Otro ser dentro de ella

-Madame, entregué lo que me pidió a la Señora Rinaldi-

-Gracias Mike, ahora solo te pido que estés pendiente -

-Encontré a la mujer, según la petición del abuelo Rinaldi, fue desfigurada, no podrá volver a caminar, no podemos matarla por que está protegida por alguien del bajo mundo-

-Desaste de ella... -

-Pero señora, es el hijo mayor de Daniel-

-Entonces dale una advertencia -

-Mi señora, cuando va a volver -

-Me extrañas demasiado caro mio, se que unas llamadas de vez en cuando no son suficientes, pero ten paciencia-

-El lobo... -

-No tienes orgullo, no lo menciones-

-Debo hacerlo, se ha encargado de la mujer, pero... no creo que haya partido a América como se le ordenó-

-Deja que haga lo quiera, no me voy a meter-

-Pero si es a ti... madame si es con usted -

-Aún no existe quien pueda matarme -

-Pero puede hacerle daño-

-Mike, solo haz lo que te pedí y ya que estoy cerca iré a ver a la bella Rinaldi-

-Señora, debe tener cuidado -

Ella simplemente le colgó la llamada, ya era bastante obvia su preocupación, tambien sabía quien le estaba ayudando a la mujer, había gente que no se conforma con lo que tiene, siempre quiere más.

-Oscar, llevame al hospital Central, hay alguien a quien debo visitar-

-Si madame -

Hacia años que no consideraba a nadie, menos para visitas, pero por alguna razón extraña a mi, sabía que estas personas seguirían teniendo una conexión conmigo en el futuro.

-la señora Rinaldi puede ayudarnos con esto, algo me dice que tu otra parte está por despertar -

-Aún no asimilo que tu existas, ni siquiera puedo intentar transformar mi cuerpo debido a este collar -

-Yo lo se, estoy anciosa por hacerlo, pero creo que ella es la clave o parte de, pero algo sucederá que nos libere de esto -

-calma Sam, talvez solo sean suposiciones tuyas-

No pedí indicaciones puesto que algo me arrastraba hasta el lugar donde ella se encontraba, tambien senti la presencia del hombre a su lado. Era extraño sentirlo, aun no los veia pero pude ver aquellos lazos que los unian, ese pequeño hilo invisible que los atraía.

-Son alma gemela uno del otro, nunca creí poder ver una conexión asi de fuerte Luna-

-¿estas segura que es eso lo que vemos?-

-Completamente, es el lazo que los une, a diferencia de nosotros, los humanos no saben quien es su alma gemela, pero muy de vez en cuanto en una de sus vidas pueden encontrarlo y estar con ella. En este caso, ellos son almas gemelas.

-Jamás debiste confiar en Alexia... ella fue la planeó y provoco todo esto- irrumpir en la habitación como si fuera mía no era mi forma de presentarme ante la familia, pero dado que Alessandro jamás lo haría, no importaba -
-¡Su nombre!- su grito, solo hizo que sacara una sonrisa de mi, pocas veces alguien emanaba de sí su aura de protección y el lo hacía, la amaba pero sus malas decisiones estaban fracturando su unión.
-Luci... esposa de Alessandro, ella me pidió las pruebas de todo este desastre y ahora vengo a preguntar ¿que hago con la mujer que provoco esto?- le mostré la tablet con la mujer defigurada, en la cama de un hospital-
-Que la tierra conozca sus huesos y la humanidad no recuerde su nombre- interrumpe nuestras miradas el secretario de Anthon quien se llama Martin, casi estallo de risa al saber el mensaje- es lo que me dijo - creo que se dio cuenta que estaba por reirme-

-Algo dramática - respondí sonriendo -será un poco difícil hacerlo, ella está protegida por alguien del bajo mundo, pero dile que lo considere hecho-

Martin saco dos maletas y las entregó a la mujer...
-Que no quede rastro de ella- acepte con un asentimiento, no es que no pueda, pero se como lograr que ella ya no tenga más oxígeno gratis.

Anthon aún estaba desorientado, no entendía nada de lo que estaba pasando y sobre todo, de donde sacó ese dinero Martín.
-En otra vez serán las presentaciones cuñado- tenía que irme pronto, en cuanto a la mujer en la cama, le coloque el anillo que había estado preparando, aun no entendia la razón de hacerle este favor, pero en todo caso, sería bueno para mi.
-Eso será suficiente para que otros no intenten hacer nada en su contra de nuevo, la mujer contrato gente de mi mundo para hacer este trabajo, por lo que costó encontrar la verdad- solo pude darle un beso para así poder saber donde estaba o si necesitaba mi ayuda, también vi un poco de sus pensamientos, algo dispersos pero no podía hacer mucho por ella.
-Tráele a sus hijos que la rodeen y te aseguro que abriría sus ojos; ellos son la única razón por la se mantendría en este mundo para seguir luchando-

Un mes después...

-Cesar, hay algo más que deba saber -ella estaba escuchando el reporte de cada día de como iban las cosas en la mansión.

-Alguien está siguiendo a la nana del lobo, puede que no sea nada pero puede ser importante-

-la han seguido hasta la casa-

-Si, aunque el lobo no ha encontrado fallas en la seguridad, no se de que va -