El doctor nos comentó que la operación se demoraría un tiempo, ya que se trataba de un felino con las defenzas bajas, observaba el reloj de la sala de espera que se encontraba colocado en la pared y veia como pasaban las horas, no dejaba de lloriquear, sentia culpa por mi descuido, tenia mucho miedo que ya se hubiera muerto. A lo lejos la veo a mamá caminaba llorando desconsoladamente, en cuanto me vio me abrazo fuerte, sentía que me temblaban las piernas de los nervios.
Jungkook se levantó del asiento y se despidió con un beso en mi mejilla, tenía que irse a su casa para estudiar su examen de ingreso, mi madre estaba impresionada que se fuera, ni siquiera habían pasado dos minutos.
─¿Ya te vas? – pregunto ella, no sabía nada de su examen
─Tengo que estudiar señora Keila, lamento mucho lo de Tae−dijo Jungkook abrazando muy fuerte a mi mamá, Keila lloraba como si ya hubiera muerto.
─Me olvide de contarte mami pero Jungkook, se inscribió en la facultad de Chicago para estudiar la carrera de medicina−le comente a ella, me sentía orgullosa por tener un novio nerd.
Keila dejo de llorar y lo felicito a mi novio por sus logros, lo amaba tanto como si fuera su propio hijo, al principio ella era distante con él pero poco a poco empezó a confiar en Jungkook hasta el punto en que mis padres lo empezaron a considerar como un integrante más de la familia.
─Señora Keila fue un placer verla pero debo irme−menciono separándose de ella, mi madre era una mujer muy amorosa con Jungkook, lo adoraba tanto que cuando cumplió sus 19 años, fue ella quien organizo su fiesta de cumpleaños.
Ese día el padre de Jungkook estaba feliz porque no tenía el suficiente dinero para organizar su cumpleaños ya que desde su madre lo abandono y la vida de ellos cambio, se volvió aún más complicada. Siempre que estábamos juntos me contaba lo mucho que odiaba ver a su madre en los medios derrochando su dinero en Los Angeles con su nuevo marido que si no fuera por su pareja, ella no sería nada, mientras tanto él moría de hambre junto con su padre, apenas tenían una sola comida abundante durante el día .La enfermera luego de varias horas, salio a dar la cara, nosotras estabamos esperando el regreso de Tae, nos indicó que nos fuéramos a casa a descanzar porque la operacion demoraria mas de lo normal, ella misma seria quien nos llamaría si si había nuevas novedades.
Esa madrugada no pude descansar, seguía imaginándome su muerte, lo único que necesitaba seria conversar con alguien, agarre mi celular y le envié un mensaje a mi chico:
Yo: No puedo descansar, cierro los ojos y tengo pesadillas.Mira si nos llaman de la clínica comunicándonos que mi bebe está muerto. No quiero ver su cuerpito sin vida sería muy horrible.
Jungkook: No creo, ese gato muera es inmortal, como los vampiros. Deja de pensar en Tae y concéntrate en tus obligaciones…
Tenía razón, varias veces se había caído del árbol del vecino cuando era pequeño y nunca le pasó nada. Pero lo que jamás me gusto de él es que algunas veces me veía que estaba mal por algo y ni siquiera le importaba, parecía como si no fuera su novia que solo fuera una amiga, como todas sus amigas. En ese momento recorde a Sasha la amiga de Suga que siempre estaba cerca de mi novio, no la soportaba
Tifanny siempre sostenía que dejarlo sería lo mejor porque nuestra llama ya se había apagado pero me negaba a hacerlo porque a pesasr de todas las cosas que me hacia lo amaba. Al leer ese mensaje me negué a responderle por primera vez, me levante de mi cama para distanciarme de mi dispositivo y me fui a la cocina para ingerir una taza de té para mi relajacion. En el momento que ingrese al comedor estaban mis padres sentado en el comedor sollozando, todos estábamos doloridos.
Me senté al lado de ellos para hacerles compañía y mi padre expreso:
─Pobre Tae, era tan amoroso con nosotros− mamá le tomo la mano a su esposo
─Aún recuerdo cuando me rompió el jarrón de la bisabuela, ese pequeño era tan travieso−expresó ella sonriendo y nos reímos recordando aquel lindo recuerdo, desde que llego a nuestra casa, nuestra vida cambio y nos dio esa felicidad que aún no conocíamos, ya que mis padres jamás supieron lo que era tener una mascota era algo nuevo en la familia.
Mamá me conto que al leer la carta se emocionó tanto y la recordó a cuando ella era una niña pequeña y con su mejor amiga quien había sido nuestra vecina durante toda mi infancia, decidieron ir a en busca de un gatito para adoptar. Yo me entere de la verdad de Papá Noel al cumplir los diez años, fue Soobin quien se encargó de arruinar mi infancia, llore tanto esa tarde pero al menos ya no debía verlo más porque se mudó a Corea del Sur con su madre para seguir su sueño de Idol.
A mitad de la noche suena el teléfono y mamá se levanta de la mesa para contestarlo, nosotros observamos los gestos que hacía en un momento se puso a llorar y solo dijo "ok está bien". Corrí hacia la pieza y me puse a llorar más fuerte, seguro había muerto.
─Hija tenemos que ir a buscarlo a − habló mamá desde la planta baja, a mí no apetecía ir, no quería verlo. De todas formas debía ser valiente y fui a la clínica como la buena madre que era. Lo peor ya había comenzado. Papá fue a buscar el auto al estacionamiento y nos llevó hasta la veterinaria, ellos trabajaban las 24 horas.
El médico nos estaba esperando, estaba serio, solo esperaba que no fueran malas noticias, nos explicó que había masticado una turquita de un arito y tuvieron que abrirle el cuerpo .
─¡Hay dios mío Tae!−menciono Keila elevando la voz y volvió a llorar
─Tranquilas, no murió está recuperándose, la operación fue un éxito pero al ser mayor tuvimos complicaciones, ya que su cuerpo no aceptaba el Insufol −dijo el médico y me volvió el alma al cuerpo.
—¿Que es Insufol?—le pregunté al médico quería saber que tipo de medicamento le habían puesto