La ultima primavera

Han pasado muchas  primaveras desde que la vi en su vestido blanco. Jamás intenté de nuevo reemplazarla en mi corazón.

El éxito profesional me acompaña, tengo un apartamento lujoso, pero tan frío, desolado y triste como mi interior.

Hoy la vi deslumbrante con su sonrisa y mi vida recuperó momentáneamente la luz, el calor, el color que tanto ansío y recuerdo.

Hoy la vi, corriendo tras un pequeñín  cargado con su mochila escolar corriendo tras su pelota. La vi con su misma sonrisa, con otro en la barriga. Se mira hermosa. Se mira feliz.

Allí, parado a media calle la vi, me vio. Vi a ese ángel sonreír una vez más. Vi su rostro cambiar drásticamente y allí escuché mi nombre en sus labios y mi luz se apagó para siempre.