Después de hablar por video llamado con mi mama mi tía mariana y alexia, me empiezo arreglar para verme con maxi en una hora, que me viene a buscar
Después de estar lista llega un mensaje diciendo que está abajo
Adriana: hola Maximiliano
Maximiliano: cuando vas a empezar a llamarme maxi
Adriana: pues maxi para donde vamos
Maximiliano: lo dices ahora coqueta pero nada más mira, pues vamos a volver a ir a mi casa
Me abre la puerta del carro y maneja en dirección a su casa cuando llegamos me bajo y caminamos de nuevo a la zona de entrenamiento
Adriana: que hacemos aquí
Maximiliano: pues vamos a volver apostar
Adriana: qué clase de apuesta
Maximiliano me enseña un arma y me dice el que
Maximiliano: si disparas esta arma y le das a todas las botellas te llevo a cenar, pero si después de tres disparos no le das a ninguna tú serás mi cena
Estiro la mano para que me dé el arma y empiezo a dispara tumbo las primeras 5 pero cuando voy a volver a disparar veo a Maximiliano examinar mi trasero ya que llevaba una falda suelta con botas largas y mi cachetero era de encaje, cuando disparo fallo la primera lanzo la segunda y fallo empiezo a examinar mi próximo tiro pero igual lo fallo
Maximiliano: ibas muy bien pero fallaste al final necesitas concentración
Se me acerca peligrosamente y me da una nalgada
Adriana: porque me pegas
Maximiliano: dije que ibas hacer mi cena
Adriana: y ahora eres loco y le pegas a la cena
Maximiliano: si no tuvieras un trasero tan bien formado no te pegara pero es lo primero que me provoca cuando veo tus nalgas
Adriana: pues que bueno escuchar que mi trasero provoca a alguien, a quien más podría provocar
Lo peor que pude hacer fue decir eso porque Maximiliano se enojo
Maximiliano: escúchame bien Adriana tu eres mía solo mía
Adriana: maxi no te moleste
Me le acerco y le rodeo el cuello pero él me besa y mientras mi boca es devorada por él, unas de sus manos están en mi trasero y la otra en mi cabello jalándolo cada vez más fuerte y dándome a entender cuanto me desea
Maximiliano: aquí no vamos tengo hambre
Adriana: pues yo tengo hambre de comida de verdad
Maximiliano: pues usted perdió y yo gane tú serás mi cena y después tú comes
Me llevo escaleras arriba y empezó a besarme apenas entramos a una habitación me pega de la pared y empieza a bajar la mano hasta que llega a mi cachetero y lo va bajando pero no iba a pasar por las botas pero las deja en un punto y mete su mano en mi zona en la que empieza a rozar con los dedos, me sigue besando mientras me lleva a la cama donde empieza a quitarme la ropa y yo le quito la del, me sigue besando u vuelve a jugar con mi vagina con los dedos y sigue ese procedimiento, va dejando besos por mi cuello y sigue bajando por mis senos a los que muerde, chupa y pellizca vuelve a subir y se posiciona para penetrarme en eso cierro los ojos y el dice
Maximiliano: ábrelos.
Adriana: está bien… le digo entre jadeos
Cuando maxi me penetra me duele se queda quieto y empieza a mover las caderas mientras juega con mis senos y es cuando yo empiezo a gemir cada vez más, y veo un deseo un sus ojos no sé si es porque le entrego mi primera vez o porque lo de ciaba al igual que yo, después de envestirme cada vez más dura, siento como me corro al mismo tiempo que el
Maximiliano: vamos a bañarnos para que comas
Adriana: me tengo que para porque estoy cómoda
Maximiliano: pues si quieres me paro y te busco la cena, a lo mejor cuando te pares te duele o ya te duele
Adriana: lo que me conto mi tía duele cuando te intesta de parar,
Maximiliano: bueno que tal si te cargo al baño y nos bañamos juntos
Asiento porque conociéndolo no se iba a dar por vencido, al rato sale y me carga ya en la bañera
Adriana: Maximiliano avías estado con una virgen.
Maximiliano: me puedes decir maxi, y no eres la primera y la última mujer con la que estoy
Adriana: que quieres decir con eso
Maximiliano: que a partir de hoy cualquier hombre que se intente de acercar a ti morirá
Adriana: Maximiliano no puedes hacer eso en mi familia hay cuatro mujeres y cinco hombre
Maximiliano: que me llames maxi, y yo solo conozco a cuatros
Adriana: pues Maximiliano, están los hijos de mi tía Daniela y tío Carlos que se fueron a España hace más de dos años, y llegan pronto
Maximiliano: hablo de hombres fuera de la familia
Adriana: llegas hacer eso y no me vez mas
Maximiliano: bueno confiare en ti
Después de eso me besa y terminamos haciéndolo en la bañera, cuando veo la hora y eran las tres y media