Loca

Han pasado un año y seis meses desde que que lo ví afuera del edificio de la Universidad de diseño, o creo que lo vi ya no estoy tan segura. Quizás haya sido otra persona muy parecida, bastante de hecho, o quizás me lo imaginé. Es lo mas probable, porque si hubiera sido él, no me habría ignorado, o eso es lo que pienso. Esa situación casi me enloquece. Después de que desapareció a la vuelta de la esquina, caminé aturdida al restaurante tan fuera de mi que olvidé contarles a Valery y a James que me habían aceptado en la escuela de diseño. Pienso en eso mientras dibujo bocetos lo cuál es loco porque hace unos meses pensaba que no podría hacerlo, no podía dibujar ni un gato con círculos, pero hoy estoy aquí con unos bocetos tan bien hechos que no parecen míos y... una nueva amiga.

Gina. Es como la reencarnación de Sheryn pero menos maternal.

El primer día de clases cuando entré al estudio ella estaba sentada en una de las mesas dibujando y me quedé helada por su parecido con Sher, su piel canela, su cabello rizado su cuerpo curvilíneo y las facciones de su cara, es como ver a una Sheryn mas joven y sin preocupaciones, ya que Gina es muy despreocupada y divertida, bastante extrovertida, quizás Sheryn habría sido de esa manera si hubiese tenido la oportunidad de tener una vida diferente. Luego de conocer a Gina que fue unos días después de haber visto a Sergio en la calle, me comencé a cuestionar si en realidad lo había visto. Mi terapeuta cree que lo confundí, que estoy aferrada a las personas que me ayudaron en ese momento y proyecto esa necesidad en nuevas personas, cree que quizás Gina no es tan parecida a Sher, solo es mi cabeza proyectando. Pero la verdad es que juro que lo es, y me gustaría poder tener una foto de ella, también me gustaría poder ir a dejarle flores a una tumba, y a las otras chicas, entonces me doy cuenta de que mis proyecciones son mis bocetos; cada uno es una versión de las chicas del Luxur con un diseño bonito, he dibujado a Sheryn, a Maru, Lois, Erika, Yassira y Anne, esta ultima lleva unas muñequeras rojas, representando sus muñecas abiertas supongo.

Definitivamente estoy quedando loca y me asusta.

Pienso en desecharlos pero antes de que pueda hacerlo Rebeca está al lado mío, observándolos detenidamente, yo espero que los odie pero no lo hace decide que le encantan. ¡No puede ser!

Gina me abraza emocionada y parlotea algo acerca que seré la revelación del año pero yo no le presto atención para nada.

— Emm, Emm... Tierra llamando a Emily Marie Carter.

— Perdón, ¿Que decías?

— ¿Qué si nos acompañas hoy? Iremos por unos tragos a un bar cerca de aquí.

Yo comienzo a negar con la cabeza, y Gina pone su cara de “no empieces“

— No te atrevas a negarte, tu nunca sales de este estudio, vamos será algo tranquilo y yo te llevaré a casa temprano lo prometo.

Ella levanta el meñique de su mano derecha, y después de pensarlo un poco entrelazo el mío con el de ella.

Recuerdo lo que la terapeuta dijo; “ Debes enfrentar tus miedos para poder tener una vida normal “ “Aún eres joven“ y quizás podrías empezar por un par de tragos en un bar.

Salgo del estudio y mientras caminamos hacia el auto de Gina, llamo a James para avisarle que llegaré un poco tarde, se que se preocupa pero Valery lo ha convencido de que debo tener una vida normal, le doy los datos del lugar donde estaré y lo tranquilizo diciéndole que Gina me llevará a casa y que mi celular estará encendido siempre. Llegamos al bar y el resto del grupo ya está ahí, nos sentamos en la mesa y platicamos amenamente Gina pide un par de cervezas y algo de comida, todos nos reinos y charlamos tanto que no me he dado cuenta que me he tomado tres cervezas ya, le hago de señas a Gina que me acompañe al baño y caminamos juntas riéndonos, mientras estoy en el sanitario escucho a Gina salir corriendo mientras grita que debe contestar una llamada urgente y luego la puerta, yo lavo mis manos y mi cara, creo que esas cervezas han hecho efecto, salgo del baño y me tropiezo con un hombre que va saliendo del baño también, me estrello contra su pecho y él me rodea con sus brazos mirándome de una forma extraña.

— Muñeca si quiero algo, solo pídelo.

Yo me estremezco de miedo y le pido que me suelte pero él no lo hace, en su lugar, apreta más mis cuerpo contra el de él y me acorrala contra la pared mientras besa mi cuello y yo siento repugnancia, ese olor de mal aliento mezclado con alcohol que conozco perfectamente me traslada a un lugar muy conocido. Intento pero no puedo soltarme, por un momento dejo de luchar y pienso en permitir que haga lo que quiera, así todo termina pronto, pero entonces recuerdo que ya no soy esa chica y ya no estoy en el Luxur, él está tratando de quitar mis pantalones cuando con mi rodilla le golpeo su partes y salgo corriendo, salgo del Bar un poco perdida y aturdida, siento que voy a caerme al suelo, me pego a la pared y me agacho, completamente asustada y muerta en llanto cuando Gina llega a mi lado.

— ¡Pero que Diablos! ¿Emm que te ha pasado?

Yo no puedo responder lloro asustada como una niña que tiene miedo, mi respiración se vuelve mas pesada y se me dificulta respirar Gina logra subirme a su auto yo me recuesto en el asiento, ella espera verme calmada para comenzar a hablar.

—¿Emm, que ha pasado? Habla conmigo me asustaste.

— No debí ir a ese lugar.

— Esta bien Emm pero ¿por qué? cuéntame, no me iré a ningún lado mientras no hables conmigo.

Gina estaciona el auto frente a la casa, yo estoy un poco mas calmada así que bajo del auto Gina saca su cartera y baja conmigo yo la miro y ella hace esa cara de nuevo.

— Ah no, ni me mires así, te dije que no me iría y no lo haré hasta que estés bien, así que vamos camina.

Estoy tan cansada para discutir y mas con ella que no da partido nunca. Abro la puerta y sin detenernos subimos a mi habitación, le presto una pijama y cuando ya estamos listas para dormir, nos metemos a la cama pero no conciliamos el sueño ninguna de las dos, suspiro y después de pensarlo un poco quizás sea bueno hablar con alguien, podría intentar y decir hasta donde me sienta cómoda.