El último adiós

Aquel día salí de tu casa aún ya con todo el dolor que me habías hecho pasar con tu falta de interés, de tiempo, de amor, de cariño de apoyo en mis días malos, y con todo eso tenía la esperanza de que en el último minuto corrieras hacía mi, y me dijeras que no querías perderme que habías sido un completo idiota por no darte cuenta de que me estabas perdiendo, pero no, solo escuche detrás mío como se cerraba la puerta… Ahí fue cuando me di cuenta de que realmente no te importaba perderme y lo peor yo trataba de justificarte pensando que estabas pasando un mal momento y que por eso no ponías de tu parte en la relación, al menos eso pensé los primeros días, no te niego que aunque ya estaba harta de toda la basura que estaba viviendo a tu lado, te amaba y mucho, no quería irme de verdad quería quedarme pero yo estaba luchando sola en esa relación que era mía ya no tuya …

Camine de regresó a casa pensando que podías alcanzarme, caminé muy despacio con la ilusión aún de tu búsqueda, pero creo que realmente nunca estuviste ahí...

Solo podía pensar que si era un error el haberme ido, si hice lo correcto, como iba a lograr salir de ahí, ya había dado el paso más importante que era dejarte, llegue a la estación y vi que tenía Wifi, así que lo primero que hice fue bloquearte de todos los lugares posibles, ya estaba resignada …

Cuando volví todos me preguntaron que paso, no pude responder solo dije que subiría y que todo estaba bien, cuando por fin vi la cama solo me lance y comenzó el verdadero infierno, no podía dejar de llorar, mi almohada estaba húmeda, mis ojos estaban hinchados, mis mejillas irritadas al igual que mis parpados, no parecía yo, era como si fuera un alma penando y sentía un profundo dolor en el corazón, me faltaba el aire en cada llanto soltaba un grito de dolor, desesperación y angustia, pero ahora al menos ya sabía que eso pasaría y que todo estaría bien solo tenía que pasar el tiempo y debía de sacar todo lo que traía adentro, porque ese sentimiento y ese dolor ya lo había vivido y desgraciadamente también lo viví gracias a ti.

Hubo un punto en el que deje de llorar pero no porque quisiera si no porque ya no tenia lagrimas, esa expresión ya la había escuchado antes, y no la entendía hasta que la viví, realmente es posible quedarse sin lagrimas… Científicamente no lo sé tal vez si tal vez no pero así se sentía y metafóricamente si era posible, simplemente deje de llorar, me canse? No lo sé y creo que nunca lo sabré pero así fue …

Recuerdo que cuando todo ese sufrimiento paro momentáneamente, tome fuerzas para bajar a desayunar, porque ese día estaba tan decidida que solo me levanté, tomé las cartas que te había escrito y me fuí a tu casa para dejar todo ese dolor de una vez por todas…

Cuando bajé mi abuela me pregunto por que había regresado tan temprano si normalmente cuando estaba contigo siempre me quedaba más tiempo, no sabia que responder, le tenía que decir la verdad? O solo decirle que tenías que entrar temprano a trabajar, había tantas respuestas posibles pero solo dije, pues ya vez jeje…

En fin no se si ella se imaginaba algo, pero con ver mi cara, mis ojos, cualquiera podía darse cuenta de que realmente no estaba bien, pero ella no quiso decir nada, tal vez ya sabía realmente todo pero quería esperarse a que yo se lo dijera.

Comí algo y para mi buena suerte ella se fue y me dejo sóla, supongo que no quiso incomodarme, porque normalmente siempre que como sola ella esta ahí o cualquier persona de mi familia porque dicen que no es lindo comer solo.. En cada bocado un suspiro salía de mi, y no era porque estaba cansada, era porque todo ese dolor y angustia me provocaban sentir el hoyo en el estomago acompañado de angustia miedo y desesperación que se llama ansiedad, que desafortunadamente desencadenaste con cada acción…

Y eso solo era el inicio, creí que ya había aprendido a lidiar con ese dolor porque era la tercera vez que lo pasaba, pero creo que nadie puede acostumbrase a sufrir de tal forma y tampoco debería ser así...

Creo que todos deberían saber que el amor deja de ser amor cuando te quedas en un lugar en el que sabes perfectamente que no perteneces, permitir que te lastimen de tal forma que tengas que cuestionarte si tu eres el error, jamás será un buen lugar.