Cuando Iuola bajó en compañía de Camelia hubo un coro de aplausos que la hizo sentir incómoda. Wolfram le presentó un sinfín de personas que le fue imposible recordar cada nombre y cada título; Leithold no aparecía por ninguna parte y Lady Elea estaba sentada en un sillón con el rostro pálido de la preocupación. Los agentes que Uriel había llamado habían regresado al poco rato sin éxito alguno. Por un momento Iuola pensó que le pudo haber pasado algo, pero descartó aquella idea; era mejor no tener pensamientos negativos o podían suceder. Eso le funcionó cuando Marsias había desaparecido, ella nunca aceptó que su hermano estaba muerto.
Wolfram dio la señal y la orquesta comenzó a tocar una alemanda bastante movida y muchos se congregaron en el centro de la pista; al parecer el barón de Weasly había decidido no asistir y en cierta parte sintió un alivio.
En ese momento su hermano Marsias se acercó a ella y le hizo una reverencia.
—Espero no tengas comprometida esa pieza
Ella le sonrió y le hizo una reverencia—Para usted nunca milord
Él le devolvió la sonrisa y le tomó la mano mientras la guiaba a la pista.
—Por un momento pensé que jamás volverías a hablarme—le dijo Iuola
Marsias le sonrió mientras se disponían a seguir la danza—Es simplemente que ambos lo vemos desde perspectivas diferentes
—¿A qué te refieres?
—Tú lo ves como una acción correcta, una obligación o un deber; yo lo veo como que te estás arruinando la vida
Iuola no le dijo nada y dio dos vueltas correspondientes a la danza.
—Puesto que al parecer no pude hacerte cambiar de opinión, no me queda de otra que apoyar toda esta falta de criterio—continuó él
Iuola le sonrió—Gracias
—Sólo ten cuidado princesa, si ves algo raro en ese tipo por favor no dudes en decirnos
—Lo haré Mar, créeme que yo...—Iuola se detuvo al ver a alguien que no esperaba ver en su velada y que al reconocerla le hirvió la sangre.
—¿Qué hace ella aquí Marsias? —le preguntó Iuola
Este miró en dirección a donde ella estaba mirando.
—¿Quién?
—Lady Francesca Olson
Ésta se encontraba en compañía del marqués de Winchester, un viejo decrépito famoso por andar tras jovencitas y hacer múltiples escándalos.
—No puedo creer que Wolfram haya invitado semejantes personajes—le dijo ésta
—No creo que haya sido Wolf, ya lo conoces. Supongo que fue Lady Leithold, después de todo hay invitados de ambas partes
—No quiero que esa mujer este aquí Marsias, por favor haz que la saquen
Este la miró—¿Por Wolfram? No te preocupes por él cariño, no le afecta en lo absoluto que esa mujer estaba aquí
—No es por él, no quiero que esté aquí Marsias. Si no puedes hacer algo, lo haré yo
Ésta salió disparada hacia donde se encontraba la pareja en cuestión. Pudo sentir los pasos de su hermano detrás de ella, pero este no hizo nada por detenerla.
—Buenas noches—saludó Iuola a la pareja y Marsias hizo lo mismo.
—Buenas noches—respondieron ambos
—Permítame felicitarla mi lady por el reciente compromiso—le dijo el marqués—Aunque no he visto a Leithold
Iuola asintió y le tiró una mirada asesina a Lady Francesca.
—Como ha crecido mi lady—le dijo Francesca.
Iuola miró al marqués—En la época de mi padre no se presentaban a las amantes
Era la primera vez que Iuola veía a su hermano quedarse sin habla, el marqués de Winchester abrió los ojos como platos y Lady Francesca se puso roja de la rabia.
—¡¿Qué ha dicho usted?! —exclamó ésta furiosa
—¿En serio quiere que se lo repita? —le preguntó Iuola—saldrá de mi velada ya mismo, no la quiero aquí
—Un momento mi lady—le dijo el marqués—yo fui invitado a esta velada
—Usted si pero ella no y si no la retira de aquí tendrá que marcharse usted también—le dijo Iuola
—Pero qué es esta muestra de vulgaridad ¡Por Dios! —exclamó Lady Francesca—Westhampton se enterará de esto
—Y se limitará a mirarme a través de su monóculo—le dijo Iuola—Pero me pregunto ¿Qué cree que le hará a usted? Una persona que no está invitada a ninguna velada que tenga que ver con mi familia ¿Está dispuesta a aguantar esa humillación? Si es así, búsquelo. Está en la sala de fumadores
Lady Francesca la miró echando humo—Esto no se va a quedar así—Y salió disparada de allí
Winchester miró a Marsias—Debería de corregir a su hermana
—Cuando esté equivocada Winchester, antes no.
Este refunfuñó y se marchó.
Marsias miró a su hermana—Sabes que si Wolfram se entera de esto, te costará