La Mansion

CAPITULO 9: EL LIBRO DE HECHIZOS

Lentamente solté a mis acompañantes, que miraban todo el lugar con intriga y un poco de temor al igual que yo, mire al frente encontrando al libro, que estaba abierto, ¿Cómo…?

-bienvenidos al vacío-se escuchó un voz en todo el lugar, los chicos buscaron algún cuerpo humano en todos lados, pero yo de alguna forma no pude evitar mirar al libro que comenzaba a brillar- se nota que eres hija de leila, pequeña bruja.

-¿Quién eres?-mire el libro fijamente-no… ¿Qué eres?- en el salón o ¿espacio? Se escuchó una fuerte y gruesa risa.

-muy astuta, respondiendo a tu pregunta soy un libro de hechizo que ha pasado de generación en generación en tu familia-su brillo azul comenzó a intensificarse hasta el punto en que nos vimos obligados a cerrar los ojos, a los segundos logre abrirlos nuevamente, donde antes estaba el libro se encontraba ahora un joven, un chico de cabellera verde peinado y liso, una vestimenta formal y una mirada seria, pero en sus ojos morados se lograba ver una pequeña chispa de diversión y burla.

-¿Cómo…?-pregunto sin podérselo creer Reed.

-cazador, a ti y al joven no les responderé ninguna duda, al menos si no me interesa y dudo que me llegue a causar algún sentimientos palabras que vengan de mugrosos cazadores-dijo mirando con odio a Reed, que solo se encogió en su sitio.

-¿odias a los cazadores?-pregunte colocándome al frente de mi amigo, el libro me miro con curiosidad- en realidad no me importa tu respuesta solo te diré que si molestas, ofendes, dañas o si quiera dices algo en contra de mis amigos, lo tomare como si me lo hubieran dicho a mí y créeme no me quieres ver enojada y poco me importa que seas un libro, humano, mago, brujo, etc… te hare sufrir mucho-dije cortante y de forma fría, ¿Qué acabo de decir? Dios he defendido a Reed por el simple hecho de que es él, yo nunca defiendo a nadie ¿Por qué a él sí?

-eres valiente o estúpida, igual no….-el libro se vio interrumpido por Eliot que se encontraba delante de él mirándolo con curiosidad.- ¿Qué quieres?-pregunto secamente.

-solo quiero hacer unas preguntas-dijo sonriendo- solo tres preguntas, por favor ¿sí?-insistió dudo que el libro aguante lo terco que puede llegar a ser Eliot cuando se lo propone lo cumple no importa que pase, siempre lo logra, en eso se parece a mí.

-ok-dijo resignado, dudo que se haya podido resistir a los ojos de cachorro desamparado, el arma más letal del tierno pitufo rojo.

-¿Cuál es tu nombre?-el libro cambio su expresión seria a una sorprendida, dudo que haya esperado esa pregunta, yo junto con Reed nos limitamos a observar todo para cuidar a Eliot por su hartaba al libro en forma humana antes del tiempo.

-no tengo-respondió al rato, Eliot hizo un puchero.

-todos tenemos un nombre, ¿Por qué no tienes uno? Y eso no entra en la tres preguntas- ese chico es un genio cuando le conviene, es como un gato combinado con un zorro, es astuto y ágil e inteligente y sabe fingir, aunque dudo que su inocencia la finja, Bastián lo cuida demasiado como para que su mente conociera o siquiera sospechara algo de gran importancia del mundo exterior.

-nunca me lo dieron mis amos-dijo sin mortificarse un poco.

-¿ahora quien es tu amo?-pregunte, el me miro y su expresión se suavizo.

-se supone que serias tú, pero hasta que pase la prueba no te reconoceré como mi ama-dijo mientras con un simple chasquido aparecían unos sillones de color celeste, me senté en uno para dos personas, antes de que el cazador de mi amigo se acercara, Eliot se sentó a mi lado sonriendo inocentemente al de ojos miel que solo suspiro y se sentó en uno individual.

-¿Cuál es la prueba?-no sé porque, pero presiento que no será de mi completo agrado o solamente sea mi exagerada imaginación.

-te la diré después de que tu amigo termine sus preguntas-dijo mirando a Eliot al igual que Reed y yo, el pitufo rojo rio nervioso por toda la atención recibida.

-¿Qué tipo de hechizos posees?-pregunto intrigado, olvidando toda la incomodidad que tenía hace unos momentos.

-todos, pero también se pueden crear nuevos, tengo todos los hechizos que han creado todos los jones no importaba si estaban a kilómetros-dijo orgulloso, creo que tiene carácter de diva, ¿Por qué no me puedo librar de este tipo de personas….cosas?

- se dice o he escuchado que las brujas o brujos al morir no van al mundo de los cielos y tampoco al del infierno ¿adónde van sus almas?- eso no lo sabía.

-haces preguntas raras niño, igual es cierto lo que dices las brujas no van ni al mundo del cielo ni al de abajo, se quedan aquí en el mundo terrenal, pero están en un plano astral, ellos protegen a sus familiares, amigos o con personas que ellos piensan que necesitan ayuda, mayormente son las brujas blancas las que ayudan, las brujas negras hay son otro cuento ellas buscan las desgracias a las demás personas o las atormentan, otras también se vuelven anunciadoras de la muerte con sus gritos, parecidas a las…-lo interrumpí.

-banshee, espíritus femeninos que anuncian las muertes de las familias a las que cuidan ya sea por llanto o gritos que solo pueden escuchar sus familiares, leyenda irlandesa-termine de contar la información que sabía, los chicos me miraron raro-¿Qué? Me gusta leer-me excuse, los muy malditos solo se rieron al menos Reed y Eliot, el libro de hechizo es un cara de piedra, con nada se ablanda, dios.



#21169 en Fantasía
#4482 en Magia

En el texto hay: amor y magia

Editado: 03.07.2018

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.