Cada mañana a la misma hora la alarma de Santiago suena. Todos nos despertamos pero ya sin quejarnos; una vez que te estás adaptando debes aceptar que ciertas cosas nunca van a cambiar.
Intento ponerme de pie pero aún me duele el cuerpo luego de esa batalla con Sebastián; este día si me encuentro muy agotado.
— Todos de pie—. Mencionó Santiago quién es el más animado de todos—. Tenemos una simulación que pasar y puntos que ganar ¿Qué están esperando?
Santiago me ayudó a ponerme de pie; debo agradecer que está atento a todo.
***
Me dirijo al baño con mucho cuidado; aún tengo heridas que deben sanar y deseo ver cómo están.
Me enfoco en el espejo y observo mi rostro que aún está con muchas marcas y el ojo aún achinado. Mi espalda está aún con marcas de los puños de Sebastián y lo mismo de mi pecho.
— Por lo menos aún sigo con vida—. Me dije a mi mismo.
Ese es mi único consuelo; debo agradecer que Sebastián tuvo cierta compasión conmigo.
Ingreso a la ducha y dejo que las gotas de agua caigan por mi maltratado cuerpo.
Luego de unos minutos regreso a la habitación donde están todos esperando por mi llegada; soy el último en llegar y me siento avergonzado por eso.
— ¿Por qué te tardas demasiado?—. Me preguntó Akiko—. Debes saber que eres el último en salir.
Solo ignoro su pregunta. Lo mejor es no tener problemas con mi equipo.
Salimos juntos como equipo. Ahora sí estamos listos para la simulación de hoy.
Ya están en la mesa nuestros desayunos y solo es cuestión de tiempo saber sobre la simulación de este día.
— ¡Jóvenes!—. Se escuchó la voz de aquel director quién está en el atril principal— ¡Hoy tendrán una simulación muy interesante; tiene que ver con un vídeo juego en el que deben elegir ustedes el juego. Sean inteligentes y elijan con cuidado!—. Dijo y por ahora me suena a una simulación en la que piensan sobre la importancia de elegir— ¿Alguna duda?—. Preguntó.
— ¿Estaremos juntos en la simulación?—. Preguntó una chica.
Lo interesante es que está vez nadie se había quedado en silencio.
— Si. Está vez tendrán el privilegio de empezar la simulación juntos.
Esa fue una buena idea para nosotros; bajo mis condiciones lo mejor es empezar con mi grupo.
— ¿Dónde están las opciones de los juegos?—. Preguntó Dan.
— En los relojes que se les proporcionó. Allí pueden buscar el juego que desean y debe ser elegido de manera grupal.
Luego de esa pregunta todos nos quedamos en silencio. Nuestras dudas fueron disipadas. El director se alejó y nosotros empezamos a buscar en nuestros relojes las opciones que tenemos.
— ¿Alguna idea?—. Preguntó Anna.
Nos quedamos viendo entre todos.
— Pokemon—. Dijo Santiago al instante.
— Apoyo tu comentario—. Le mencioné.
Ambos chocamos nuestras manos bajo la mirada de las chicas quiénes nos ven como unos niños.
— Inicial favorito—. Preguntó Santiago.
— Chimchar—. Le contesté— ¿Y tú?
— Treecko. Es el mejor de todos.
Se muestra emoción en nuestras palabras al hablar sobre un tema que es de interés para los niños en general.
— No es por interrumpir pero estamos por tomar una desición importante—. Mencionó Akiko un poco molesta—. Aparte no me gusta eso.
Santiago y yo nos miramos confundidos por ese comentario.
— Eres de Japón—. Empezó a decir Santiago.
— Y no te gusta Pokémon—. Comenté.
— En fin...—. Mencionó Santiago.
— La hipocresía—. Terminé la oración mientras volvimos a chocar las manos.
Akiko se dió un golpe en el rostro ante nuestra reacción infantil.
— Niños. Estamos con niños. Por supuesto—. Volvió a mencionar Akiko.
Santiago y yo solo elegimos reírnos.
Por ahora somos los únicos que han dado una idea aunque no la vean tan buena.
— Mario kart—. Propuso Anna.
Santiago y yo asentimos a esa idea.
— No creo que sea una buena idea—. Refutó Jessica—. No confío en ellos y por eso no quiero ni imaginar en cómo será la pista en la que nos ubicarán.
Ella tiene razón; aquí podemos esperar lo que sea de los encargados de cada simulador.
— ¿Alguna idea?—. Les pregunté—. Se nos está agotado el tiempo.
Todos nos miramos. Tampoco queremos ser descalificados o que ellos se encarguen de elegir por nosotros.
— Que tal Pacman—. Sugirió Akiko.
Es uno sencillo. Somos algunos y supongo que debemos recolectar puntos mientras escapamos de unos fantasmas agradables.
— Estoy de acuerdo—. Mencionó Anna.
Todos nos mostramos de acuerdo a esa elección; pacman es un juego sencillo y lo que menos queremos ahora es complicarnos buscando algo más elaborado.
Buscamos en nuestros relojes ese juego y lo añadimos mostrando que fue una elección grupal; ahora solo debemos esperar a que sea nuestro turno.
— Mi grupo favorito—. Mencionó Masón. Cuando creí que este día iba a mejorar aparecieron ellos— ¿Qué tema eligieron para jugar?
Ahora Masón está tratando de ser amable por conveniencia propia.
— ¿Te importa?—. Le contestó Jessica.
— Claro. Si somos amigos—. Contestó Dan.
— Deben agradecer que le perdonamos la vida a alguien de los suyos—. Mencionó Sebastián mientras ponía su enorme puño sobre la mesa
Me da escalofríos verlo.
— ¡Ya basta!—. Gritó Anna— ¿Qué quieren?
Todos la miramos; es la primera vez que la veo alterarse por algún comentario.
— Solo deseamos saber que juego han elegido—. Respondió Masón muy calmado.
— Pacman. Elegimos pacman—. Contestó Anna—. Ahora por favor pueden irse.
Ellos se empezaron a reír luego de esa respuesta.
—¿Pacman?—. Empezó a hablar Masón—. Juego de niños. Nosotros elegimos silent hill. Me sorprende que no hayan elegido uno de niños como héroes o de pokémon.
Cuando Masón nombró esos dos juegos Santiago y yo nos vimos. Ambos sentimos vergüenza; eso fue algo que Masón notó.