Iziaslav y Janos iban camino al comedor cuando Patrick se presentó ante ellos.
Aquello le bastó a Iziaslav para prescindir de toda delicadeza, y siendo que Patrick no tenía intenciones de ocultar nada, no opuso ninguna resistencia.
Le pareciese conveniente o no, dadas las circunstancias, Patrick Bride era lo bastante inteligente como para saber que ni le correspondía poner objeciones ni conseguiría nada con ello, de modo que se pusieron en marcha de inmediato.
Mientras Dylan había estado discutiendo con los demás, Jacques había recuperado el conocimiento, y a pesar del lamentable estado en el que se encontraba, prestó atención y entendió enseguida lo que sucedía. Después del episodio con la desdichada condesa, Phillipe y él se habían dedicado durante algún tiempo a investigar junto con Madeleine en los libros y viejos pergaminos de Sarah, hasta que habían dado con lo que se habría podido tomar como una vieja leyenda, y de hecho Phillipe hasta ese momento había pensado que así era, porque hacía parte de las historias que su abuela le había contado de niño. Si hubiesen sido Jacques o Madeleine quienes hubiesen encontrado el escrito, tal vez no lo habrían entendido, ya que estaba redactado mitad en forma de gráficos y mitad en lenguaje metafórico, pero para buena fortuna de todos, quien lo había hecho había sido Phillipe y se encargó de ponerlo en palabras sencillas y de fácil comprensión, pero eso no lo hizo menos aterrador.
Según lo que les había explicado, existían en el mundo unas criaturas que habían sido malditas por la naturaleza, y aparte de todos los detalles que les proporcionó acerca de las características de las mismas, les informó también que una mujer llamada Seren, y que era la que había dado origen a su estirpe, había agregado otra maldición sobre aquellas criaturas que consistía en que toda mujer por cuyas venas corriese su sangre, serían las únicas capaces de identificarlos y las únicas humanas con el poder suficiente para exterminarlos. También había una explicación gráfica de la muerte de ésos seres y que se correspondía plenamente con lo que habían visto le sucedió a la condesa. Sin embargo, había unas partes que ni Phillipe logró descifrar, y aunque Jacques y Madeleine lo habían intentado durante mucho tiempo, finalmente habían llegado a la conclusión de que faltaba una parte del escrito, pero por mucho que habían buscado no la habían hallado. De modo que al escuchar hablar a Dylan y a sus amigos, Jacques entendió la mayor parte de lo que decían y dedujo lo demás.
Dylan, Iyul y Lucien se agacharon enseguida mientras Edin y los Lovets vigilaban que los que estaban atacando no pudiesen acercárseles.
Uno de los Lovets que escuchaba recibió una orden perentoria de Edin y desapareció mientras Jacques seguía hablando.
Mientras Jacques hablaba, tanto Iyul como Lucien habían saqueado sus pensamientos y sabían todo lo que había que saber. Pero la pérdida de sangre por una herida causada en la yugular o en la femoral, era violentamente rápida, de modo que a Jacques ya comenzaba a nublársele el sentido y era posible que no hubiese comprendido e insistió.
Lucien e Iyul se miraron preguntándose cómo y por qué había sucedido todo aquello, aunque el por qué posiblemente obedeciese a lo que había dicho Jacques antes en relación a que Madeleine había reconocido a un Devrig la noche pasada.
Pero no alcanzó a completar la frase, porque en ese momento percibieron el último latido de su corazón. Ninguno de los tres se había percatado de la llegada de Iziaslav ni de la furiosa batalla que tenía lugar en los jardines. Sin embargo, una vez que Jacques dejó de respirar, todo el horror de la situación pareció caer a plomo sobre Dylan, mientras que Iyul y Lucien fueron conscientes de nuevo de lo que sucedía en su entorno, y aunque posiblemente no estuviesen experimentando el mismo dolor que Dylan, ya que aquella muerte significaba cosas diferentes para él, sin duda si compartían la misma ira. De modo que en cuanto Dylan le cerró los ojos a Jacques, los tres se levantaron y se metieron de lleno en la pelea.
Iziaslav tuvo la intención de detenerlos, pero sabía que tenían que darle salida a lo que estaban sintiendo, de modo que no se interpuso y por el contrario decidió ayudar a acabar con los causantes de aquel desastre.
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Editado: 20.08.2021