Al estar sola en casa, Camila quiso disfrutar el momento y dormir sin ningún tipo de ruido. Estando en su habitación y acostada sobre su cama, cierra sus ojos e intenta dormir. Cuando de repente, escucha mencionar su nombre. escucharlo, se asombra ya que se encuentra sola, se pone de pie y camina hacia la puerta, considerando que pueden estar buscándola, no es así. Ignora lo sucedido y vuelve a cerrar sus ojos. A los pocos minutos vuelve a escuchar su nombre. Solo que esta vez una voz algo tenebrosa lo menciona. Vuelve a ignorar lo que sucede pero esta vez opta por usar su móvil. La casa queda en completo silencio, haciendo que Camila llegue a pensar que esta imaginando cosas. Luego, al pasar más de media hora escucha decir lo siguiente. “Sé por lo que estás pasando, yo también he pasado por eso. Y lo mejor que pude hacer fue suicidarme, no me arrepiento de hacerlo. Hazlo y ven conmigo, te aseguro que no te arrepentirás”.
Camila un poco desconcertada por lo que había escuchado, busco por toda la casa a Johan su primo. Pensando que este le había jugado una broma, para su mala suerte, no se trataba de una broma y solo ella estaba en casa. Se recostó sobre el sofá a esperar la llagada de su familia, a pesar de decir que amaba la oscuridad y todo lo tenebroso, realmente no era así. Era una chica rodeada de miedos y que necesitaba ser salvada antes de que fuera muy tarde. Al estar recostada en el sofá un largo rato vuelve a escuchar cosas, solo que esta vez no es solo una voz.
-No debes temernos. Estamos contigo para cuidarte y hacerte bien, te acompañamos en todo momento, estamos esperando el momento en que decidas venir con nosotros.
-Déjanos llevarte al lado oscuro, no tengas miedo. Dejemos el mundo detrás. No necesitaras la luz, es bueno vivir en el lado oscuro, suelta la luz y ven con nosotros.
Camila, muy asustada por lo que estaba escuchando solo opto por decir que la dejaran en paz. En ese mismo momento, escucho que alguien tocaba la puerta, corrió a abrirla, al hacerlo sus abuelos y su madre estaban ahí. Y mientras su madre le preguntaba a quién le gritaba esas cosas ellos acomodaban las compras.
-¿A quién le gritaste eso?
-No era nadie mamá.
-¿A caso estás volviéndote loca?
-No mamá, solo estaba enviando un audio.
-Bueno.
En vez de contarle a su madre lo que realmente sucedía, se quedo callada para no ser vista como una loca. Sin saber que ocasionaba un problema más grande de esa manera.