CAPITULO 31 - MARCADA

Capitulo 31 - Marcada

Narra Elena: 

Empecé a llamar a James por el celular mientras volvia a la biblioteca y al instante contestó

—«¿Dónde estás?»—Su voz se encontraba agitada y apenas iba a responder cuando levanté la vista.

Eran unos tres hombres aproximandose hacia mí, rapidamente colgue el telefono y fingi estar buscando una musica.

Pero no funcionó; Uno de ellos puso un pañuelo en mi nariz mientras cubría mi boca y todo se tornó borroso.

Desperté en una habitación con fuerte iluminación. Delante de mí estaban otras tres personas vestidas de blanco, y yo me encontraba recostada en una silla.

—Sabe ¿por qué la hemos traído a este lugar? —preguntó el más viejo de todos ellos, y negué con la cabeza—. Creímos que se mantendría al margen, recuerde que es humana y nuestro debe es proteger de los nuestros.

Al instante supe quiénes eran. Los mismos que nos realizaron un traslado a California y apoyaron económicamente para silenciarnos.

—Espero que no haya olvidado el trato. ¿Acaso la vida que está viviendo no es gracias a nosotros? —Recalcó con una risa sarcástica en el rostro—. Mejor pregúnteselo a su hermana, quien esté en una de las mejores universidades a todo pagado. No quisiéramos que perdiera esa beca, ¿o qué tal de casa de sus padres?

Inconscientemente, asentí con la cabeza; Todo lo que decía era cierto.

—Elena —mencionó mi nombre el otro acompañante—. Solo queremos brindarte protección. No necesitas investigar más, solo continúa con tu vida. Quizás necesites desaparecer un tiempo de lo que está allí afuera, y podemos asegurarte que recibirás los mejores tratos aquí.

—Supimos que el alfa James volvió a contactarte, y eso nos tiene preocupados. Si te llega a marcar, podrías poner en riesgo a ti ya tu familia. El estado ya no te protegerá y te convertirás en nuestra amenaza —recalcó la última palabra el último de los tres hombres.

—Te dejaremos ir, pero ya advertida —dijo el primero mientras volvían a cubrirme la boca.

Mi cuerpo se volvió pesado y volvió a caer inconsciente.

Al empezar a despertar de nuevo, mis manos estaban siendo sujetadas por otras manos de forma cálida, y yo estaba tirada sobre una cama. A medida que abría bien los ojos, me di cuenta de que era James. La habitación tenía una iluminación suave por la luna y reflejaba belleza en todo el cuarto.

En un movimiento para estirarme, James se despertó.

— ¿Te encuentras bien? —fue lo primero que preguntó.

Pero no funcionó; Uno de ellos puso un pañuelo en mi nariz mientras cubría mi boca y todo se tornó borroso.

Desperté en una habitación con fuerte iluminación. Delante de mí estaban otras tres personas vestidas de blanco, y yo me encontraba recostada en una silla.

—Sabe ¿por qué la hemos traído a este lugar? —preguntó el más viejo de todos ellos, y negué con la cabeza—. Creímos que se mantendría al margen, recuerde que es humana y nuestro debe es proteger de los nuestros.

Al instante supe quiénes eran. Los mismos que nos realizaron un traslado a California y apoyaron económicamente para silenciarnos.

—Espero que no haya olvidado el trato. ¿Acaso la vida que está viviendo no es gracias a nosotros? —Recalcó con una risa sarcástica en el rostro—. Mejor pregúnteselo a su hermana, quien esté en una de las mejores universidades a todo pagado. No quisiéramos que perdiera esa beca, ¿o qué tal de casa de sus padres?

Inconscientemente, asentí con la cabeza; Todo lo que decía era cierto.

—Elena —mencionó mi nombre el otro acompañante—. Solo queremos brindarte protección. No necesitas investigar más, solo continúa con tu vida. Quizás necesites desaparecer un tiempo de lo que está allí afuera, y podemos asegurarte que recibirás los mejores tratos aquí.

—Supimos que el alfa James volvió a contactarte, y eso nos tiene preocupados. Si te llega a marcar, podrías poner en riesgo a ti ya tu familia. El estado ya no te protegerá y te convertirás en nuestra amenaza —recalcó la última palabra el último de los tres hombres.

—Te dejaremos ir, pero ya advertida —dijo el primero mientras volvían a cubrirme la boca.

Mi cuerpo se volvió pesado y volvió a caer inconsciente.

Al empezar a despertar de nuevo, mis manos estaban siendo sujetadas por otras manos de forma cálida, y yo estaba tirada sobre una cama. A medida que abría bien los ojos, me di cuenta de que era James. La habitación tenía una iluminación suave por la luna y reflejaba belleza en todo el cuarto.

En un movimiento para estirarme, James se despertó.

— ¿Te encuentras bien? —fue lo primero que preguntó y asnetí mientras intentaba sentarme en la cama 

— ¿Dónde me encontraste? —pregunté.

—Ellos me lo dijeron, llamaron por tu celular para que vaya a recogerte al parque cerca de aquí. Revisado que no tuvieras heridas, solo parecías afectado por una sustancia para generar sueño —mencionó cabizbajo—. ¿Fue por mi culpa, no?

—No, James, me buscaban a mí de una u otra forma —respondí.

—No mientas, Elena —se puso de pie—. Yo te puse en peligro y luego terminaste con ellos en quién sabe dónde, desaparecida por horas.

—James, necesitas calmarte; eso no es lo que sucede. Solo fueron a preguntarme algunas cosas que están sucediendo en los últimos días. No hay nada de qué preocuparse —inquirí.

Sus ojos me miraron fijamente, tratando de creerme o de creer que en verdad no tuvo nada que ver.

—Ni siquiera almorzaste, ¿verdad? —finalmente rompió el silencio de unos minutos—. Te traje pizza, aunque creo que no está caliente.

Terminé de comer, y ninguno de los dos se atrevió a mencionar la palabra "marca". Ya no sabía qué elección tomar, así que deseaba que no preguntara nada.

Me volví a tirar sobre la cama y James salió de la habitación, sabía que era dificil para James eso de no poder marcarme durante "Luna Llena".