La gemela de James Sirius

7. Quidditch

|ALBUS|

 

Curso 2021.

Dos pisotones y un aplauso seguidos de un breve silencio para volver a comenzar el procedimiento en un círculo interminable.

En el campo de quidditch se percibía la energía de los fanáticos del deporte desde las gradas reproduciendo el mismo sonido una y otra vez.

Pum pum ¡pam!

El eco se escuchaba hasta lo más alto que los jugadores en sus escobas llegaban y una joven se detuvo para contemplar desde el medio del campo la euforia que el juego transmitía y escuchar el ritmo que los leones emitían. Idea de un hijo de muggles, seguro. Su sonrisa fue aumentando conforme su apellido se unía a los pisotones y aplausos

>>¡Potter! ¡Potter! ¡Potter!<<

Albus pudo contemplar desde las gradas a su hermana en el aire observando todo en su campo de visión con una sonrisa ladeada y orgullosa. James llegó a su lado montando también su escoba para contemplarlos de la misma manera que ella, ambos hermanos se dieron una corta mirada con la misma sonrisa adornando su rostro y después de un guiño entre ellos, tomaron direcciones contrarias de vuelo con James cayendo en picado sugiriendo haber visto la snitch mientras ella voló unos cuantos metros abajo y volvió a subir magistralmente atrapando la quaffle en el aire para después seguir su camino a una velocidad increíble que hasta una bludger se quedaba tonta en su intento de tirarla de la escoba.

Una anotación por su parte causó gritos de euforia y a ella alzando el brazo con victoria mostrando una sonrisa altanera de ganadora con sus blancos dientes a la vista y sus ojos llenos de vida.

>><<

Entrando a tercero, Albus ya tenía muy claro que su amigo Scorpius tenía una especie de alucinación con su hermana mayor, cosa que le incomodaba terriblemente y cada vez le entraban más ganas de golpearlo en la nariz. De repente, cuando Jane se acercaba, su amigo rubio ya no mostraba el tono rojizo en su pálida piel que siempre ponía cada vez que ella le hablaba. Albus no lo supo en su momento, pero la razón era porque ahora su amigo estaba enamorado de su prima.

Ese mismo año, Albus y Scorpius se enteraron que el equipo de quidditch de Gryffindor tenía dos capitanes a elección de toda la casa y no fue una sorpresa cuando supieron que se trataba de los gemelos Potter, pues ellos era los mejores jugadores de esa generación.

Durante las vacaciones de verano antes de entrar a clase, ellos habían decidido que querían entrar al equipo de quidditch de su casa, no se les daba mal volar, pero si querían entrar habrían de tener un entrenamiento muy duro. 

—Tenemos que pedirle a tu hermana que nos entrene.

—¿Estás loco? —le dijo con una expresión de duda en su rostro— son de una casa rival, no nos ayudará.

—Es tu hermana y yo la conozco mejor —respondió Scorpius en tono burlesco— solo digámosle que ella es mejor jugadora que James y enseguida dirá que si,

Albus negaba con la cabeza, sabía que Jane no se negaría a ayudarlos, pero si James se enterara tanto Albus como su amigo saldrían mal parados; a ella no le haría nada, lo sabía de sobra, aunque nunca tuvo claro si era porque la quería demasiado o le temía de la misma manera. Tal vez ambas. 

Una tarde de la segunda semana después de entrar a Hogwarts por tercera vez, ambos le habían dicho a Jane lo que pretendían e intentaron alimentar su ego un poco para que cediera más rápido. Ella les miraba con los ojos entrecerrados.

—¿Pretenden que yo —acentuó la última palabra— capitana del equipo de Gryffindor los entrene a ustedes novatos a entrar al equipo de mi casa rival? 

Les llevaba casi cabeza y media en ese entonces, había crecido mucho el año que cursaba quinto y eso le daba un aire amenazador. Albus tenía muy en cuenta que la belleza de su hermana era igual de temible como admirable, en eso era igual a su madre. En ese momento, Albus pensó que había sido una mala idea, pero Scorpius no quería darse por vencido.

—Si —contestó simplemente y Albus se sorprendió de la seguridad con la que intercambiaba palabras.

Pero Jane no dijo nada, había adoptado una pose aún con los ojos entrecerrados como si estuviera analizándolos individualmente y con las manos en la cintura, Albus se sintió como si en algún momento saldría regañado. Para cuando la respiración de Scorpius comenzó a ponerse irregular, Jane se incorporó de nuevo y en su expresión natural por fin habló.

—Media noche —dijo sin más— los quiero puntuales, un minuto más y no los ayudaré. No me hago responsable de los castigos que puedan tener si alguien los atrapa, ¿claro?

Ambos amigos asintieron rápidamente con la cabeza, intercambiaron la mirada con una sonrisa de satisfacción y después de recuperar su rostro relajado de siempre, Jane le revolvió el cabello y se fue a alguna parte del castillo a hacer de las suyas.

Esa noche juntos esperaron a que su compañero de habitación estuviera completamente dormido y que la sala Común estuviera vacía, se metieron bajo la capa de invisibilidad y se dirigieron a su primer entrenamiento. Cuando llegaron no había señales de su hermana, había pasado por su cabeza que les había jugado una broma y en realidad estaba ella junto a todo su equipo esperando a que aparezcan para burlarse de ellos, pero negó la cabeza, Jane no era así, las bromas de ese tipo eran mayormente por parte de James.



#6362 en Fanfic

En el texto hay: harry potter, tercera generacion, hogwarts

Editado: 11.05.2020

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