La gran y poderosa Trixie en el exordio bajo las pirámides

La pesadilla de Trixie

Habían pasado más de diez minutos desde que Starlight se fuera del remolque de Trixie, dejando atrás a su amiga profundamente dormida y bien acomodada en su cama... o eso era lo que había creído.

Repentinamente, Trixie, que hasta ese momento se había encontrado en un aparente sueño profundo producto del cansancio y la dulce sidra, se levantó. Ágil como un conejo, se quitó las sábanas de encima y arrojó su peluche a un lado. Sin perder un segundo, revisó por la mirilla de la puerta en medio de un apremiante sentimiento de inseguridad.

No había nadie afuera. Starlight se había marchado sin problemas a su casa. Era seguro.

"Ahhh hu" Trixie gimió agotada, derrumbándose pesadamente en la puerta y haciendo crujir todo el remolque.

No se sentía bien.

Trixie había llegado unos días atrás de su viaje de Babiloponi. Desde entonces, no se había enterado mucho de la crisis ocurrida unas semanas antes en la escuela. No fue hasta esa misma noche, durante la fiesta, que pudo enterarse completamente sobre el gran desastre ocurrido en Ponyville y alrededores durante su ausencia.

Terror y caos. Enjambres de Orquídeas Pulpo devoradores de cerebros reptando libres por los jardines y calles del pueblo. Ciudadanos ponis bajo el control mental de los cefalópodos, alumnos acorralados en la escuela, destrucción de edificios, cosechas quemadas, intervención directa de una princesa...

Era demasiado. Trixie solo atino a beber sidra y asentir a todo lo que los otros profesores y amigos le decían. La crisis había sido contenida a duras penas con el esfuerzo de los Young Six dirigidos por Starlight y concluida con la intervención muy oportuna de la princesa Candace, que se encontraba de visita en la escuela de la amistad durante aquellos oscuros días.

Al final no hubo pérdidas irreparables que lamentar, a parte de los daños materiales y los ponis traumatizados.

La investigación aún estaba en curso, y como siempre, el Bosque Everfree era el principal sospechoso del origen de la plaga. Aun así, había muchas incógnitas en el aire, todas acompañadas de rumores...

("Días antes, dijeron que habían visto a esos monstruos merodeando por el pantano.")

("¡Cielos... yo escuché que el biohuerto de la escuela estaba lleno de esas pestes! ¡Qué horror!")

("Algún extranjero debió haberlos traído, esas criaturas no son de por aquí.")

Dejando atrás la agotadora fachada de ingenuidad que había mantenido durante la fiesta y hasta hace poco, Trixie se hundió más en el suelo del remolque. Ella, desgraciadamente, conocía demasiado bien la verdad de lo sucedido.

"Starlight, lo siento... realmente lo siento... ¡la culpa la tienen esos embusteros camellos vendedores de grasa de Eucalipto!" exclamó Trixie entre arrepentida y furiosa. Ahí en lo mas bajo de su orgullo, se cubrió la cara con sus cascos imaginando la decepcionada mirada de su amiga si estuviera allí presente y la escuchara.

Varios meses atrás...

(Trixie se encontraba paseando alegre a las afueras de Ponyville cuando accidentalmente se encontró con una feria de herramientas y objetos increíbles para espectáculos. Dirigida por un elocuente grupo de camellos, la inocente Trixie quedó fascinada por sus exóticos productos. Confiando en las nobles palabras de los vendedores, gastó una buena parte de su fortuna ahorrada como consejera estudiantil en comprar tales accesorios que, sin duda, harían más grandes e increíbles sus propios espectáculos circenses. Segura de sus acciones y con la bendición de los dueños de la feria, Trixie se marchó con una gran sonrisa, imaginando lo felices que haría a sus amigos cuando compartiera con ellos sus nuevas maravillas.)

Sí, esta era la explicación imaginaria que Trixie se repetía a sí misma y diría a cualquier otro que descubriera la verdad. Por supuesto, nunca mencionaría que ella se encontraba en esa feria a medianoche. Tampoco mencionaría que la supuesta feria ocurría cada luna en una cueva oscura y desconocida dentro del Bosque Everfree. Ni mucho menos diría que no era la primera vez que hacía negocios con aquellos camellos de aspecto tan sospechoso.

Trixie solo había sido víctima de un vil engaño. Eso era todo.

Entre los muchos productos clandestinos que había adquirido, se encontraba uno bastante inusual: un racimo de semillas de Rosa Pulpo.

El Rosa Pulpo es una criatura exótica que vive en los remotos bosques tropicales muy al sur de Equestria. Más que una mascota bella y singular, son criaturas sumamente sensibles y frágiles con una dieta muy específica, lo que los hace sumamente costosos de criar en cautiverio. Sin embargo, una inversión semejante de recursos bien podría ser compensada por los enormes ingresos que se podrían obtener de estas criaturas. La tinta blanca del Rosa pulpo es una de las más costosas y buscadas en el mercado. Con múltiples usos tanto científicos como mágicos, cualquier producto que tenga algún insumo derivado de esta tinta multiplicaría su precio hasta por diez veces su valor original. Podría decirse que tener un nido de Rosa pulpo era semejante a tener una mina de oro viviente.

Siendo así, Trixie no había comprado los Rosa Pulpo por mera avaricia. Estas criaturas también eran conocidas por producir una resina muy especial que, si se usaba en fuegos artificiales, podía aumentar su durabilidad y luminosidad e incluso hacerlos susceptibles a encantamientos.

Pensando en las infinitas posibilidades, Trixie no había dudado en adquirirlos a pesar de su exorbitante precio. Esa misma noche, los sembró en secreto en el biohuerto de la Escuela de la Amistad, siendo este el único lugar donde podría mantener a estas criaturas en buenas condiciones. A escondidas, las cuidó y alimentó con la esperanza de que Starlight la perdonara una vez que maduraran y compartiera con ella las ganancias.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.