Capítulo (12)

<<Doble Round>>

El día entero me lo pasé encerrada en la habitación, no salí a comer ni a cenar a pesar de que Zack insistía en que saliera y hacía todo lo posible para hablar conmigo pero yo solo quería llorar y estar sola.

Quizás dirán que soy dramática, quizás lo soy y quizás no pero nunca espere que Alex venga a mi casa con la intención de abusar de mi, el siempre fue ese chico sano que se le sonrojaban las mejillas cuando hablábamos de tener relaciones pero ya me di cuenta que es todo lo contrario.

Estoy recostada en la cama con las manos en mi estómago y viendo el techo,  hace un momento sonó la alarma para que valla a correr pero no moví un solo músculo, ni siquiera quiero ir a la escuela solo quiero quedarme aquí acostada viendo el techo .

Escucho pasos acercarse a mi puerta pero me quedo donde estoy, se que es Zack, y no se si pueda verlo a la cara después de lo que paso anoche, no porque le pego a Alex sino porque tubo que ir a quitármelo de encima, no se que pensará.

Escucho que los pasos cesan cuando están atrás de la puerta, puedo ver  la sombra de sus zapatos por la parte de abajo de la puerta.

- Ana- dice después de unos segundos, yo no respondo.

- Ana , tienes que ir a la escuela.

- No quiero ir- digo sentándome en la cama.

- Vamos, no te quedes ahí encerrada- dice con voz suave y con tono de preocupación.

- No, no voy a ir- dije volviendo a acostarme.

- Claro que iras- dice con autoridad- ahora sal de ahí.

- Dije que no, Zack.

-  Si no sales ahora mismo pateare la puerta y la romperé- dice y me sorprendo al escuchar que lo dice en tono serio.

- No eres capas- digo y se me forma una sonrisa, no se por que.

- Ah no?- dice y empiezo a imaginarme la sonrisa que debe de tener.

- No- digo y escucho que da varios pasos a tras, joder ¿No ara eso o si? No me quedo a averiguarlo cuando veo que da un paso atrás salto de la cama y alcanzó a abrir la puerta antes que le de la parada, ¿se esta volviendo loco?.

Cuando alcanzó a ver su cara tiene la misma sonrisa que me imagine, esa de satisfacción pero cuando sus ojos se encuentran con los míos se le borra la sonrisa y se lame los labios.

- Estás bien?- pregunta con preocupación, esa es una de la preguntas que más odio que me hagan cuando ven que no estoy bien pero ¿me molesta que el la haga?.

-  Estoy bien- digo bajando la voz y encontrándome con unas zapatillas deportivas blancas, me dedicó a entrar a la habitación pero el me interrumpe antes de que pueda entrar.

- Cámbiate y baja- dice con autoridad- yo te llevaré a la escuela.

- puedo ir sola- digo sorprendida con su tono de voz.

- Ya lo se- dice mirándome- pero no quiero que te devuelvas a medio camino.

Me quedo mirándolo unos minutos, me cuenta de que tiene un suéter negro cuello de tortuga y unos jeans negros, tiene el pelo alborotado (como siempre) y sus labios rojos están entre abiertos mientras lo observo.

No quiero ir a la escuela pero creo que no es buena idea quedarme aquí viendo el techo de mi habitación.

- Bueno, bajo en unos minutos.

Dicho eso entró a la habitación y me meto al baño, me pongo frente al espejo y veo que tengo la cara roja, suerte que no la tengo hinchada, me meto a la bañera y minutos después salgo.

Busco unos pantalones deportivos negros y un top corto blanco con mangas hasta los hombros y unas zapatillas deportivas banca, después de ponérmelos me arreglo un poco el pelo dejándolo suelto, me pongo un poco de colonia y cojo mi mochila. Cuando estoy bajando las escaleras me da un olor a comida recién echa y entro a la cocina.

En esta se encuentra Zack sirviendo en dos platos tocino, huevos y tortillas, tengo mucha hambre ya que no comí ni cene anoche, me siento en la mesa en silencio mientras Zack pone los platos en la misma y al lado pone dos vasos de jugo de manzana.

Comemos en silencio supongo que al igual que yo el no quiere tocar el tema de ayer. Aún no me acostumbro a tenerlo aquí sabiendo que él fue mi primer amor y el chico que siempre salía en mis sueños aunque nunca le vi la cara y sabiendo que él es Pili.

Cuando terminamos de desayunar yo me pongo a fregar los trastes sucios tratando de no ensuciarme ya que es una costumbre que lo haga, no me gusta ponerme el mandil. Cuando termino subo corriendo a mi habitación a buscar el celular que se me había quedado encima de la mesita de noche y cuando estoy abajo cojo la mochila y salgo de la casa poniendo el seguro.

Me monto en el asiento del copiloto, Zack en silencio enciende el auto y arranca, yo solo recuesto la cabeza en la ventanilla de la puerta y me dedicó a ver la calle.

Todo el camino lo pasamos en silencio, ni Zack ni yo hablamos, supongo que no tenía ganas de hablar.

Cuando estaciona en auto al frente de la escuela yo salgo colocándome la mochila en la espalda y noto como el también sale y me camina de tras de mi ¿que quiere ahora?.

- ¿Que haces?- pregunto sin voltearme.

- Nada, solo estoy caminando contigo- dice y sigue caminando.

- No puedes venir, no eres de esta escuela, esta prohibido que vengan personas que no están inscritos y que no toman clases.

- No vengo a tomar clases- dice colocándose a mi lado- solo quiero llevarte al aula.

- No eres mi guardaespaldas, Zack- digo mirándolo.

- Ya lo se- dice encogiéndose de hombros, yo me quedo mirando su perfil unos segundos pero el me atrapa y yo desvió la vista concentrándome en llegar a mi casillero.