Capitulo 2
La señora Leonor que en realidad es la Chamana Choi que ocupa su cuerpo saca de su bolso de mano lo que parece ser una piedra negra con algunos refelejos no muy notorios de morado y verde, Martina no tiene idea que significa lo que tiene en su mano pero no le trae buena espina. La enuca Sara la inmoviliza usando un polvo mágico que cae en su cuerpo con solo soplar delante de ella, luego sale de su escondite la hija de la Chamana Choi, con un aspecto físico espantoso, un rostro con cicatrices como si fueran cortadas un poco profundas, su cabello demacrado, esponjoso y quemado, de contextura delgada. Martina al ver aquella mujer entra en susto inmediato, sus nervios se hicieron notar.
-¡Ok!, ¿Que está pasando aquí?- pregunta incredula, -¿Porque no puedo moverme?- se jamaquea de la enuca sin exito alguno, cayendo sobre la tierra mojada, -¿Quien es esta mujer?-.
-Martina, Martina- le llama por su nombre con una voz muuy tranquila, acercandose a ella tomando sus mejillas, -Te presento a mi hija- le señala, -Como puedes ver, no te puedes mover y eso se debe a un polvo mágico que te inmoviliza por completo, pues....- hace una pausa para levantarse y proseguir dejando a Martina en el suelo, -Mi plan es muy simple... esta piedra que tengo aquí me permite cambiar de alma, por lo tanto tu alma va a pasar al cuerpo de mi hija y el de mi hija al tuyo-.
-¿Estas loca?- grita, -¡AUXILIOOOOO!- sus gritos son desesperados, quiere que alguien la escuche, sin embargo es inutil porque el lugar donde se encuentran es muy lejos de la ciudad Daheo, Martina jamás se imagino que algo así le pudiera suceder. -¿Quien eres? ¿Porque me haces esto?-
-Bueno no quería decirte quien soy, pero de todas maneras no vas a vivir- lo dice de una manera muy relajada y dominante, para Martina eso no es nada bueno. -Soy la Chamana Choi, una de las tantas del barrio Zeon. supongo que has escuchado acerca de ese lugar- le muestra una sonrisa picara, -La familia de Bastian arruino mi vida, dejandome sin nada pero lo que ellos no se imaginan es que estan conviviendo con la Chamana Choi, solo que en este cuerpo- se señala ella misma, -Soy hermosa lo se-, obvio eso ultimo fue sarcasmo, sabe muy bien que la madre de Bastian es una mujer muy hermosa.
-Nonono- se agita Martina en la tierra casi arrastra, -AUXILIO POR FAVOR- grita a mas no poder.
-¡Ay! niña cállate- interviene la hija de la Chamana Choi, -No gastes tus energías que nadie va a venir por ti-
-Exacto- menciona la Chamana, -¿Crees que Bastian se preocupa por ti?, te estaría haciendo un favor de no estar mendingando amor-.
Para la licantropa su situación era muy mala, en cierta parte tenía razón... Bastian nisiquiera se preocupa por ella, no ha sentido ese amor que tanto espera de él, diez años y aún nada como que no existira o solo esta por capricho, muchas cosas se hacen preguntarse asi misma sobre lo que siente por Bastian, pero ocupar el lugar de su luna Alma es muy complicado para un alfa enamorado, y su situación ahora lo hace pensar muy bien, si rendirse o luchar por algo que no sabe como puede terminar, la primera opción va ganando, aunque piensa mucho en su familia, en todos ellos, pero también piensa en su dolor y rechazo del alfa, ventaja que la Chamana Choi aprovecha, de su vulnerabilidad.
Martina no deja correr su lagrimas, moverse es inutil. Está simplemente acorralada por esas mujeres, un dolor profundo se le ha desarrollado en su pecho, justo hoy en luna llena iba hacer el hechizo de quedar embarazada de su alfa, sin embargo allí está.. en el suelo mojado en un estado vegetal.
-Es hora- dice la mujer muy decidida-
Por otro lado Bastian camina los alrededores de la mansión, se pregunta donde estará Martina, ella solía molestarlo e incluso estar siempre a su lado aunque le huyera siempre.
-Panchita ¿De casualidad sabes donde se encuentra Martina?- pregunta al encontrarsela en la cocina.
-No mi joven, no la he visto- responde, -¿Que sucede? ¿ahora te importa la señorita Martina?. le pregunta en forma de juego, ella sabe muy bien que su criado no era nada amoroso ni amable con la joven, que se pregunte donde está es algo muy extraño, cuando antes ni le importaba su paradero.
-No..- responde seguro, -Solo es curiosidad- y se marcha a su habitación. Pero panchita conoce muy bien a su criado, en el fondo le importa a la señorita Martina, despues de tanto tiempo por primera vez muestra algo de preocupación por ella y curiosidad, su corazón frío como también seco ahora es que se esta abriendo paso a nuevos sentimientos.
Sin embargo Bastian se siente extraño internamente, como si estuviera a punto de perder lo que siempre tuvo pero no pudo valorar, su pecho le empieza a doler de una manera extraña como si estuviera atado a otra persona y estuviera sintiendo su mismo dolor, sus nervios y sus miedos a la vez. Se siente confundido porque jamás había sentido algo así, nisiquiera con su difunta alma, este sentimiento es diferente.
-Creo que me voy a volver loco- se dice así mismo, -Me ducharé y me relajaré- se dirige al baño a preparar una tina de agua caliente para olvidarse de ese sentimiento que lo aturde de cierta manera.
A las afueras de la ciudad Daheo