- Llegué, tuve que ir a la cochera por la maleta. - Sacudía la maleta para quitarle el polvo
-Bien, ¿Sabes que llevar o te sugiero algunos atuendos? - Abrí su closet.
También remodeló el closet, ahora es color rojo y también hay ropa nueva. Ropa que hurtare.
-Veo que fuiste de compras. - Volví hablar dándole un vistazo a la ropa nueva.
-Si, el día que ustedes fueron al centro comercial y no me invitaron, decidí ir solo por mi ropa. – Se encogió de hombros.
-Ya veo. - Desvié la mirada hacia las figuras de acción que estaban en su escritorio.
Camine hasta su escritorio y gire para verlo.
-Bueno, entonces me sentaré aquí y jugaré con tus figuras mientras terminas de empacar. - Retire la silla del escritorio para poderme sentar.
Me dio un beso en la frente a modo de respuesta. Miré las figuras y recordé el anime de dónde son. Eren y yo somos muy fanáticos de todas las cosas asiáticas. En mis cumpleaños siempre me regala álbumes de mis bandas favoritas, figuras de acción de mis animes, y algunas otras cositas Kawaii que ve.
-Ya deja de jugar con las figuras y vámonos. – Gire mi cabeza y el estaba recargado en el marco de la puerta.
Estaba tan metida en mis pensamientos y admirando las figuras que no me di cuenta cuando terminó de empacar sus cosas.
-Ya voy, ya voy. ¿Me regalas está? - Sostuve la figura en mis manos e hice un puchero.
-Risa esta vez no, siempre quieres llevarte mis cosas. – Se cruzo de brazos y evitaba mirarme para no cambiar de opinión.
-No siempre. – Dije cabizbaja.
-Ash! Odio cuando haces eso… Está bien quédatela, pero es la última. – Me señalo con su dedo a modo de advertencia.
Sabia que darías tu brazo a torcer, cielo…
Siempre hago eso y siempre dice que es la última, pero nunca lo es. Salimos de la casa de Ren y regresamos con las chicas.
-Ya está el mío. - Afirmó Eren.
-El de nosotras también... Ahora que ya está el equipaje veamos una película antes de irnos a dormir. - Dijo Beth tomando el control del televisor.
Nos sentamos todos a un lado de Beth y miramos la película en silencio. En algún punto de la película, me quedé profundamente dormida. Entre sueños sentí como Eren me cargo en brazos y me llevo hasta la cama improvisada que habíamos hecho en la habitación de cine. A los pocos minutos sentí como las chicas y Ren se recostaron a lado mío abrazándome.
Me desperté, con el ruido de las gotas cuando tintinean la ventana de la habitación. Mire mi teléfono, aún tenemos tiempo para vestirnos, desayunar y llegar con tiempo antes del vuelo. Desperté a las chicas para desayunar.
-Buenos días. - Dijo Hailee estirándose.
- ¿Qué hora es? - Preguntó Meg.
-Las 6:05 AM. - Contesté poniéndome las pantuflas.
- ¿Qué vamos a desayunar? - Preguntó Beth.
-Risa cocino ayer, ahora nos toca a nosotros. - Dijo Ren recogiendo la habitación.
-Ah sí, bueno Risa tomate tu tiempo para tu rutina y cuando termines el desayuno estará listo. – Me decía Hailee mientras ella bajaba las escaleras.
Me dirigí al baño, me lave los dientes, me vestí con ropa cómoda porque el vuelo sería un poco largo, creo recordar que nos dijo Beth que eran casi 18 horas. Terminé mi limpieza facial y bajé al comedor.
-Huele delicioso. – Le sonreí a las chicas.
-Preparamos tus favoritos Risa, cereal con fruta y yogurt, mini hot cakes con Nutella y pan tostado con aguacate. – Decía Meg mientras señalaba cada uno de los platos con comida en la mesa.
-Gracias chicas. - Retire la silla de la mesa para sentarme.
-En un momento más te sirvo. - Dijo Beth.
-Tranquila, yo puedo hacerlo. – Servi en mi vaso un poco de jugo.
- ¡No! Yo lo hare por ti. – Volvió a decir Beth.
Asentí y unos minutos después ya tenía un plato de cada comida que prepararon al frente de mí.
Las chicas se sentaron al igual que Ren. Terminamos de comer y lavamos nuestros platos.
-Ya llegó el taxi por nosotros, tomen sus cosas y salgan. Yo subiré las maletas mis pequeñas. - Dijo Eren mientras iba por las maletas.
-Gracias. - Dijo Meg.
Nosotras nos subimos al coche y unos minutos después Eren hizo lo mismo. Quedamos en ver a las parejas de Hailee y Beth allá. El conductor manejo hasta el aeropuerto, cuando llegamos el chófer nos ayudó a bajar las maletas. Cada quien tomo la suya y caminamos para recoger los boletos, que claramente el personal ya tenía anticipado. Solo dimos los datos para que los empleados sepan que éramos nosotros.
-Pasajeros del vuelo 2117 con destino a los Tahití, Francia. Favor de abordar por la sala 9. - Anunciaron nuestro vuelo.
-Ese es el nuestro, vámonos. - Dijo Ren tomando mi mano para comenzar a caminar.
Caminamos hacia donde nos indicaron y abordamos el avión. Nos tocaron los asientos juntos, por suerte.