¡Brújula Perdida!

Después de aquel incidente, los dos se incorporaron. Entonces Verónica le dijo lo siguiente:

-Para que veas que sí cumplo mi palabra, quiero que me des tu número de teléfono y cuenta de banco para que pueda depositar el dinero.

Entonces Érick le hizo una seña a su asistente Vicente para que hablara:

-Lo siento, no podré darte el número de mi jefe pero sí el mío ya que mi jefe es un poco reservado.

-Está bien entonces-dijo Verónica.

Los dos intercambiaron sus números y se fueron. Pero después de que ellos se fueran del lugar, Verónica vio que había algo en el suelo y lo recogió. Era algo parecido a una brújula antigua. Pero ya era muy tarde para que se lo devolviera, así que decidió que en otro momento lo haría.

Después de aquel incidente, Verónica en cuanto pudo se fue a hablar con los mejores médicos para saber de la situación. Después de informarse, ella escribió la suma de dinero que necesitaba más o menos para los tratamientos y medicación de su tía en el cheque que estaba en blanco: al rededor de 400.000 euros.

Fue al banco, y después de conseguir el dinero llamó a Vicente para informarle.

Pero Vicente ya sabía de la situación y ya había informado a su jefe sobre cuánto dinero había sacado. Entonces Érick dijo:

-Ella no podrá devolverme esta cantidad ni siquiera en tres vidas. Pero yo no soy hombre de negocios que pierda dinero, siempre gano y ahora no va a ser la excepción.

Después de eso, Érick se dio cuenta de que algo le faltaba, era la brújula que no estaba con él. Se puso a buscar como loco en toda la casa, pero no aparecía. Sus ojos empezaron a llenarse de lágrimas mientras estaba sentado en el suelo con la casa revuelta.

Pero,¿por qué Érick estaba así por una simple brújula antigua?