Capítulo 6: Educación Física

Sonreí de costado al ver que llegaré a tiempo al instituto. Espero que hoy no llueva.
Luego de ponerme unos jeans, y una camisa blanca con mis vans negras, bajé a desayunar con mis padres. Algo que no hacía desde hace mucho tiempo.
Por primera vez, pude tener una charla normal con mi madre (digo normal, porque no comenzó hablar mal de mi patineta o mi estilo de vida, la cual se parece más a la de un chico que a la de una chica. Hasta donde yo sé tengo su mismo órgano femenino, que no pida más).
Además hoy es un día nuevo, hoy no usaré mi skate. Sí como leyeron, William se ofreció para pasarme a buscar, lo mismo que con Lily.
Después de todo él no es tan malo, es sólo que por momentos me hace perder la cordura.

-Nos vemos más tarde - dije sonriendo y saludando a mis padres.

-Que te vaya bien cariño - mi madre me devolvió la sonrisa, al igual que papá.

Suspiré profundo al sentir la bocina del auto, y salí saltando los pequeños escalones de la entrada principal.
William sonrió en cuanto salí, y desde adentro me abrió la puerta.

-Sube, todavía nos queda una parada - rascó su cuello, y se acomodó en el asiento algo incómodo.

Alcé una ceja al verlo tan extraño, ya que corrió la cara a un costado. Cerré la puerta del auto, al mismo tiempo que éste arranca - ¿qué tienes?

-No es nada - dijo riendo mientras dobla en un semáforo, y pude ver de reojo que tiene un corte en la ceja y un leve hematoma en su mejilla.

Me crucé de brazos divertida - al parecer alguien te dio una buena paliza.

Éste sacudió su cabeza sonriendo - no sabes cómo quedó el otro.

Silbé ante su gesto agrandado - algún día nos tendrás que dejar ir con Lily, así te vemos pelear - alcé una ceja al ver que me miró sorprendido.

-No creo que les guste, sabe ir mucha gente - se encogió de hombros - en ésta época sin el campeonato, voy a lugares no tan lindos para chicas - me guiñó un ojo, mientras aparca al frente de la casa de Lily y toca bocina - no quiero verlas después traumadas.

Reí irónicamente - ¿tienes miedo que te veamos perder? - lo desafíe con la mirada, y éste abrió su boca, al parecer acabo de tocar su ego.

-El viernes tengo una pelea importante - me miró de reojo - si quieres pueden venir, pero es muy importante que me avisen antes.

Sonreí de costado y asentí lentamente - está bien, lo hablaré con Lily, y luego te aviso.

William me hizo una mueca no tan convencido, pero luego la cambió por una sonrisa en cuanto subió Lily en el asiento trasero.

-Hola - dijo la rubia entusiasmada - hoy tenemos educación física, no veo la hora de estirar mis músculos.

Rodé mis ojos y me hundí el asiento, creí que éste día iba a ser lindo. Pero ya pensar en la palabra ejercicio, me deprime.
Algo que no compartimos con Lily, es su pasión por educación física.
No me malinterpreten, me gusta el deporte, pero el que dan en el instituto apesta.

-Lo vas a odiar - le dije a William de brazos cruzados.

Lily bufó - no le hagas caso, ella es una aburrida. Te va a encantar - dijo aplaudiendo.

William alzó sus cejas riendo - tengo dos opiniones totalmente diferentes. Creo que seré yo, el que desempate toda ésta cuestión.

-Ya verás que tengo razón - dije soplando un cabello que calló sobre mi rostro.

Lily rió ante mi reacción, pero ésto de educación física no es lo peor. No.
Y es algo que ninguno a mencionado, un pequeño problema, Jensen. Lamentablemente compartimos la clase con él, como siempre. Pero tengo la impresión que ésta vez será diferente, muy diferente.
Luego de hablar estupideces, llegamos al instituto. No puedo describir la cara de todos, al ver que bajábamos del auto de William Flecher.
Algunos nos fulminaban con la mirada y otros se quedan mirando sin comprender nada.
Créanme, si me hubieran dicho cuatro días atrás, que vendría en el auto de William, estaría riéndome tirada en el suelo, sin poder creer que esa barbaridad podría ocurrir.
Y aquí estoy, cerrando la puerta del auto. Mirando mal a todos los chusmas que no paran de susurrarnos.
¿Acaso tiene algo de malo? Sacudí mi cabeza, creo que nunca entenderé las ocurrencias de personas tan retrasadas, como éstas.

Apreté mi frente al ver de lejos a Sarah, con su boca abierta - vamos, hay que ir a clases - dije a paso rápido, mientras entro al instituto. 
No tengo ganas que esa chica vuelva a interrogarme, si su trabajo es el periódico escolar, que a mí no me involucre allí.

-Ten más cuidado - dijo una voz, luego que me chocara.

-Lo siento - alcé mi vista al ver que es Hal - ¿tú no estabas de viaje? - me crucé de brazos algo dudosa.

Hal era uno de los mejores amigos de Jensen, gracias a él me puse de novia. Pero en éstos momentos, ya no es tan amigo de mi ex. Desde lo que me hizo, Hal decidió tomar distancia. Se sintió culpable, porque según él, dice que si no me lo hubiera presentado, no tendría que haber pasado por lo que pasé.
Lo que si se, es que entre Hal y Lily tuvieron algo. La tonta no lo admite, pero yo sé que hubo algo.