Uno no se puede enamorar de los demás por como son, aunque parezca ilógico. Uno siempre tiene que tener miras hacia el futuro, comprender que las personas son seres en constante cambio, y aprender a amar a los demás no solo por quienes son, sino también por quienes pueden llegar a ser. No te puedes enamorar de una imagen idealizada, pero sí de una imagen real. No puedes esperar cambiar a las personas, pero sí debes esperar un cambio en ellas. Y si estás listo para tomar el riesgo, quién sabe y te llevas la lotería con una persona que aunque cambie, lo haga al mismo ritmo que tú.