CAPITULO XIV
LA GRADUACION
EL MAL TRIUNFA SOBRE EL BIEN…
_Quien lo hubiera dicho… dije a media voz sin importarme que alguien de la casa pudiera escucharme. Quien diría que luego de todo lo que había leído de mis recuerdos y de la charla con mi hermano en mi cabeza solo repetía las frases “no lo lograras” “toma el camino de regreso” por más que quiera mover esta montaña siempre estará en mi camino a donde quiera que vaya, así que tendré que escalarla, son las montañas más imposibles de escalar.
Las oraciones que leía hicieron florecer mucho dolor y por más que quiera ser fuerte y mover la montaña que tenía al frente, sabía que no iba a ser lo mejor, sabía que lo que me esperaba detrás no era un buen paisaje, pero que importa ¿verdad? Eso ya no importa, estoy a punto de enfrentar la realidad del pasado que intente mil veces dejar atrás, pero se empecinaba a regresar.
Una vez escuche que si no arriesgamos todo lo que tenemos a nuestro alcance entonces para que arriesgarse. Así que tome valor y retome la lectura… cada página me haría más fuerte y al terminar de leer este diario sabré que lo mejor está por venir, así, aunque mi venida haya sido en vano cerrare una etapa, una herida que debía dejar de sangrar.
Todo resultaba difícil de comprender… hoy me había despertado rara, tenía un presentimiento como que no era un buen momento para salir, por lo que preferí quedarme en la cama un momento más.
Mire unas quince veces el reloj, no podía quedarme quieta más allá de todos los presentimientos que pudiera llegar a tener. Anghelo merodeaba por el pasillo de nuestra casa, también intrigado porque todavía no me levantaba, a esa hora del día yo ya hubiera hecho un montón de cosas,
No me aguante… _ ¿qué sucede? porque no entras de una vez. Le grite a mi hermano.
_que te pasa? Pregunto asomando su cabeza a mi habitación. _Me intriga saber porque no te has levantado aún.
_no sé qué me sucede… pero, desde ayer que siento que algo no está bien, que algo va a pasar y hoy más que nunca no quisiera salir de este cuarto
_que… pasa algo entre vos y Caleb? ¿Tienes miedo por la beca?
_ nada de eso, todo lo contrario, estoy segura que la voy a conseguir y con Caleb esta todo más que bien. Le dije enderezándome en la cama.
_quizás es porque luego de mucho tiempo las cosas se han ido acomodando y lo que siempre parece alterar tu vida hoy solo es paz y armonía. Y no estas acostumbrada a eso.
_ puede ser, o tal vez podrías estar todo el día enumerando lo que podría llegar a ser pero ni yo lo sé.
_entonces no te levantes… contesto acariciando mis piernas. Anghelo muchas veces podía llegar a confundir a cualquiera, en especial a mí, pero nunca olvidare lo cariñoso y comprensivo que resultaba ser a veces.
Camino hasta la puerta de mi cuarto volteo a mirarme desde la puerta y me dijo _ tengo que aprovechar este poco tiempo que nos queda juntos así sea un mes o una semana voy a extrañarte, me cuesta decirlo pero… voy a sentirme muy solo cuando te vallas. Termino de decirlo y se marchó sin darme tiempo a contestarle nada, en ese momento miles de dudas sobre mi partida me llenaban la cabeza, que haría allá con Caleb, si muchas cosas, pero… y si lo hecho a perder ¡y si meto la pata! Mientras pensaba me tape la cabeza con mi almohada y trate de seguir durmiendo, cuando una vos dulce interrumpió mi sueño forzado
_ya deja de huir…levántate! Al quitar la almohada de mi rostro note una silueta que corría las cortinas de mi ventana dejando entrar la luz al cuarto.
_que pasa dije desperezándome al reconocer la voz de Lena.
_es hora de levantarse el día no será muy lindo, pero, no es forma de esconder la cabeza en un hueco.
_mmm…mira quien habla. Dije atacando su comentario. _me lo dices en broma verdad?
_no…porque tendría que ser una broma. Dijo ella casi riendo
_no se tengo un miedo de salir por la puerta, como si lo que me espera afuera cambiaría por completo mi vida. Me dirigí lento a la ventana observé detalladamente lo que sucedía afuera como si nada estuviera por pasar, como si el mundo estuviera más que tranquilo, aparentaba ser un hermoso día _ ¿qué es lo que te trajo a casa hoy? Pregunte a Lena tratando de despejar mi cabeza.
_estoy confundida. Dijo agachando la cabeza
_con respecto a qué?
_hace tiempo que estoy sola, deprimida y según mi psiquiatra me aconsejo a que trate de seguir con mi vida, que salga que consiga una cita.
_sí!!! Es lo que he tratado de decirte. El propio Facundo no quería que estuvieras así.
_si, ya lo sé, pero no te imaginas lo difícil que me resulta levantarme por las mañanas, mi vida no es lo mismo sin él, está vacía, yo estoy vacía. No tengo nada que ofrecer.
_y si sientes eso, no es mejor que trates de llenarla con personas que te amen, que quieran tu bien.
Suspiro _ al oírte pareciera que todo es fácil…pero juro que te escucho y entiendo lo que todos tratan de decirme, simplemente ya no encuentro una razón para vivir.
Mire a mi amiga, me acerque a ella y la abrace, sabía perfectamente lo que sentía. Y sabía que dijera lo que dijera no serviría de nada si ella no estaba dispuesta a salir de esta situación. Se lo que es perder a alguien a quien amas, se perfectamente lo que es no querer despertar por las mañanas porque sabes que esa persona ya no es tu persona y por más que lo pidas no regresara.
_ sientes eso porque lo amabas, por ese motivo no es que tengas que olvidarlo, solo tienes que guardar su recuerdo como algo hermoso… pienso que la persona que quiera estar con vos y sepa de tu historia, va amarte más sabiendo que eres capaz de amar de tal manera. No tienes que enamorarte ya, ahora. Pero no te cierres, no nos alejes. No alejes a las personas de ti, porque así no sabrás nunca cuál de ellas es la indicada.
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Editado: 11.06.2020