Capítulo 6: Revelaciones y Resquicios de Confianza
El sol brillaba a través de la cúpula de cristal del observatorio, bañando la habitación con una luz cálida que contrastaba con la fría atmósfera de trabajo que había tomado lugar entre Aleksa y Thorin. Ambos se habían sumergido en la tarea de estudiar el artefacto, cada uno utilizando sus respectivas habilidades para desentrañar los misterios que este contenía.
Aleksa movía las manos suavemente sobre el orbe, invocando hechizos de detección mágica mientras sus ojos se cerraban en concentración. Podía sentir las corrientes de energía mágica fluyendo a través del artefacto, como si este tuviera su propia voluntad, resistiéndose a ser comprendido. Al mismo tiempo, Thorin operaba una serie de dispositivos tecnománticos, escaneando el artefacto en busca de patrones y señales que revelaran su estructura interna.
—Hay algo extraño en la energía de este artefacto —dijo Aleksa, rompiendo el silencio—. No es solo magia. Es como si estuviera fusionada con otra fuerza… algo que no puedo identificar completamente.
Thorin, sin apartar la vista de la pantalla holográfica que había proyectado, asintió.
—Estoy viendo lo mismo desde el lado tecnológico. Las lecturas no son consistentes con ninguna forma de energía que conozcamos. Es como si estuviera diseñado para adaptarse y reaccionar a cualquier tipo de energía que encuentre, pero lo hace de una manera que no puedo explicar con ciencia sola.
Aleksa abrió los ojos y lo miró con una mezcla de preocupación y curiosidad.
—Eso significa que podría ser mucho más peligroso de lo que pensábamos. Si este artefacto puede amplificar cualquier tipo de energía, entonces podría ser usado para hacer algo catastrófico si cae en las manos equivocadas.
Thorin hizo una pausa, retirando sus manos de los controles y mirando directamente a Aleksa.
—Es exactamente lo que temo. Por eso es crucial que entendamos cómo funciona antes de que alguien más lo haga.
Aleksa asintió, su expresión grave. Estaba claro que estaban lidiando con algo mucho más complejo de lo que habían anticipado. Pero al mismo tiempo, la cooperación con Thorin estaba comenzando a desmoronar las barreras que ella había erigido entre ellos.
—He encontrado algunas inscripciones en la superficie del orbe —dijo, señalando una serie de runas que apenas eran visibles bajo la luz. Se acercó al artefacto, guiando a Thorin para que pudiera ver lo que ella había descubierto—. Estas runas son antiguas, incluso para los estándares arcanos. No reconozco todas, pero algunas parecen estar relacionadas con un antiguo sistema de encantamientos diseñado para contener energía pura.
Thorin observó las inscripciones, su mente trabajando rápidamente.
—Es posible que estas runas estén actuando como reguladores de energía, asegurándose de que el artefacto no se sobrecargue. Pero eso también significa que si se manipulan o se desactivan de alguna manera, podría desencadenar una liberación masiva de energía.
Aleksa frunció el ceño, considerando las implicaciones.
—Entonces, ¿cómo podemos asegurarnos de que no se desate accidentalmente? No podemos simplemente dejarlo sin vigilancia.
Thorin cruzó los brazos, reflexionando.
—Podemos intentar crear un sello temporal, uno que combine magia y tecnología para mantenerlo contenido mientras seguimos investigando. No será fácil, y probablemente necesitará un mantenimiento constante, pero es nuestra mejor opción por ahora.
Aleksa lo miró, sorprendida por su disposición a combinar ambas disciplinas. Era un enfoque inusual, y ciertamente no algo que la mayoría de los tecnomantes considerarían, pero mostraba que Thorin estaba dispuesto a ser flexible.—Estás sugiriendo que usemos ambos sistemas juntos… ¿De verdad crees que eso funcionará? —preguntó, con una mezcla de escepticismo y esperanza.
—Estás sugiriendo que usemos ambos sistemas juntos… ¿De verdad crees que eso funcionará? —preguntó, con una mezcla de escepticismo y esperanza.
Thorin esbozó una leve sonrisa, un gesto que ella no esperaba ver en él.
—No lo sé, pero vale la pena intentarlo. Es posible que esa sea la única manera de manejar algo tan complejo como este artefacto.
Aleksa lo observó detenidamente por un momento antes de asentir.
—De acuerdo. Hagámoslo.
Durante las siguientes horas, trabajaron en conjunto, fusionando sus conocimientos en un intento de crear un sello que mantuviera al artefacto bajo control. Aleksa invocó una barrera mágica alrededor del orbe, mientras Thorin programaba un dispositivo que generaría un campo de energía constante para estabilizar la barrera. Era un proceso tedioso, que requería precisión y coordinación, pero ambos estaban decididos a hacerlo funcionar.
Finalmente, cuando el último componente fue colocado y la barrera quedó establecida, Aleksa se dejó caer en una silla cercana, exhalando profundamente.
—No puedo creer que lo hayamos hecho —dijo, con una mezcla de cansancio y alivio.
Thorin, que estaba revisando las lecturas del dispositivo, asintió satisfecho.
—Es un trabajo temporal, pero debería mantenerlo seguro por ahora. Necesitaremos revisar el sello periódicamente para asegurarnos de que no se debilite.
Aleksa lo miró, sus ojos reflejando un agradecimiento que iba más allá de las palabras.
—Gracias, Thorin. No esperaba que pudiéramos lograr esto juntos, pero… creo que realmente estamos haciendo algo importante aquí.
Thorin se detuvo, sorprendido por su tono sincero, y se encontró a sí mismo devolviéndole una sonrisa que no había sentido en mucho tiempo.
—Estamos haciendo lo que es necesario para proteger a la ciudad. Eso es lo único que importa.
Por un momento, el peso de sus diferencias pareció desvanecerse, reemplazado por un entendimiento silencioso. A pesar de sus pasados, de las luchas y las sospechas, habían encontrado un terreno común, un objetivo que los unía más allá de las divisiones que los separaban.