muy linda.

—Gracias.

—Te veo muy preocupada. ¿Tan grave es la situación?

—Yo… yo tenía un hermano —dijo, al borde del llanto—, pero ahora no está.

Elysia la abrazó. La chica comenzó a llorar.

—¿Has estado conteniéndote como Andrei? Llora todo lo que necesites, desahógate. No cometas los mismos errores que él.

Siguió llorando entre los brazos de su abuela. Estaba harta de hacerse la fuerte, todavía era una niña en comparación a su padre. Extrañaba que su madre la abrazara, pero en estos momentos no era posible porque también estaba sufriendo. Encontró consuelo en su futura abuela Elysia.

Al día siguiente, era hora de poner el plan en acción. Jacob intuía lo que estaba pasando, le preguntó a Hansey cómo obtuvo el control, esto lo llevó a la conclusión de que querían que lo trajera. Tenía sentido, porque al ejecutarlo en una computadora de la casa, se regaría el virus que obtendría la información personal de la temida enemiga. Esperaba a ver cuál sería el siguiente paso, solo fingía trabajar para ganar tiempo. Estaba nervioso, algo sucedería pronto. Alguien llamó a la puerta. Azucena dejó de desayunar para atender a esa persona que la visitaba. Hansey se había quedado con ella.

—¿Dónde estabas? —preguntó al ver a Ellie.

—Vengo de la casa de Andrei… yo… yo terminé con él.

—¡Por favor! ¿A quién quieres engañar?

—No es un engaño. De verdad terminé con él, ¿no notas mi tristeza? ¿Crees que es bonito tener esta sensación de desamor y soledad?

La mujer no dijo nada. Hansey solo miraba.

—Ahora, devuelve la máquina del tiempo. Ese era el trato, si me dejaba, se la regresarías.

—No es tan sencillo, Elyon. No sé si me estás diciendo la verdad. ¿Qué prueba tengo de que ya lo terminaste?