La ciudad perdida de Babilonia

Investigación

Vamos a creer que la verdad es subjetiva a la realidad, así viviremos felices en la ignorancia.

 

      Diez años más tarde ya me había acostumbrado a la presencia de personas no vivas como las llamaba, a estas alturas ya entendía que eran reales pero invisibles para el mundo y solo yo los podía ver, aunque no entender. Los llamaba no vivos porque uno de ellos me logro explicar que los fantasmas son espíritus que no lograron morir en paz y caminan en busca de su venganza, y ellos simplemente eran espíritus que no tenían a donde ir. Para ellos no existía un cielo o un infierno.

         Como no lograba entender invente un medio para comunicarme con ellos o por lo menos para encontrar respuestas fáciles y yo misma iría creando un hilo de la historia contada. El primer espíritu con el cual logre conversar era un pescador que murió en el mar y no encontró el camino a casa, le pregunte porque no fue al cielo y me respondió que nadie lo fue a buscar. El segundo que entreviste era un doctor y me dijo que murió en un accidente de auto, seguía aquí porque no sabía a donde más ir. El tercero con el que pude hablar era un católico, que entre expresiones de llanto conto que se durmió y nunca más despertó.

         Ninguno me decía algo que me ayudara a saber porque yo era capaz de poder verlos, en ese momento el recuerdo de “mi yo niña·, aquel sueño en un paisaje regreso a mi mente como una ráfaga de frio que hela los huesos, por mi frente corrió un sudor inexplicable que logre controlar y olvidar.

 

Página del diario: Noviembre 18

         Las conversaciones del día de hoy no me dejaron nada de valor, incluso creo que me estoy aburriendo de solo escuchar lo que tienen que decir. Quisiera que alguien me explicara porque solo yo los puedo ver.

         Algo llamo mi atención y es que por un momento llego a mi mente aquel sueño de mi triste reflejo silencioso, sin embargo en este camino he aprendido que todo lo que sueño o veo no es una ilusión. Por mi frente corrió un sudor frio y por un segundo  me paralice. ¿Qué debo pensar? Sera que es ella la que me dará la respuestas. En dos semanas es —la espero poder asistir sin que ninguno de esos espíritus fastidie— la graduación de mi hermana.

 

         Al terminar de escribí cerré mi diario y como era costumbre deje que mi mente se perdiera en el paisaje mientras recordaba lugares que jamás había pisado pero que me parecían tan familiares. Cuando por mi espalda soplo una corriente de aire que jamás había sentido, cuando gire lo único que pude divisar fue una pequeña figura salir corriendo.

          — ¿Quién esta hay? —Mi pregunta paso desapercibida—  puedes confiar en mí, yo te puedo ver y hablar contigo —dije pero lo único que lograba era que el silencio se tornara incómodo. Corrí hacia la puerta para ver si podía divisar algo, fue cuando escuche.

          — ¿No me recuerdas? —su voz era suave y por segundo sentí miedo, un miedo que no recordaba haber vivido; mi cuerpo se paralizo mientras mi cerebro deducía de dónde provenía aquella voz.

         —No tengas miedo… solo quería volverte a ver ­—escuche la voz provenir desde el espejo y al gira solo me vi a mi misma pero con una sonrisa impuesta en el rostro, intente moverme pero mi reflejo no me seguía. Jamás había vivido algo igual, no sabía que significaba o porque después de tanto tiempo había aparecido. Pero lo que más me asustaba era ¿Por qué la puedo entender claramente?

         — ¿Quién eres? —volví a preguntar en tono acusador.

          — ¡Soy tú! —respondió con mi misma sonrisa.

         —Pero yo no estoy muerta, y tú pareces un espíritu —le replique con voz temblorosa

         —Existen diferentes clases de espíritus, y yo no estoy muerta —respondió con una voz ms grave que la anterior. En su rostro se aplaco una sombra negra que se fue expandiendo por todo el espejo.

         Mi corazón latía más rápido de lo normal y el miedo me inundaba, no soportaba más todo el suspenso que eso provocaba en mí.

         ¿Qué haces aquí? —la voz era de mi madre, que con su mano toco mi hombro, al gira lo único que puede hacer fue abrazarla, su voz me aterrizo de esa pesadilla que no duro más de diez minutos.

 

Página del diario: Noviembre 20

         Después del incidente en el espejo no escuche más su voz, me pone nerviosa solo de pensar en eso. Intente preguntarle a los no muertos si sabían algo al respecto pero ninguno me supo contestar, cuando estaba a punto de rendirme en un parque a unas cuadras de mi casa se me apareció un fantasma que me dijo que era el guardián de un faro, como era normal le pregunte como había muerto pero no me quiso decir.

         Cuando estaba por irme me dijo— tus propios demonios te destruirán si no los controlan —su voz me recordó a mi reflejo y me impacto que lo pudiera entender sin códigos o señales como al inicio de la conversación.

         Como era normal en los fantasmas desapareció y me dejo hablando sola, pero sus palabras me dejaron una gran curiosidad así que pienso asistir más a la biblioteca de la ciudad para investigar.



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En el texto hay: demonios, amor, infierno

Editado: 03.06.2020

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