CAP 98:
-Me iré de regreso cuando antes.-dijo Vera.
Había venido por la fiesta familiar de Philip, con todo eso terminado era momento de volver a su negocio, no podía dejarlo abandonado por mucho tiempo, aun si desease jugar a la familia feliz por el bien de su hijo, se le hacía complicado.
-No he pasado tiempo con mi hijo, te lo llevaras de regreso...estas siendo egoísta nuevamente. -Hablo philip.
Deseaba pasar tiempo con su hijo, su bello Matteo, lo único que le hacía pensar que los años de espera no fueron un desperdicio y tal vez la razón por la cual dejo vivir a Vera, cuando tenía deseos de matarla por lo que le hizo. No había podido conversar con él, en el viaje que hizo a Italia solo pudo presentarse, sin embargo, tuvo que regresar por algunos asuntos por lo que no pudo verlo, creyó que con el viaje de Vera podría ver al niño, pero quien pensaría que solo hubiese venido por unas horas y ahora debía regresar sin darle la oportunidad de interactuar con su hijo.
-No te estoy negando conocerlo, él se quedará contigo por una semana...su niñera lo acompañara, pero yo debo volar de inmediato.
Philip se acercó a ella y él tomo su mano, la habitación del departamento era oscura con unas pocas lámparas alumbrando, tal vez por esa razón la escena parecía más romántica de lo habitual.
-Quiero pasar tiempo con mi esposa e hijo, quiero que interactuemos con el niño como una familia de verdad.-dijo Philip.
-Yo...necesito arreglar unos asuntos importantes en Italia, no puedo retrasar mi vuelo. -dijo renuente Vera, no quería quedarse e interactuar como una familia, acostumbrarse al calor de un hogar era algo que le daba tanto miedo, perdió tanto aun siendo niña por la ambición de sus tíos que ahora no tenía fuerza ni valor para soportar otra perdida si se daba.
Philip vio miedo e inseguridad en sus ojos por lo cual se acercó más a ella, al tomarla con la guardia baja, rodeo su cintura y luego levanto la mano que tenía sostenida para besarla. -en verdad debes irte, porque no lo pospones. -dijo en un tono seductor.
Vera no pudo evitar sonrojarse, pero retiro la mano y casi como huir giro para despejar su mente y retirar el color de sus mejillas, antes de decir. -creo que sabes mi opinión respecto a esto, te lo dije, no dejare mis negocios tirados solo por jugar a la familia feliz, ahora me voy. Matteo debe estar esperándome.
Philip la volvió a atrapar esta vez rodeándola por la parte de atrás y hablando cerca de su oído...-quédate esta noche, Matteo debe estar durmiendo...quédate un poco más.- dijo Philip antes de comenzar a repartir besos por su cuello.
El corazón les latía aceleradamente a ambos, aun así, mientras Philip trataba de demostrar su interés completo por ella, Vera trataba de ocultarlo. Vera giro y lo miro a los ojos antes de rodear su cuello con sus brazos.
Estas seguro de lo que haces. -dijo Vera, antes de darle un beso fugaz-esta vez no estas ebrio y no me estoy aprovechando de nadie.
-Mientras estes a mi lado nada de eso importa, quédate conmigo y con nuestro hijo. -dijo Philip mirándola con una sonrisa y devolviéndole el beso.
-Esta es tu manera de pedirme que me quede, apelas a mis bajas pasiones Philip.-dijo Vera antes de darle un beso apasionado.
Respiraciones entrecortadas se esparcían en el departamento, mientras se fundían en un apasionado beso. Se separaron por la falta de respiración, Philip recorrió con la mirada el cuerpo de Vera, el vestido negro que traía definitivamente le sentaba bien, después de esos cortos segundos Philip la volvió a besar, pero esta vez con mucha vehemencia y pasión, sus manos bajaron y se deslizaron por debajo de vestido de Vera. La cargo y llevo al sofá aun sin dejar de besarla. La dejo caer y para continuar besándola, pero esta vez sus besos se dirigieron a su clavícula.
-No responderás Philip. Esta es tu manera de pedirme que me quede.
Philip dejo de besarla, pero sus manos aun seguían tocando cada parte del cuerpo de Vera, antes de responder con una voz rasposa cerca de su oído. - Tal vez...lo estoy consiguiendo.
Vera tomo un respiro antes de responder de una manera sensual. - qué pasaría si te digo que …-levanto un poco la rodilla par frotar la intimidad de Philip que se encontraba encima suyo y cuando consiguió la reacción que quería continuo. -no, pero puedes intentarlo la próxima vez. -dijo antes de empujarlo, aprovechando su confusión y salir del departamento corriendo.
Philip se quedó sentado en el sofá antes de escuchar la puerta cerrarse y gritar. - MALDICIÓN...VERA, esta me la pagas, ahora me tocara una ducha fría...sin duda alguna esa mujer me trae loco.
***
A la mañana siguiente Philip fue al hotel donde se estaba quedando Vera y donde se encontraba su hijo y se encontró con la noticia de que ella se había ido.
En la suite solo se encontraba la niñera y su hijo que aun descansaba. Ordeno a la niñera que empacara todas las pertenecías del niño ya que él se lo llevaría.
-Pero señor...la señorita Vera, dejo ordenado que no me separara del niño.
Philip escucho todo lo que dijo y no le gustaron sus palabras de principio a fin, así como su mirada.-Hay muchas cosas que debes saber, primero Vera es una señora...es mi esposa, segundo, soy el padre del niño y decido sobre si llevármelo o no.
-Yo...este...la señorita, digo la señora...ella dijo que no me separara del niño.
Philip escucho su discurso y su enfado no podía detenerse. Era un hombre sereno y de hecho era el que más mantenía la cordura en su familia, sin embargo, cuando se trataba de Vera o su hijo perdía los estribos con facilidad. Tomo su celular y marco a Vera.
Vera acababa de aterrizar cuando recibió su llamada. Al contestar su llamada, lo primero que escucho fue la interrogante de philip.
- ¿Por qué no te quedaste?