A través de la introspección y la reflexión sobre la naturaleza humana, es cuestionable la necesidad imperiosa de las mentiras y las ilusiones que tejemos en nuestras vidas para escapar de la cruda realidad.
Las relaciones basadas en la desconfianza y la falsedad, explorando cómo el miedo puede impulsarnos a buscar refugio en las ficciones que creamos para protegernos.
Yo noce ocultar mi esencia soy tan real...
“No me den fórmulas ciertas... porque no espero acertar siempre. No me muestren lo que esperan de mí... porque voy a seguir a mi corazón. No me hagan ser lo que no soy... no me inviten a ser igual... porque soy diferente. No sé amar por la mitad... no sé vivir de mentira.
No me encierren en sus esquemas... no me limiten con sus prejuicios. No me juzguen sin conocer mi historia... no me definan con etiquetas. No me apaguen la luz que me habita... no me corten las alas de la libertad. No controlen mis sueños... no aprisionen mis ilusiones.
No me anclen al pasado... no me limiten el futuro. Porque yo soy más que sus expectativas, más que sus limitaciones, más que sus definiciones. Soy la esencia de mis propias decisiones, la fuerza de mi autenticidad, el poder de mi libertad. Y así, en cada latido de mi vida, seguiré siendo yo, sin más, sin menos, simplemente, yo.
"El sexo es una cosa, el amor es otra. En uno disfrutas y respiras fuerte, en el otro suspiras y sonríes. El lío es cuando tienes ambos en la misma persona, que luego disfrutas, respiras fuerte, suspiras, sonríes, y ya no quieres parar.
Te sumerges en un remolino de emociones donde cada suspiro es una caricia del alma y cada sonrisa es un baile de corazones entrelazados. Es la magia de sentir la pasión y la conexión en un mismo ser, una sinfonía de sensaciones que solo el amor y la intimidad verdadera pueden crear.
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Editado: 13.08.2024