Lo miro con los ojos entrecerrados.
—No me enamoré de él, idiota, solo digo que me pareció muy interesante.
Mi hermano ríe y yo le saco la lengua.
—Ven aquí pequeña tonta —dice y me abraza.
Me levanto de su cama y salgo de la habitación.
***
—Les, voy a la tienda, ¿vienes? —Brad me está observando desde el umbral de la puerta de mi habitación.
La noche anterior entré a mi habitación a dormir. Ahora estoy en mi cama usando mi portátil, sin ganas algunas de levantarme de la cama.
—Ay pero es mi día de sedentarismo.
—Por favor, quiero un poco de compañía, además podríamos ir a otro lugar, mamá y papá trabajan y no encuentro nada divertido que nos quedemos aquí —lo miro y este me sonríe con inocencia.
—Bien, ya voy —me levanto de la cama y cierro la puerta en su cara para buscar algo que usar.
Opto por un jean oscuro y una blusa blanca. Mi cabello lo dejo suelto y me pongo unas zapatillas negras.
Salgo de la habitación y me encuentro con mi hermano afuera en el living.
—¿Nos vamos?
Él asiente y ambos salimos de la casa. Entro a su auto y pongo la radio, la canción de Jason Derulo- Trumpets comienza a sonar.
Adoro esa canción, así que la canto a todo pulmón. Como si se la dedicara a mi hermano. Aunque obviamente no pues lo único que sentiría si lo viera desnudo sería asquito.
Salimos rápidamente de la urbanización.
Nos adentramos en la carretera principal y Brad conduce con normalidad, mientras canta junto a mi.
Pero todo pasa muy rápido. Una camioneta viene en dirección contraria, además que a una velocidad imposible. La camioneta pierde el control, Brad intenta esquivarla pero esta nos impacta, haciendo que el auto vuele por los aires. Siento el brazo de Brad sobre mi pecho, presionándome con fuerza contra el asiento. Giro mi cabeza para mirarlo y siento unas inmensas ganas de llorar, vamos a morir.
El impacto es duro, pero el auto no se detiene ahí. Sigue girando y saltando, como si en realidad no fuera nada pesado. Mi vista está al frente, sin poder despegarse de lo que solía ser el cristal frontal.
Vuelvo a mirar a Brad y este me mira a mi. Él saca la mano de mi pecho y la lleva a su cinturón de seguridad, lo suelta y se inclina con rapidez y dificultad sobre mi. Abre la puerta del pasajero y quita mi cinturón de seguridad. No entiendo lo que pasa. Él solo besa mi frente y murmura "te amo mi pequeña", para luego empujarme fuera del auto.
Creí que caería peor, pero el impacto llega casi al instante, fue duro, pero no como lo que mis ojos presenciaron luego.
El auto sigue rodando, pero se detiene al impactar con una valla, quedando el auto entero sobre esta.
Me levanto del suelo como puedo y corro al auto. Este bota humo, pero eso no es importante.
Siento que alguien me agarra de la cintura y me arrastra hacia atrás. Forcejeo para que me suelte.
Logro zafarme del agarre de ese desconocido y corro al auto donde Brad se ha quedado.
—¡Brad! —lloro buscando a Brad. La puerta del conductor ha volado y por un momento no encuentro a mi hermano, pero ahí está, aplastado entre la valla y el asiento, añadiendo la parte trasera del auto que ha quedado pegada al frente.
—¡No, Brad! —lloro intentando sacarlo.
—Leslie... —está vivo, Brad está vivo —... Sal de aquí...
—No, Brad, te sacaré de este auto, lo prometo.
Me meto más al auto y alguien me saca. Mis uñas se entierran en el interior del auto. Quiero estar ahí con mi hermano.
—Te amo, Leslie, nunca lo olvides...
El desconocido ni siquiera logra llevarme muy lejos cuando el auto estalla en llamas. Todo un caos.
—¡¡No, Brad!! —grito mirando como las llamas consumen el auto, el auto con mi hermano vivo dentro.
¿Por qué no saltó conmigo? Pudimos salvarnos los dos.
Brad, Brad, Brad.
Su rostro preocupado dentro del auto, antes de lanzarme fuera, viene a mi mente.
Las sirenas de ambulancias, policías y bomberos suenan cerca, las voces de distintas personas preguntando si estoy bien, autos que pasan por mi lado.
Pero no estoy concentrada en nada de eso, solo en ese auto, mi hermano.
Alguien me toma del hombro y me saca de mi trance. Un oficial de policía se encuentra frente a mi.
—Señorita, venga por aquí, necesita atención médica.
—Mi hermano —el oficial me lleva con él y nos detenemos frente a una ambulancia —Brad, él está allí, está vivo, yo lo he visto... —tengo la mirada pérdida, mientras mi mente solo vaga en mi hermano.
Brad P. O. V.
Cuando intento esquivar la camioneta es demasiado tarde, nos impacta, haciendo que mi auto se eleve por los aires.
Leslie.
Es lo único que puedo pensar, mi hermana.
Cruzo mi mano sobre su pecho, ella luce mal, en su rostro no hay más que terror.
Ella me mira, no moriremos aquí.
Mi mano vuela a mi cinturón de seguridad y lo desabrocho con rapidez. Me inclino sobre ella y abro la puerta. La miro, ella no entiende lo que está sucediendo.
Editado: 05.04.2018