Vamos a hacer una fiesta así sin motivo alguno. Solo porque nos rompieron el corazón y algo de música le vendría bien. Solo porque nuestros planes fallaron al borde del abismo y ya va siendo hora de rehacerlos. Solo porque nos quedamos sin amigos y quizás el confeti los atraiga. Solo porque la cabeza nos pesa y algo de alcohol nos aflojaría la carga. Solo porque sí. Porque mañana podríamos morir, y esta podría ser nuestra fiesta de despedida.
Vamos a divertirnos aunque no hayan motivos, porque la vida es corta, y es mejor morir celebrando, que vivir sufriendo.