Es el día en que Zara queda en libertad, afortunadamente fue muy poco lo que tuvo que estar detenida, la espera su familia para recogerla, entre la alegría de verla libre y la tristeza de verla desecha por la pérdida de su esposo. Su madre le abraza y su padre y sus hermanos felices de verla y tratando de animarla le dicen que la aman y que saldrá adelante, su mamá le cuenta que llegará una persona a saludarla, alguien a quién debe agradecerle porque pagó el abogado para conseguir que no la sentenciaran y además estaba gestionando el tratamiento para su hermanita y se había convertido en un apoyo para ellos... Zara intrigada le pregunta: - De quién me hablas madre? - Pues alguien quien dice ser tú amigo y apreciarte mucho, el apareció en el momento justo para ayudar. - No entiendo, la verdad tú sabes que yo no tengo amistades. - Pues hija el dice que te conoció en la finca...mira precisamente acaba de llegar... Zara ve a un hombre llegar en un carro de lujo, al bajarse ve que está muy bien vestido y le cuesta reconocerlo, pero cuando se acerca y la saluda, se da cuenta que sin duda es Uricel... Esto por supuesto la sorprende muchísimo y no entiende por qué aparece ahora convertido en un hombre a simple vista muy adinerado.
Uricel le saluda: - Zara,me alegra verte, en cuanto supe que estabas en problemas quise venir para ayudarte en lo que pudiera, logré contactarme con tu familia y quise apoyarlos en estos momentos tan difíciles, pues sé que son lo más importante para ti.
Zara esta sorprendida, y tiene mucho por preguntarle, pero por ahora sólo le agradece, y le dice que quiere irse a descansar...a ver a las niñas, y saber cómo está todo en la finca, pues sabe que ahora más que nunca debe ser un apoyo para las Ana y Hanna, quienes eran la vida entera de Felipe, y para honrar su memoria quería cuidar bien de ellas.
Entonces a petición de Zara, Uricel y su familia la llevan y la compañan a la finca; al entrar las niñas se avalanchan sobre ella y le abrazan, le dicen que la extrañaban mucho y se aferran a ella, se dicen que se aman y que no van a volver a separarse. Allí están los abuelos paternos de las niñas, quienes han cuidado de ellas...Zara nota de inmediato que no están nada contentos con su llegada, más aún cuando le piden que hablan en privado; - con mucha frialdad le dicen a Zara que debe alejarse de las niñas, -Para nosotros sólo eres una aparecida, y estamos seguros de que planeaste todo para quedarte con la fortuna de nuestro hijo, deberías estar pagando en una cárcel lo que hiciste; Zara prefiere callar pues no tiene fuerzas para pelear, sabe que ellos están dolidos y necesitan hallar a un culpable de la muerte de su hijo, y ella era para ellos la única a quién podían culpar. Pero lo que más le dolía era tener que alejarse de las niñas, las amaba y esto no sería fácil para ninguna de ellas; ellos fueron muy enfáticos en que ella debía irse y no regresar. Y así fue, Zara con ayuda de su familia tomó sus pertenencias y se marchó.
Dentro de poco los abuelos de las niñas se enterarían de la verdadera situación en la que se encontraba su hijo antes de fallecer, por la pérdida total del cultivo, aunque en realidad esto fue sólo la estocada final para una inminente quiebra, pues desde que Don Felipe enviudó todo se fue a pique, esto lo mantenía en secreto ante su familia, pues él era muy reservado en esos temas.
Zara se va a vivir nuevamente a donde su familia, y Uricel se mantiene en contacto con ella, trata de ir ganando terreno a cada oportunidad; aunque Zara no confía del todo en él, en una conversación finalmente ella le pregunta porqué ahora es un hombre adinerado, siendo antes un modesto obrero; Uricel les responde: - Me dieron una herencia de mis abuelos paternos, la verdad no esperaba convertirme en su heredero, pero fue así, ellos tenían una fortuna, y yo siendo su único nieto, soy su heredero universal. A esta versión ella no le da crédito, sabiendo que el padre de Uricel no era de buen proceder y que según el mismo Uricel le contó, era el líder de un grupo delincuencial al margen de la ley, Zara pensaba que este dinero era mal habido, y que Uricel andaba en negocios turbios quizás... pero lo cierto era que su hermana necesitaba el tratamiento médico y Uricel se lo estaba costeando todo, su familia no tenía recursos y Zara ahora estaba intentando reponerse de su pérdida; y pronto se enteraría de una noticia que sin duda, cambiaría su vida ¿para bien?...ojalá pues ella ya no resistía enfrentar más sufrimiento.