La Luna Perdida

Hipócrita

Emily

Desperté nuevamente por la luz que entra por el gran ventanal de la habitación. Hoy parece que la nubes grises han dejado espacio para un par de rayos de sol.
Sergio duerme a mi lado, es la primera vez que despierto con él en una cama. Es una sensación extraña a la cuál no estoy acostumbrada.
Intento levantarme los más despacio que puedo para no despertarlo, busco mi ropa y camino hacia el baño, lavo mi cara y me visto. Camino descalza hasta la sala donde me pongo mis botines, ajusto bien mi gabardina verde y salgo del apartamento con la sensación de que es lo correcto.
Siento que el elevador va demasiado lento hoy y que en cualquier momento él despertará y me llevará de vuelta. No es que no quiera, de hecho ese es el problema, que si quiero pero debo volver a la realidad y Sergio nunca ha sido mi realidad.
Finalmente estoy en el primer piso, camino apresuradamente pero antes de llegar a la puerta de salida una voz me detiene.

— Emily
Miro hacia la dirección de la voz y no lo puedo creer. La novia de Sergio está frente a mi. ¡Mierda Emily! Como te olvidaste de ese detalle.
Mientras se acerca a mi me observa detenidamente de pies a cabeza entonces yo hago lo mismo y ¡Dios! Es muy bonita con una par de arreglos en el cabello se vería perfecta como modelo. Definitivamente Sam la amaría.
Ella me extiende su mano y yo no estoy segura de si debo tomarla pero lo hago.

— Nathalie Coleman, Agente especial del FBI department. ¿Crees que podamos hablar? Hay un café a mitad de la calle.

No sé si debería ir pero no aún no he terminado de pensarlo bien cuando asiento con la cabeza y la sigo.
Efectivamente hay un café a mitad de la calle que luce bastante lujoso y elegante, tomamos asiento en una pequeña mesa para dos al fondo del lugar cerca de una ventana con vista a un bonito jardín. La camarera se acerca y pedimos dos Cafés. Nathalie me sonríe y luego comienza hablar.

— Estoy llevando el caso de lo ocurrido en el Luxor de aquí de New York y al parecer tienes cercanía con ese club también. ¿Continuas trabajando para los Jakob?

No entienden lo que está diciendo.

— ¿ Que?

— Tengo en mi poder un video donde minutos antes del atentado estás saliendo del Luxur con el ex agente Manccini. Dado que tu formabas parte de la organización de Jakob en Berlín, no parece coincidencia que estuvieras ahí ese día.

— ¿Formar parte? Yo nunca trabajé para los Jakobs fui secuestrada y obligada.

— Sí, eso dice tu informe, pero a mi me resulta extraño. Una victima de secuestro y trata de blancas decide visitar un club igual y de los mismos dueños del cuál apenas y salió viva.

Entiendo que se escucha muy malo y probablemente no va a creerme pero lo que diré es la verdad.

— Todo fue una coincidencia, yo desconocía la existencia de ese club hasta esa noche.

— Como también es coincidencia que estés trabajando en el Grupo MCC quien es dirigido por Nicolás Mandavier antes Sergio Manccini.

— Si, la empresa no fue mi elección, fue decisión de la universidad en la cuál gané una beca.

— Beca, que el señor Manccini o Mandavier paga en su totalidad, supongo que es por lastima.

¿Que? No, se supone que paga la universidad o bueno una parte. Ella nota mi confusión.

— No entiendo nada.

Ella entrelazas sus manos y comienza a hablar.

— Yo tampoco Emily, para ser sincera fuiste salvada en un operativo en Berlín en el cuál se coordinó tu regreso a casa como la única sobreviviente de ese lugar. Y ahora se te vincula con un ex agente que también está siendo investigado por vínculos con la mafia siciliana y con los recientes ataques a la organización de Jakob, eso sin contar que estuvo a punto de enfrentar un juicio por traición y deserción entre otros delitos.

Yo estoy muda, realmente no sé qué responder.

— Si Sergio te está usando de nuevo, puedes decírmelo, te podré dar protección y te reubicaremos pero debes decirme que es lo que te ha pedido que hagas.

— ¿ Usándome de nuevo?

Ella sonríe, como si se sintiera ganadora al llegar a este punto de la conversación.

— Yo fui parte del operativo en Berlín, y tu fuiste parte del plan desde el inicio, la misión de Sergio era lograr entrar al club y ganarse tu confianza para que dieras información y así atrapar a Vladimir Jakob.

Siento una puñalada en mi pecho.

— ¿Cómo sabían de mi? ¿y porque yo?

Ella sonríe con arrogancia.

— Somos el FBI, ya habíamos mandado agentes antes al Luxur, y eras la más joven, imprudente, ingenua, norteamericana, tenias el perfil perfecto.

La puñalada se siente más profunda, pero ella no lo deja ahí y continúa hablando.

— Para Sergio fue muy fácil dado que fue uno de los mejores agentes, nos daba actualizaciones de los avances contigo todas las semanas y un par de meses después ya tenia lo que necesitábamos. El problema fue que no solo te engañó a ti.

Yo trato de contener las lagrimas para no humillarme más delante de ella.

— A mi nunca me engañó, yo sabia que era parte del FBI y colaboré con él porque quería salir de ese lugar. Él me prometió que me sacaría, ese fue el trato.

— Claro que te engañó, igual que al resto del equipo. Porque Sergio es parte de la mafia siciliana y su hermano era socio de Vladimir Jakob, jugó siempre en dos equipos bajo nuestras narices.

— Eso no tiene nada que ver conmigo, el cumplió su trato. Yo le di la información y él me liberó.

Ella pone los ojos en blanco.

—No, Emily el FBI te liberó. Esta bien te entiendo, estas deslumbrada por él, es increíblemente guapo y atractivo, bastante caballeroso y coge delicioso, lo sé yo también estuve así. Pero la verdad es que estás en otra situación ahora, tu cercanía con él te hace sospechosa dado tus antecedentes con estas organizaciones, y tu deber como ciudadana norteamericana es colaborar con la justicia. Además ¿sabes a lo que que se dedica su familia?




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