Capítulo 22

Amelia: entiendo que lo que sientes por mi es amor. Además, me gusta que te expreses de esa manera delante de mí, porque los sentimientos se tienen que decir.

Michael: por eso ahora te los digo, ya que necesito hacerlo. Solamente que el amor también se puede expresar con hermosas palabras y quiero que tu amor sea para mí.

Amelia: como siempre no puedes dejar de ser posesivo conmigo ninguna vez. Nada más que no creo que puedas dejar de hacerlo y no puedo olvidar que esa es tu verdadera personalidad.

Michael: sabes que yo no tengo la culpa de ser así. Pero si no hubiera caballeros que intenten separarme de ti, me imagino que mi personalidad fuera diferente.

Amelia: no puedo creer que me estés culpando de eso y tampoco tengo la culpa de que seas celoso conmigo. Ahora que entramos a nuestra casa necesitamos irnos directamente a nuestra recámara.

El no suelta la mano de su esposa hasta que al fin llegan a su recámara. Amelia toma su bata para ir al baño a cambiarse y sale hasta que termina de hacerlo y ella al ver que se estaba cambiando se acuesta en su cama.

Michael: después de lo que paso entre nosotros sientes vergüenza de verme cuando me cambio. Solamente que no deberías sentir ninguna vergüenza delante de mí.

Amelia: por supuesto que la sentiré, ya que tu eres perfecto. Nada más que no quiero hablar contigo y sobre todo debemos de estar dormidos.

Michael: sabes que no vamos a dormirnos. Porque todas las noches siempre necesitare estar con mi esposa y tu sabes perfectamente la manera y acaso quieres que te la recuerde.

Amelia: no será necesario que lo digas. Ahora me gustaría quedarme dormida entre tus brazos y mañana seré de nuevo tu mujer, pero no creo que no puedas esperar solo un día.

Michael: algo que siempre he podido es esperar, así que lo hare por esta noche. Además, entiendo que te sientas cansada con la visita que le hicimos a tus padres.

Amelia: entonces dormiremos y mis padres no tuvieron otra opción que aceptar nuestro matrimonio. Eso significa que hicimos lo correcto al ir a visitar a mi familia.

Michael: si ellos no venían nosotros teníamos que ir a verlos. Necesito decirte que te vez demasiado bonita cuando me miras, mi Amelia.

El se acuesta al lado de su esposa y cuando lo hace la acerca a el para que se pudiera dormir entre sus brazos. Amelia suspira al estar de esa manera con él.

Amelia: todavía siento demasiado extraño que me ames. Porque mi destino siempre había sido quedarme solterona, ya que nadie podía amarme por mi apariencia.

Michael: es que nunca te ibas a quedar soltera. Sabias perfectamente que serias mía desde el primer momento en que nos comprometieron y ahora que eres completamente mía nadie podrá separarme de ti.

Amelia: se que te encanta decir eso. Pero siempre lo dices para que yo te pueda escuchar y nunca puedes dejar de decir lo que estas pensando, así que me acostumbre a tus cambios de personalidad y quiero que conmigo seas realmente el caballero del que me enamore.

Michael: mi personalidad es demasiado extraña. Además, siempre he sido el mismo del que te enamoraste y sobre todo yo también me enamore de ti.

Amelia: nos enamoramos y seguramente eso se debe a la convivencia. Porque nuestros padres nos hacían convivir y para que nos enamoráramos no era necesario hacer eso.

Michael: pienso lo mismo, ya que el amor para mi nunca tuvo ningún significado importante para mí. Pero cuando descubrí que era a ti a la que amaba mi mundo cambio por completo.

Ella empieza a cerrar sus ojos para después quedarse dormida y Michael también hace lo mismo, nada más que el estaba seguro de que su amor sería para siempre.