Ibelin se sintió agradecida de que Henry no pregunto nada al respecto aun incluso estando frente al jardín de su casa
-Gracias por traerme a casa –Ibelin agradeció, que a pesar de tener una sonrisa en su rostro sus ojos lucían melancólicos
-No sé qué sucedió –levanto su mano para acariciar suavemente su cabeza –pero espero que después de un tiempo te encuentres mejor –esa fueron sus últimas palabras antes de abandonar el lugar Ibelin solo se quedó inmóvil, estuvo así antes de entrar a su casa.
-Llegaste Ibelin –saludo su madre con una voz amable, pero se sorprendió al momento de que sus ojos se enfocaran en su rostro, los ojos de Ibelin estaban rojos debido a que anteriormente rompió en llanto en los brazos de Henry.
-¿Estas bien?, ¿Qué sucedió con Verónica? –pregunto con voz preocupada, agacho la mirada
-Solo discutimos –respondió Ibelin de manera cortante, para después irse directo a su habitación, al llegar no hizo más que acostarse sobre la cama, a pesar de que el ataque de nervios no vino esta vez, aun así los recuerdos del pasado le venían en la mente, esos recuerdos eran repulsivos y le generaban asco
El sol se empezó a mostrar en el cielo, era un nuevo día Ibelin se despertó con ojos rojos rastros de la noche anterior, de repente se escuchó un ruido sordo.
-Es hora de levantarse –era su madre, quien azotó la puerta de su habitación.
-Mamá estoy de vacaciones –ella volvió a meterse entre las sabanas.
-Vamos, baja a desayunar –jalo sus sabanas para que ella pudiera levantarse ellas estuvieron un tiempo jalando las sabanas hubieran seguido por más tiempo sino fuera por su madre que su paciencia se agotó y termino pegándole, al último se fue al comedor toda desaliñada.
-Jajaja te ves horrible –dijo su hermano Félix entre carcajadas.
-Cállate –piso fuertemente su pie al punto que su hermano dejo de burlarse de su aspecto que tenía en ese momento, al igual que su madre los regaño por hacer escándalo en la mesa por la mañana.
***
-Mamá voy a salir un momento –ella ya se estaba preparando para salir, su madre quien la escucho solo se dedicó a observar cada movimiento de ella.
-¿No me lo dirás, acerca de lo que sucedió? –pregunto su madre con ojos intrigantes junto con una voz fría pero acompañada de una ligera preocupación en ella, Ibelin ya se encontraba en la puerta así que volteo su cabeza para poder mirarla y contestar.
-Tranquila, no causare problemas –sin decir otra palabra salió de casa, los ojos de su madre le recordaron al día que la conoció por primera vez, cuando ese hombre la trajo por primera vez a esa casa, al principio esa mujer la miro con frialdad pensó que se trataba de alguna infidelidad por parte de él fue cuando sus ojos se suavizaron, cuando llego ahí ella estaba tan delgada por la falta de comida.
Al último llego a un lugar era un jardín necesitaba despejarse un momento, liberarse de sus pensamientos del pasado y lo que sucedió con Verónica aparte tenía que pensar en la letra de la canción que le prometió a Oliver escribir, estuvo sentada por mucho tiempo hasta que por fin decidió sobre que escribir, se levantó de donde estaba y fue directo a su casa para escribir la letra de la canción, se encerró en su habitación, en su cesto de basura estaba lleno debido al papel que tiraba sobre él, al terminar y con la letra ya lista decidió enviarle un mensaje a Oliver
Es una suerte de que Verónica me diera su número antes de discutir.
Tanto como Ibelin y Oliver quedaron de verse mañana para hacer algunas modificaciones si eso es lo quería Oliver.
Editado: 17.10.2022