Seis años después (Marte)
Hace seis años que llegamos a Marte, lastimosamente ese día, la felicidad no estaba enmarcada en nuestros rostros, pero seguimos hacia delante, nos encontramos con nuestros amigos de chiná, Rusia y África, por fortuna todos se encontraban con salud, readactarnos a la vida en marte nos tomó nuestro tiempo, el planeta no era igual a la tierra, pero poco a poco aprendimos a sobrellevar la vida aquí, trajimos todo tipo de animales y plantas con el tiempo hemos creado un mundo abundante y tranquilo, tenemos reglas para no cometer los mismos erros que en el pasado, contaminar es nuestra elección, solo nosotros temos el poder de cambiar la historia y lograr que no se vuelva a repetir el trágico final de la tierra
- Mi amor en que piensas - observé con una sonrisa a Eric
- En nada amor - lo tranquilice, este dejo un beso en mi muñeca, mire a nuestro alrededor una larga mesa se posaba frente a mi, nuestros amigos reían y comian tranquilos y felices, Ronald, cargaba a su pequeña hija de cinco años en brazos con Charlotte a su lado tratando de limpiar la comida de sus pequeñas manos, Max junto a su esposa se reían por las ocurrencias de Samuel y su novio, Drake se burlaba de su propio hijo, mientras Roy y su esposa Cheney los regañaban para que se comportaran como adultos, Akin y Vidal llamaba a sus hijos que jugaban junto a Faritsha y sus cachorros para que se sentarán a comer, casi al instante recordé a Cassandra y sus últimas palabras,
"Disfruta de los pequeños momentos, cuando estés rodeada de las personas que amas y te aman, se feliz y recuerdame con felicidad"
Ella tenía razón son los pequeños momentos los que importan, los que más recuerdas, justo ahora es uno de ellos, todos mi amigos, mi familia unida celebrando el cumpleaños número cuatro de mi primer hijo
- Mamá ya quiere comer pastel - sonreí mirando a Aron el mayor de mis tres hijos
- Lo sé cariño, en un momento lo partiremos, ve a llamar a tu hermano -
- Si mamá - Aron corrió en busca de su hermano James
- Mirá quien despertó amor justo a tiempo para el pastel no te parece demaciando conveniente- miré a mi esposo Eric acercarse con nueatra pequeña hija de un año en brazos
- Buenos días pequeña dormilona - la tome en brazos mientras esta reía, dandole un beso en su regordeta mejilla
- Despertaste justo a tiempo para comer pastel- esta me miró con alegría en su rostro, esto era lo único que yo necesitaba ver a mis hijos, mi esposo, mis amigos, a mi familia feliz, unida y tranquila, yo no pedía más que lo que ya me rodeaba, era enormemente feliz, Cassandra viviría siempre en nuestros corazones y nuestras memorias, tal y como ella me lo pidió la recordaba con gran felicidad y orgullo, fue la mujer más valiente que conocí y me honraba que mi hija llevara su nombre, por qué ella me enseño que,
"No importa que tan difícil sea todo, que tan perdido y solo te sientas, tienes que seguir buscando tú felicidad y si tienes la valentía y paciensa la podrás encontrar".
FIN