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En el Capítulo 3 de "The Inkioz", nos adentramos en el arco de Dedamme y su hermano menor, Dimmor, en un mundo realista lleno de cosas malas.  Los dos hijos de Izon y Ghaek quedaron en este mundo debido a las traicioneras acciones de sus padres.  Dedamme tenía una gran fe en el ser celestial Kick, creyendo que algún día rescataría a todas las personas del mundo realista.

Sin embargo, Dimmor odiaba a su hermano Dedamme, creyendo que poseía una fe que él mismo no tenía.  Un día, Kick les dijo a los dos hijos de Izon y Ghaek que tendrían que traer frutos de un árbol, el más hermoso de los cuales sería bendecido por él.  Decididos a demostrar su valía al ser creador, Dimmor produjo pocos frutos, mientras que Dedamme aportó muchos.

Kick eligió a Dedamme como el bendito, otorgándole muchos milagros.  Esto puso celoso a Dimmor, quien, movido por la envidia, cogió una piedra y golpeó a Dedamme en la cabeza, matándolo.  Dimmor luego intentó huir, pero Kick lo confrontó y le preguntó por qué estaba huyendo.  Dimmor se mostró reacio a decir la verdad, pero Kick ya sabía lo que había sucedido.  Sin embargo, Kick no sintió enojo ni odio, pues es un ser de amor, justicia y compasión.

Kick le aseguró a Dimmor que no le pasaría nada malo y le prometió que nadie lo tocaría para matarlo o hacerlo sufrir.  Sin embargo, impuso un severo castigo a Dimmor, enviándolo al País Zermbiry, donde viviría bajo la protección divina de Kick.