Seth se quedó callado luego de que Joan le contara lo que había descubierto sobre Noa. Si bien su amigo no había logrado derribar el muro de su mente, había logrado colarse en sus pensamientos y tras ellos vio imágenes de lo que había sido su vida antes de que apareciera en su cama.
—¿Que explicación puede haber para esto? —susurró Seth más para sí mismo que para Joan.
Su amigo estaba mirando la nevera decidiendo que bebida tomar uva o fresa. Los dos estaban ahora en la cocina de la casa de Seth. Joan se giró después de alcanzar la de fresas.
—Lo estuve analizando y recuerdo que mi abuelo una vez mencionó que conoció a alguien que venían de otra dimensión. Tal y como piensa la chica que llegó aquí...
—Noa —le recordó Seth, quien se encontraba de pie en el umbral de la puerta. Mantenía el ceño fruncido y la tensión seguía sin abandonar su cuerpo.
—Noa —repitió—. Ella cree que en algún momento mientras dormía cruzó a nuestra dimensión... La idea de que es un sueño no es discutible y creo que deberíamos recalcarlo. Piensa en parte que solo somos personajes del libro que leía.
—Somos tan reales como ella... Lo que me deja intrigado es que la persona que escribió ese libro conozca tanto sobre nosotros... Es inquietante —afirmó Seth con la mirada perdida.
Joan se acercó a una silla y se dejó caer en ella.
—Lo es... Tengo una teoría, pero no estoy seguro. Además está el hecho de que se parecía a Erika y aunque ella lo desconoce es obvio que fue un hechizo.
Seth caminó hasta él y tomó asiento en frente suyo.
—¿Cual es tu teoría? Esto me tiene un poco confuso... A pesar de todo lo que somos capaces de hacer no creía que pudieran haber otras dimensiones y mucho menos que fuéramos personajes de un libro en ella.
Joan se terminó de tomar el refresco y lo miró exponiendo la sabiduría en sus rasgos.
—Mi teoría es que alguien la trajo aquí. No hay registros sobre apariciones... A excepción de lo que sabe mi abuelo, pero si alguien además de él lo sabía, es probable que la trajera con otros propósitos. Noa es una humana común y no posee muestras habilidades... Si la trajeron e hicieron el hechizo lo más probable es que tuvieran un plan que la incluía y el cual desconoce.
Seth asintió y tomó una decisión.
—Contacta a tu abuelo. Necesito hablar con él. Noa se queda aquí... Me ocuparé de ella.
—Espero que no lo hagas de la misma manera que hace un rato —se mofo su amigo. Seth entorno los ojos y luego hizo de su boca una fina línea. Se veia enojado.
—Era una impostora y creía que podía hacernos daño. Enmendare mi error y la protegeré... Pero eso no significa que me lleve bien con ella. No me gusta.
Joan soltó una carcajada.
—¿De qué mierda te ríes? —gruñó Seth.
—Es hermosa... Imposible que no te guste. Más bien creo que sigues enojado por lo que sucedió en el salón de clases —dijo encogiéndose se hombros.
Seth no dijo nada. Negándose a aceptar algo como eso.
—La protegeré, debería estar contenta con eso.
—¿Que pasará con Erika y con Mike?
—Pondré en aviso al consejo de lo sucedido luego de que hable con ella. Necesito detalles, solo sabes que hay algo mal con él, pero no tienes idea de que. Ha sido nuestro amigo durante muchos años... Me niego a pensar que nos traicionó. En cuanto a Erika no lo sé. No sabemos nada de ella, está desaparecida. No sabemos si se encuentre en el lugar de Noa —concedió.
Joan asintió, pero había algo de duda en él que mortifico a Seth.
—¿Que! ¿Alguna objeción?
Joan se encogió de hombros.
—¿Has pensado en la madre de Erika Sanders cuando se entere que su hija desapareció? —Seth puso los ojos en blanco y con un gesto de impaciencia lo invitó a hablar—. Creo que debemos intentar el hechizo, que Noa sea Erika por un tiempo. Con ella de nuestro lado podemos descubrir que plan oscuro hay tras su aparición.
A Seth no le pareció una mala idea. Joan siempre daba buenas ideas.
—No había pensado en ello, pero tienes razón...
—Tranquilo amigo, es por eso que soy el cerebro del equipo —se burló Joan antes de desaparecer de la habitación.