La Historia Entre Los Dos

28 ⌘ Yuriy

Tai se recargó en la barda afuera del gimnasio para tratar de acaparar la poca sombra a las tres de la tarde.

Fiel a su actitud ante los retos, Mia terminó enviándole un mensaje diciendo que tanto ella como Emma la acompañarían a ver el entrenamiento de natación para demostrar que no era gran cosa ver a Alek Ivanov semidesnudo.

El rostro de Tai se calentó mientras miraba a sus pies, arrugando la nariz.

Emma entonces escribió que Tai preferiría verlo sin el traje de baño, y su reacción fue literal caerse del banco en plena clase de inglés.

No pudo ver a Alek a los ojos cuando se juntaron durante la última hora para revisar el proyecto del semestre, a pesar de que la situación entre Anna y Alek había mejorado desde el almuerzo.

Rascó el suelo con la punta del pie. Para ser el primer crush que Tai tenía en la vida, sabía que pensar en ese tipo de cosas estaba por demás, al menos deberían de pasar unos cuantos meses después de salir para considerar incluso cruzarlo por su mente.

—¡Devushka!

Tai saltó en su lugar cuando la voz de Luka la sacó de sus pensamientos. Alzó la vista para encontrarlo saludándola desde lejos mientras caminaba al gimnasio, jalando de la mano a una atropellada Arizona, que parecía seguirlo más a fuerzas que por gusto.

Tai no pudo evitar sonrojarse aún más por la enorme sonrisa que le mostraba Luka, seguramente notando lo acomplejada que se veía a las afueras del gimnasio.

Luka se detuvo, e hizo que Arizona se estrellara contra su hombro y se sobara el brazo que había recibido el impacto. Aunque cuando vio a Tai parada frente a Luka, su característico ceño “anti-Tailime” se hizo presente.

—¡Qué bueno que estés aquí! —Luka parecía complacido de verla—. ¿Viniste a ver a Yuriy?

El nombre fue lo que hizo a Tai desviar su atención de Arizona hacia Luka, un tanto confundida, notando que el castaño mantenía una sonrisa divertida ante su reacción.

—¿A quién?

—¡Oh! —Luka soltó una carcajada que molestó aún más a Arizona, pero Tai seguía sin entender lo divertido de todo—. Alek no te ha dicho entonces.

—¿Decirme qué?

—Hazme un favor, devushka —Luka le pidió sacudiéndose de la emoción—, di ese nombre frente a mi campeón y por favor pon atención a su reacción, quiero que me cuentes cada detalle.

Y sin decir nada más, Luka se arrancó a correr jalando tras de sí a Arizona, que parecía más bien una muñeca de trapo, sus gritos de reclamo haciendo eco en el túnel antes de perderse dentro del gimnasio.

Tai los siguió con la mirada, alzando las cejas ante tan extraña interacción. ¿Alek sabía quién era Yuriy? No entendía la reacción tan divertida de Luka, ¿se suponía que ella debía saberlo? ¿Tal vez era alguien cercano a él?

Estaba segura que iba a terminar sufriendo el resto del entrenamiento si no descubría quién era Yuriy, y por ahora se debatía que podía ser su perro, su hermana o… alguien más. Por eso terminó sacando el teléfono de la mochila e ignoró el mensaje de Mia diciendo que iban en camino para abrir el chat con su hermano.

[Chat con Kaiser]

[Tai]:
Quien es Yuriy?

[Kaiser]:
…

[Ke pAso Ayer?]
[Kai N., Luka M., Serge P., Arizona W., Anna W., Alek I.]

[Serge P.]:
La cosa más rara acaba de sucederme

[Anna W.]:
??

[Serge P.]:
Siento que esto puede ser un presagio para algo malo

[Luka M.]:
Oh! El grandote esta siendo dramático, quiere decir que va en serio
Dime que pudo ponerte tan histérico

[Serge P.]:
Kai soltó una carcajada cuando vio su teléfono

[Luka M.]:
!!!! Eso pasa cada seiscientos años!!! Como pude perdérmelo??
Que estas viendo cochinote?

[Kai N.]:
No te confundas, Markov, no todos somos como tú

[Luka M.]:
Serge, tienes permiso para ver sobre su hombro e informarnos de la causa de este fenómeno natural