Capítulo 5 (final)

Andrew continuaba durmiendo en su cama. No se dio ni cuenta de la intromisión de Dylan en la misma para cogerle el móvil y avisar a Nerón y Rick, para que se reunieran con él en la biblioteca de la mansión. La respuesta fue inmediata y, con cuidado, borró la conversación del móvil del alfa.

Más tarde en el lugar acordado. 
Hora: 11:35pm

—Vamos, no tenemos todo el día y como Andrew nos pille... —avisó, nervioso, Nerón.

—No le pegaría ni a una hoja —le quitó importancia Dylan, encendiendo el micrófono.

Rick revisaba las noticias mensuales y, con un bolígrafo de color rojo, marcó la que más le llamó la atención.
Antes de encender el micrófono, cogió una silla y se colocó a la izquierda de Dylan, que estaba en el sillón marrón negroso de Andrew, cotilleando en el correo del mismo: Elián le había dejado un mensaje anunciando una noticia bastante curiosa -noticia que aún no puede ser revelada- y pidiéndole información para un caso de rescate: Dylan le envío lo que pidió y le felicitó.

—No deberías hacerte pasar por Andrew...

—Eres muy miedoso, Nerón, ¿de verdad piensas que no sabe que urgo en su oficina cuando no está?

Nerón guardó silencio.

Rick les recordó que tenían un asuntillo pendiente y enseguida comenzaron a grabar.

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Dylan, Nerón y Rick: ¡Buenos días, Manada Celeste y alrededores lejanos! ¿Cómo has amanecido?
 

(Risas)
 

Dylan: Como has podido notar, no soy Andrew y tampoco vengo solo. Si nunca has oído mi ronca voz, te haré saber que soy el hermano de Katherine, Dylan Benethan, y que me acompañan Nerón y Ricko, un veterano y un novato, de la casa más loca del condado. 
 

Rick: Y sí, hemos secuestrado el podcast.
 

Nerón: Bueno, más bien nos hemos hecho un hueco, esperamos que dure unas cuantas horas...
 

(Aplausos y silbidos: vítores)
 

Dylan: Cuéntanos Rick, ¿qué travesura haremos hoy?
 

Rick: ¿Qué tal si contestamos una cuentas preguntas del Insta de la manada antes de liarla a lo grande? (Desconoce la travesura y Dylan se dio cuenta, al ver titubear a su amigo. Nunca se negaba a volver loco a alguien de la manada.)
 

Dylan: ¡Dale caña!
 

(Nerón abre la cuenta y busca la historia con el cuestionario interactivo de respuesta abierta.)
 

Nerón: Bien, la primera pregunta la hace tu hermana Dylan: quiere saber quién de los cuatro duerme más.
 

Dylan: Supongo que se refiere a nosotros tres y al jefe, por tanto, la respuesta es: Andrew jajajaja. Hermanita, ya lo sabías.
 

(Recibe un SMS de ella diciéndole que no la delate delante de más de un millón de personas, junto a un sticker de Lisa Simpsons con un libro en la cabeza y escondiéndose con las manos.)
 

Nerón: La siguiente pregunta es para ti, Rick. 
 

(Ricko se señala a sí mismo, sorprendido, y Dylan asiente con la cabeza.)
 

Nerón: Uno de la manada de Londres, Fhoney, pregunta el motivo por el cual te uniste a nosotros.
 

Rick: (Se frota las manos nervioso.) Esa es una pregunta bastante personal, ya que cada cual tenemos nuestros motivos para tomar decisiones importantes, pero la voy a contestar. Me enteré de que los hombros lobos más cercanos hacían pruebas para nuevos miembros y tomé la decisión de intentar pasarlas. Cuando eso ocurrió yo tenía dos años menos que ahora y llevaba apenas dos meses convertido y no conocía nada de lo que me pasaba, pero recordaba el malestar físico y emocional tras la luna llena. 
 

Dylan: ¿Pensantes en ojear otras manadas?
 

Rick: Nop. Soy de un pueblo de aquí al lado, así que me pillaba bastante cerca sin contar el paso por el Bosque Arenoso. ¿Tenemos más preguntas?
 

(Dylan le quita el móvil a Nerón, asumiendo que Ricko quiere cambiar de tema. La tensión en sus hombros es palpable, se compadece de él. La información de admisión le pertenece a Andrew y, aunque permite que se conozcan y anden libremente por el territorio, no le gusta hacer pasar por malos momentos a sus betas, a los cuales considera como una familia gigante de peces sin dueño. Sin duda, el alfa valora el respeto y la libertad, al punto de ser los pilares principales de la Manada Celeste.)
 

Dylan: (Desliza la pantalla con dos dedos.) No tenemos más preguntas pero (una notificación le obliga a sacarse el móvil del bolsillo del culo) ¡tenemos un invitado sorpresa!
 

Rick y Nerón: ¡¿Ah, sí?!
 

(Se levanta del asiento del escritorio de Andrew y sale de la habitación unos cinco minutos, cuando vuelve lo hace con su portátil neón de color violeta -regalo de Samhain de su hermana pequeña como broma para que se comprara unos lentes de sol-, lo abrió y paró la música que los dos muchachos habían puesto estupefactos de los movimientos de Benethan.)
 

Dylan: Sí. Quiero presentaros al hombre del año, al más cotizado, al más buscado...
 

Desconocido: Jajaja. No creo ser mucho de eso pero sigue.
 

(Nerón y Rick babeaban al ver al invitado, no podían dejar de pensar en cómo y cuándo Dylan había estado en contacto con él, ya que no había cogido el móvil o su propio ordenador hasta ahora.)