Capítulo 17

¿Alguna tuvieron esa sensación de que sus vidas van demasiado bien? Es decir, como si las cosas por fin comenzaran a sentirse mejor, casi como si estuvieras esperando para despertar del bellísimo sueño y caer en la realidad, porque no crees que pueda ser real, ya que todo está yendo sospechosamente bien. Este último mes estuve sintiéndome así, como esperando a que el golpe que la vida tiene planeado para mí me caiga encima, porque a decir verdad las cosas no podrían estar yendo mejor. Está todo tan bien, que tengo miedo de lo que pueda llegar a suceder.

Con Kaden las cosas están igual que siempre, con alguna que otra pelea que terminamos arreglando en la cama fueron pasando los días, digamos que se ha vuelto una pequeña costumbre, no puedo evitar pensar que todo mi alrededor sabe lo que está sucediendo entre nosotros, aunque si soy sincera, a veces ni siquiera yo puedo decir que es lo que está pasando con él. Si pongo mis pensamientos en orden, diría que en mi interior las cosas se han revolucionado por completo, al principio creí que estaba confundida porque nos acostábamos seguido, y hablo de muy seguido, hasta llegué a pensar que esta sensación en mi panza cuando estoy con él desaparecería con el tiempo, pero ha pasado tiempo, y al contrario de desaparecer, cada vez se hace más fuerte.

Kaden siempre llamó mi atención, incluso desde antes de conocerlo, me atrajo desde que lo vi entrar a la oficina de su hermana sin remera y, por un tiempo, considero que lo que sentía por él era solo atracción, pero ahora es mucho más que eso, ha conseguido cautivarme por completo en todos los sentidos de la palabra y, el solo hecho de aceptarlo para mí misma, me aterra, porque no tengo ni una mísera pista de que como se siente él al respecto.

Me encontraba en la cocina lavando los platos del almuerzo tan inmersa en mis pensamientos que Jessie tuvo que agitarme levemente para que me entere de su existencia.

- ¿Caddie? ¿Te encuentras bien?- preguntó con un brillo de curiosidad en su mirada.

- ¿Qué? Claro, por supuesto que estoy bien- respondí mientras volvía a la realidad

- ¿Estás segura? Hace semanas que estas así- de hecho no hay nada más cierto, no puedo dejar de pensar en Kaden, trato en mi cabeza de unir las piezas de un rompecabezas imposible de resolver por el solo hecho de descifrar cómo se siente él ¿En qué momento comencé a pensarte cada segundo de mi vida Maldito Kaden?

- Estoy bien Jessie, de verdad. No tienes de que preocuparte- me miró insegura cruzándose de brazos mientras yo cerraba la canilla.

- Si sigues así de pensativa sin hablar con nadie, terminaras por explotar amiga- aseguró y yo lo sabía, y le temía a eso- Pero allá tu... Escucha recuerdas la reunión de mañana ¿cierto? Papá se asociará con la empresa de Arthur Page, ya sabes el padre de Maya Page ¿la conoces? Se ha pasado por aquí una que otra vez, aunque pensándolo bien en este último tiempo no la he visto ¿por qué será?- dijo al tiempo que llevaba su dedo índice a su mentón tratando de verse como una detective ¿Maya? ¿Por qué siento que conozco ese nombre?... Las imágenes de hace dos meses vuelven a mi memoria, la cocina, la chica que estaba en la cocina besándose con Kaden ¿era esa Maya?

- ¿Caddie?- volvió a insistir Jessie chasqueando sus dedos frente a mis ojos para llamar mi atención- Comienzas a preocuparme debería llevarte a un médico-

- No seas ridícula, estoy bien. Y... sobre esa tal Maya ¿es amiga de Kaden?- fue con esa pregunta que ella sonrió

- ¿Te importa?-

- No empieces Jessie, solo es una pregunta-

- Creo que solían tener algo, ya sabes dos personas atractivas como mi hermano y esa chica no podrían pasar mucho tiempo sin acostarse- tragué duro y una punzada de celos me invadió de cuerpo entero, no desconfiaba de Kaden en lo más minino, de hecho... si se acuesta con ella ¿contaría como infidelidad? Después de todo jamás hablamos de eso.

- ¿En serio? ¿Dices que se acostaron?-

- ¡Te atrapé! Es obvio que te gusta Kaden, se nota a leguas de distancia...-

- Que no me gusta pesada- la corté

- ¿Quién no te gusta?- acotó Kaden entrando a la cocina, ¿Por qué cada vez lo veo me resulta más atractivo? Eso no puede ser algo normal. No pude evitar reprimir una sonrisa a medida que él se acercaba a nosotras para quedar a mi lado.

- ¿Cómo dijiste que se llamaba Caddie? ¿Leo?- oh Jessie, te has metido en problemas...todos saben a qué Leo está refiriéndose ¿verdad? Noté que Kaden apretó la mandíbula

- ¿Quién?- preguntó mirándome a mí, ahora de verdad no pude evitar reírme a carcajadas

- Está jugando contigo Kaden, no te tomes todo tan en serio- respondí segundos después

- Así es, ¿Por qué tan serio hermanito?- Jessie usó las mismas palabras de Kaden contra él, lo que lo hacía incluso más gracioso. La mirada de Kaden se relajó y volvió a mirarme con una sonrisa en su cara.

- Están demasiado graciosas para mi gusto- dijo

- Como sea- volvió a sonreír Jessie- Caddie, entonces ¿tienes todo listo para la cena de mañana? De verdad es importante-

- Quédate tranquila, lo tengo todo bajo control- sonreí, ahora era momento de atacarla- Pero me falta un último detalle, ¿traerás a Amelia esta vez?- ella se tensó ante mi pregunta y Kaden sonrió.

- ¿Amelia? ¿Por qué debería traer a Amelia?-

- Ya sabes- siguió Kaden- Aun no nos has presentado a tu novia hermanita-

- No es mi novia- aseguró, Kaden y yo compartimos una mirada, sonriéndonos mutuamente ¿así que no te gustan las encrucijadas Jessie? Irónico ¿cierto? Es solo un poco de tu propia medicina, ella llevaba haciendo eso con nosotros desde que yo llegué a esta casa.

- Si es tu novia- respondimos al unísono, ella se sonrojó al instante

- Cállense ya, par de tortolitos- dijo antes de irse.

Cuando ella desapareció Kaden me abrazó por la espalda colocando su cabeza en mi cuello para comenzar a besarme, cerré los ojos disfrutando de su cercanía... ¿por qué esto se siente tan bien? Gemí levemente y él sonrió sobre mi piel descubierta.