La Mafia Santori

Parte 10- Fin de la fiesta

Aceleré a toda velocidad, el circuito me lo sabía de memoria así que no sería difícil ganar, estaba bastante confiada

Entonces me di cuenta mi padre me había guiñado un ojo, habían cambiado el circuito para no tener ventaja, estaban los de la reunión en el polígono vigilando, voy a tener que emplearme a fondo.

Iba a más de 270 por la carretera, gire a la derecha, por los retrovisores vi como estaba pegado a la trasera del coche intentando adelantarme en las curvas por dentro, iba haciendo zig zag para que no me adelantara, otra curva, bien ya vi el derrape, mi padre ha cambiado el circuito pero ha dejado el derrape como seguro para que gane, aceleré dejándole atrás, me metí en la curva y puse el freno de mano derrapando, quité el freno y aceleré revolucionando el coche, enseguida me cogió, estaba detrás mío usando el mínimo hueco que le dejaba para adelantarme, me cansé de jugar aceleré y pasé la meta

Me bajé del coche rápido, el tío bajo del coche y sacó un arma, me oculté detrás del coche y empecé a oír disparos, cogí un arma de mi coche y me puse mi pinganillo y vi a los chicos, estaban peleando contra otros hombres

-Ivette- me llamó mi padre por el pinganillo

- ¿Se puede saber qué coño está pasando? - di a uno en la rodilla

-Querían secuestrarte, al llegar aquí te han reconocido como mi hija, hemos echado a todo el mundo cuando estabas en la carrera, solo quedan ellos y nosotros

-Y los chicos...- mire rápidamente hacia donde estaban, habían hecho una barricada y los tenían atrapados -Papa tienen a mis amigos, tengo un plan, necesito a dos motos con una cuerda y mi coche

-Intenta llegar a la nave- me monté en el coche y arranqué yendo para la nave de las peleas, aparqué el coche y entré a la nave.

Estaba la nave, la pista y enfrente habían hecho una barricada con coches

-Papa, estoy abajo en el coche

-A tu derecha van dos de mis hombres con la cuerda en la moto

-Necesito un conductor- miré hacia arriba y vi a mi padre dando órdenes y a los francotiradores en las ventanas

- ¿Es cosa mía o vas a hacer la maniobra que usamos en Francia?

-Ya sabes el cebo es importante empezaré a correr, las motos tienen que tirarles, pinchad todas las ruedas, necesito mi coche en cuanto les hayan tirado a todos, les montaré en el coche y vendremos a la nave

-Están todos con le pinganillo te han escuchado, Clark coge el coche, Ivy todo tuyo estaré apuntando a la cabeza de ese imbécil, trae a los chicos

-Buena suerte papa

Me bajé de mi coche, asentí hacia los chicos con las motos, empecé a andar hacia la barricada del enemigo, por lo visto son de los traficantes de personas a quienes siempre estamos interceptando y liberando a las chicas, me puse delante de la barricada

-Ivette- apareció Pedro el jefe - ¿Vienes a negociar?

-Tráeme a los chicos, me quieres a mi

-Así es

-Tráelos a donde estoy yo y yo iré contigo

-Está bien, me fio de ti, si no os matare a todos- hizo una señal hacia sus hombres, trajeron a mis chicos, estaban todos serios, llegaron hasta a mi

-Chicos, en cuanto de un paso adelante corred, detrás mío, tengo dos armas en mi cintura y la mía- les susurré -en cuanto me mueva disparad a las ruedas- dije por el pinganillo

-Vamos reina ven con nosotros te vamos a tratar muy bien

Yo di un paso adelante, escuché los disparos a las ruedas, empezamos a correr mientras disparábamos a los que venían detrás nuestro, las motos venían de frente a nosotros

- ¡Agacharos! - nos agachamos todos y la cuerda paso por encima nuestra, miré hacia atrás y habían tirados a todos con la cuerda, les habían chocado en los pies haciéndoles caer a todos de cara, seguimos corriendo, algunos venían todavía detrás nuestro, vi mi coche donde lo mandé dejar, me monté corriendo y los chicos atrás y Eloy a mi lado, arranqué corriendo, y me metí a la nave, cerraron la puerta y subimos corriendo a mi oficina

-Eso ha sido impresionante- me dijo Chase

-Deja eso para otro momento- abrí mi armario de las armas -coged un arma y vamos- cogí una K47 la cargué y me puse a disparar por la ventana, enseguida los chicos se pusieron a mis lados con más armas acabamos con todos rápido pues los hombres de mi padre también estaban disparando

-Muy bien hecho hija, vete a casa ya recojo yo

-Está bien te quiero papa- me quite el pinganillo

-Me voy a casa, ¿Eloy vienes? - él no me contesto -Así que es eso, te vas a alejar porque no eres bueno para mí- el asintió, salió de mi despacho, esperé mirando por la ventana, se montó en su coche y se fue, una lagrima cayó de mi ojo, hacía mucho que no tenía un amigo, alguien que no fuera de mi familia, y nunca lo hago por esto, te dan de lado -Es vuestra culpa- me gire hacia los 3 imbéciles

-No es nuestra culpa que no tenga lealtad- dijo Chase

-Mira Chase- me acerque a él -Es vuestra culpa, por querer saber cosas que no puede decir todavía, hablar mierda de él y un largo etc., yo me largo haced lo que queráis- salí de mi despacho enfada con el mundo, ni me despedí de mi padre, eran las 6 de la mañana y quería ir a ver el amanecer, me monté en mi Audi y salí disparada a la autopista, quería llegar al acantilado antes de que amaneciera, puse la música a tope y aceleré, estuve cerca de media hora conduciendo, hasta que vi el camino para subir al precipicio, aparque el coche, subí el volumen de la música y me tumbe en el capó del coche, mirando el horizonte, como se juntaba el mar y el cielo

Pensaba en cómo había cambiado mi vida, no suelo ser muy cercana a gente nueva, excepto a los chicos y Eloy, me estoy volviendo una blanda, Eloy se ganó mi confianza, y ni yo sé como

-Casi te secuestran ¿y te vas tú sola?

-Llevo un pinganillo y un chip en el cuello desde niña, es imposible que no me localicen

-Bueno saberlo ¿te puedo contar algo? - se tumbó al lado mío en el capó




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.